Mario Cáffaro
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“En paz” define Marcos Peña sobre cómo se está produciendo el cierre de listas de Cambiemos con miras a las elecciones de medio término donde se renovará la mitad de la Cámara de Diputados y un tercio del Senado.
El jefe de Gabinete atiende -vía telefónica- a Mirador Provincial para analizar el panorama electoral que ofrece la provincia de Santa Fe donde ratifica que la lista que respalda la Casa Rosada es la encabezada por Albor Cantard, Luciano Laspina y Lucila Lehmann, pero también opina sobre la reaparición pública de Cristina Fernández, el reclamo de ciudadanos ante los tribunales federales porteños y la relación con la provincia de Santa Fe tras el frío acto por el Día de la Bandera. “Tenemos una relación institucional correcta”, pero asegura que “nunca aplicarán la
discriminación que hizo el kirchnerismo para con Santa Fe”.
—Los cierres de listas nunca son tranquilos en la política. ¿Cómo observa el panorama electoral de Cambiemos en Santa Fe?
—En principio, Cambiemos tiene una lista que representa el acuerdo de los partidos fundadores y que expresan un muy buen equipo para la provincia de Santa Fe que es la liderado por Nicky Cantard, Luciano Laspina y Lucila Lehmann.
Esa lista refleja lo que pasó en todo el país y que es un alto nivel de consenso para representar a nuestra fuerza política en el marco de los valores y la identidad que venimos trabajando, y en apoyo al presidente Macri.
—¿Pero hay otros dirigentes que competirán por Cambiemos?
—Están en su derecho como afiliados, pero lo que la amplísima mayoría de la fuerza política de Cambiemos refleja es la lista oficial del consenso que surgió en Cambiemos Santa Fe.
—¿Esta lista además de los tres primeros lugares que menciona tendrá a los otros partidos de la coalición?
—Entendemos que sí. Están terminando de definir la integración total, pero claramente esta lista oficial que representa la voluntad de los partidos liderada por Cantard y Laspina creemos que van a estar todas las expresiones representadas.
—La conformación de Cambiemos tiene diferencias en la conformación hacia el interior y se reflejó en el cierre de listas municipales. Por ejemplo, en Rosario, se enfrentan para concejales dos dirigentes del mismo Pro...
—Sí, pero es un caso distinto. Tanto Roy López Molina como Anita Martínez acordaron ese camino de utilizar las PASO para competir. Apoyamos esa instancia y desde lo nacional apoyamos a ambos. Tenemos un gran respeto y cariño por los dos dirigentes, creemos que tienen mucho futuro en Rosario y sabemos que una vez determinado el resultado de la primaria van a estar
ambos trabajando juntos, elaborando una alternativa para Rosario que es muy necesaria.
—En la ciudad capital, ¿se sienten identificados con la lista que respalda el intendente Corral?
—Sí, exactamente, Carlos Pereira representa la lista oficial que lidera el intendente Corral, con quien tenemos una excelente relación y un trabajo muy importante de gestión en todo este tiempo. Es muy importante la conformación de Cambiemos en la ciudad capital y, en base a esta excelente relación que tenemos con Corral, la posibilidad de profundizar allí las cosas que se hacen en conjunto entre el gobierno nacional y la ciudad de Santa Fe.
—Son aliados del radicalismo en la ciudad y en la provincia, pero el radicalismo está partido por su relación con el gobierno nacional y su adhesión a Cambiemos...
—Está bien, pero orgánicamente el partido en Santa Fe ha definido ser parte de Cambiemos y al igual que en 2015, eso fue ocurriendo y va consolidando la opción de que haya un Cambiemos que no sólo representa y defienda la gestión nacional en Santa Fe sino que además presente una alternativa para la provincia de Santa Fe que es muy necesaria.
Otros temas de política
—¿Cómo toma el gobierno las críticas de la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner en el acto de Arsenal y su intención de frenar el modelo de Macri?
—Lo tomamos como de quien vienen. La ex presidenta demostró su actitud poco democrática desde el primer día donde ni siquiera quiso realizar el acto de traspaso de mando a Macri reflejando lo que es su verdadera concepción de la democracia, que es básicamente todo centrado en ella, sin ningún tipo de autocrítica por el país que nos dejaron. Pero también entendiendo que es una expresión legítima, una expresión del pasado al cual la mayoría de los
argentinos no quiere volver y que se verá en estos días si competirá electoralmente o no. Pero con mucha tranquilidad también.
—Hubo muchas críticas en Rosario al acto protocolar y sin público por el Día de la Bandera. ¿Quién resolvió organizarlo de esa manera?
—Fue algo consensuado con el gobierno provincial, aunque después hubo una fiesta popular. Simplemente una decisión basada en criterios de organización.
—¿Cómo está viendo usted la relación entre gobierno nacional y provincial?
—Es una relación institucional correcta. Hemos logrado resolver muchos temas estructurales para la provincia, como el desafío conjunto que hemos hecho en materia de seguridad especialmente en Rosario y Santa Fe; la posibilidad de coordinar muchas tareas vinculados a lo productivo y agropecuario; la posibilidad de avanzar en mucha obra pública como se está viendo en cada uno de los lugares de la provincia. No somos la misma fuerza política, pero es una relación correcta.
—Santa Fe viene reclamando por el pago de la deuda que le reconoció la Corte Suprema de Justicia sobre el final del mandato de Cristina Kirchner. ¿Esto puede generar nuevos conflictos?
—Hay instancias de diálogo para tratar de ponernos de acuerdo. De todas formas, aunque pueda haber diferencias en los criterios, ninguna discusión nunca va a llevar a que la relación sea como durante el kirchnerismo de discriminación o de ataque. Trabajamos con todas las provincias por igual y, obviamente, Santa Fe es una de las provincias más importantes del país y venimos trabajando en muchísimos proyectos de obras y proyectos de desarrollo en general. Eso seguirá siendo así y las discusiones puntuales serán en el marco de cada uno en su tarea.
—Este 20 de junio fue próspero en actos, hubo uno frente a Comodoro Py exigiendo justicia ¿Cómo ve esto el gobierno nacional?
—Desde el primer día dijimos que era muy importante la tarea del Poder Judicial en esta nueva Argentina, de poder dar respuesta en muchos temas. Siendo un poder independiente, no nos íbamos a meter en el día a día y eso es lo que hemos hecho, pero hay una parte de la ciudadanía que le quiere reclamar resultados y creo que lo más importante en estos temas, particularmente por el reclamo, de las causas de corrupción es que haya una resolución lo más rápido posible en general, cuidando siempre las garantías debidas. La dilatación de causas por 8 o 9 años, atentan contra la confianza de la ciudadanía en el Poder Judicial y por ende en todo el sistema.