Ciro Seisas
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Al rotundo triunfo de Cambiemos en Rosario, que se llevó alrededor de 150.550 votos, más que triplicando los 43.660 del Frente Progresista, hay que sumarle las expresiones individuales que lograron tallar su lugarcito y que con expectativa irán ocupando las nóminas para concejal en las generales de octubre. A las previsibles nóminas de Cambiemos -encabezará Roy López Molina e irá segunda Anita Martínez-, hay que añadir la del Frente Justicialista con Roberto Sukerman que se quedaba con los primeros cuatro lugares. El Frente Progresista (Pablo Javkin imponía su nómina) y con el desembarco de Ciudad Futura (Eduardo Trasante a la cabeza), hay otras cuatro que se garantizaron su ticket a las generales. Son las listas de Daniela León (1 Proyecto Santafesino), Carlos Cossia (Espacio Grande), Majo Gerez (Frente Social y Popular) y Martín Rosúa (UCR). Quedó muy cerca Virginia Grisolía (Frente de Izquierda).
Tras un breve receso, la campaña arrancará con más fuerza. El oficialismo rosarino, duramente golpeado por el resultado, promete pelear voto a voto para recuperar lo perdido. La creencia es que tanto el peronismo con Sukerman como el oficialismo nacional de Cambiemos, con Roy López Molina, han alcanzado su techo de votos, dejando sólo espacio para el crecimiento del socialismo, que en generales, en 2015 al menos, obtuvo resultados de remontada. La aparición en juego de Eduardo Trasante con la alternativa de cariz ‘progre‘, como la construcción de León junto al peronismo massista parecen desmentir ese rumbo. Pero todo está por verse.
Roy duplicó los votos de su rival en las seccionales céntricas y macrocéntricas. Recién luego de la novena sección el apoyo a López Molina comienza a descender del 60% de los votos de su interna. En los barrios en que perdió llegó casi al 50%. Allí los números emparejaron para el lado de Anita Martínez. Pero secciones clave como Fisherton apoyaron también a López Molina. Anita se quedó con barrios populosos como Empalme Graneros, Belgrano o Barrio Ludueña.
A Sukerman le fue mucho mejor en su interna. Dentro de un universo de 89.438 votos, sacó alrededor de 49.850. Con 8 competidores, sacó no menos del 55% en los barrios del centro y macrocentro. En la Rosario profunda y barriadas obreras, sacó más y superó incluso el 65%.
El Frente Progresista llevó la peor parte. De un universo de 43.660 votos válidos emitidos a su favor, la propuesta que encabeza Javkin se llevó 35.807. Representa más del 82% de su interna, pero esa interna es chica. En las primeras seccionales, del centro y macrocentro capturó siempre encima del 80% de los votos, pero con números que oscilaron en 2.500 y 2.000. Pero a medida de que uno se adentra a las seccionales barriales, el conteo fue calamitoso: en muchos casos no llega a 1.000. Un claro mensaje de descontento de los barrios más alejados, que crecieron en los últimos años acumulando demandas de servicios. No importa el ritmo de gestión que se diga que se lleva, no alcanza luego de más de 25 años de gestión. El margen de maniobra es indudablemente poco.
Diputados
En cuanto a las votaciones para la Cámara de Diputados de la Nación, en el departamento Rosario los números muestran un equiparablemente pobre desempeño del oficialismo. El Frente Justicialista sumó sus expresiones con 208.600 votos. Se llevó el 31,02% con Agustín Rossi y Alejandra Rodenas a la cabeza. El desagregado es así: Unidad Ciudadana 134.096 (64,25%), Nuevo Espacio Santafesino 70.632 (33,84%), Compromiso por Santa Fe 3.967 (1,90%).
Cambiemos, encabezado por “Niky” Cantard, alcanzó 154.342 votos (22,94%). Hay que tener en cuenta que no tuvo interna real. Para el Frente Progresista, la lista de Luis Contigiani, a la que el gobernador Miguel Lifschitz le puso el cuerpo, fueron 58.797 votos. Es decir, el peronismo y Rossi, que ganaba internas pero perdía generales históricamente, casi lo cuadruplicó.
A Lifschitz ninguna elección le resultó fácil. Ganó por un margen muy exiguo de votos la intendencia de Rosario en 2003, no compitió para gobernador en 2011. En 2015 perdió una interna y ganó por un margen ínfimo a Miguel Del Sel en la gobernación santafesina. Si hay algo que conoce es la elección reñida. Es un dato no menor que seguramente sabrá utilizar para obtener alguna remontada.