Pablo Rodríguez
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La marcha partió desde la casa de la familia Ibáñez, y realizó un recorrido por distintas calles, pasando por el club Unión y Cultura y terminando en la plaza principal. Allí tomó la palabra el periodista Alejandro Guerrero, quien brindó palabras de fe y apoyo a sus seres queridos. Luego hablaron integrantes de la familia, así como los amigos de Juan Cruz.

En varias ocasiones los presentes rompieron en aplausos y se reclamaba “¡justicia!”. Sobraron los abrazos a los familiares y muestras de apoyo incondicional. También se repartieron algunos folletos, los cuales una amiga de la familia solicitó que se hagan visibles en vehículos y comercios de Murphy y la región.

Sonia, la mamá de Juan Cruz, se mostró agradecida y reconoció que nunca imaginó que tantas personas los iban a acompañar: “Esto no nos devuelve a Juan, pero nos ayuda a reconfortar el alma, a seguir adelante y nos da fuerza, porque esto no va a quedar así”, aseguró. “Apelo a la señora jueza, quien es madre, que se ponga en mi lugar, y a los funcionarios provinciales y nacionales por favor velen por la seguridad de nuestros hijos. Por esos mismos chicos que tienen el sueño de ser médicos, ingenieros, abogados o buenos laburantes. Piensen en ellos, por favor, cambien las leyes. De todas maneras, vemos que la Justicia, por ahora, está actuando bien. Tanto la fiscal como la jueza de menores nos abrieron siempre las puertas. Sin embargo, hay que esperar. En principio, estamos conformes, pero insisto en que deben cambiar las leyes y hacerlas cumplir. No quiero pena de muerte, que sea perpetua y que se haga justicia”, resumió.