Belén Fedullo
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Naara Candioti y Brisa Andino concurren a la escuela técnica que la Facultad de Ciencias de la Alimentación de la Universidad Nacional de Entre Ríos (UNER) tiene en Concordia. Es una escuela emplazada en el barrio Constitución, cercana al barrio Fátima 2, en zonas populares. Por el momento, no tiene edificio propio ya que no llegó aún la partida que estaba prevista en el presupuesto, que contemplaba la construcción de la escuela y un anexo de la facultad en el predio del CIC (Centro Integrador Comunitario) Victor Oppel.

Actualmente la escuela funciona, en comodato, en un predio de la iglesia San Francisco, lugar en el que la facultad construyó salones que se fueron transformando en aulas.
ETC (Elige Tu Carrera) es la primera creación de las adolescentes, una aplicación que fue diseñada con el propósito de ayudar a las personas que no tengan definido un destino tras finalizar sus estudios secundarios.

Con la app instalada en los celulares o tablets, quienes busquen lograrán encontrar opciones claras y podrán optar por alguna de las carreras que están en oferta. La particularidad es que la idea surgió a partir de la observación del problema que la prima de una de las chicas tuvo.

Las protagonistas

Naara comenzó a cursar desde el primer año sus estudios secundarios en la escuela técnica, Brisa ingresó este año, proveniente de la escuela Felipe Gardell. Además de este proyecto una de ellas está involucrada en Jóvenes Por La Memoria, están abocadas al Senado Juvenil también, además de asistir a la escuela y cursar materias convencionales.

Brisa contó a Mirador Entre Ríos: “Me siento feliz porque siempre pensé en ayudar a los demás con algo, en esta escuela me dieron la oportunidad de aprender a programar y dije ‘sí, date la oportunidad’ y me di la oportunidad. Me gusta un montón aprender.

Siento que acá tengo oportunidades de aprender muchas cosas que hoy en día en otras escuelas no podes, y a eso quiero aprovecharlo al máximo, porque son oportunidades que nos dan y tenemos que disfrutar”.

Por su parte, Naara expresó: “Me siento orgullosa y feliz porque somos las dos primeras mujeres concordienses en hacer una aplicación, y que nos den la oportunidad es muy bueno, estoy contenta porque nos tocó a nosotras”.

Sobre la herramienta tecnológica que idearon, Brisa indicó: “Un domingo fui a la casa de mi prima. Ella estaba estudiando abogacía pero se le hacía costoso y quería dejarlo, entonces empezó a buscar algo como un profesorado pero no encontraba nada que la orientara, le aparecían muchas cosas pero sin definiciones. Como nos habían pedido ideas de aplicaciones que ayudaran a alguien se me ocurrió esa. Puede ser que sirva no solo a quienes terminan secundaria sino también a personas mayores”, y destacó que están “haciendo lo posible por que la aplicación salga este año y cuando descarguen queremos que encuentren lo que buscan los chicos”.

El proyecto y la emoción

Naara y Brisa estuvieron acompañadas por la licenciada Jésica López, profesora que las impulsó a formar parte del club de Chicas en Tecnología, un programa social colaborativo que está dirigido a mujeres jóvenes en nivel secundario de todo el país, al que se puede acceder de manera libre y gratuita.

En diálogo con este medio López contó: “Siento mucha emoción. Estoy feliz por ellas, porque le pusieron mucho esmero, mucha dedicación y esfuerzo. Este taller era extra, lo hicieron por su cuenta, con ganas, motivadas y curiosas por aprender algo nuevo y llegaron hasta este momento. Están en el prototipado de la app, casi culminando, para su próximo envío y subida para que se pueda descargar y utilizar la aplicación”.

Sobre el proceso, comentó: “Ellas pasaron por diferentes problemáticas, la idea era que pudieran resolver algún problema social, creando una aplicación para celular. Tuvieron diferentes encuentros en los que fueron aprendiendo sobre la búsqueda de problema, en un principio pensaban en problemas muy amplios y les resultaba complicado ajustar y pensar como podrían volcarlo en una aplicación. Además no sabían nada de programación y empezaron desde cero, fijándose en algunas cosas que nos enviaban a los profes y fueron adquiriendo los conocimientos acompañadas en las aulas de la facultad”.

Al comienzo del programa las alumnas tuvieron que adaptarse al programa “App inventors”, creado en un instituto de tecnología de Massachussets.

Acerca de la elección y definición del problema que quieren resolver, López explicó: “Las chicas sortearon varias etapas para llegar a la concreción de crear la aplicación. La idea surgió de Brisa, porque ella observó que su prima estaba buscando un lugar en donde estudiar y no encontraba referencias, así que de ese modo pensaron en resolver este problema, por el que quizás también pasarán ellas”.

Las ganas de servir de las jóvenes no se agotaron en la proposición de la idea de ayudar a los estudiantes que tuvieran acceso a internet, sino que se ubicaron en varios contextos y fueron más allá.

“Plantearon cómo la app podría utilizarse sin necesidad de conectarse a internet, porque ambas viven en barrios que no tienen acceso a la conectividad. En donde está la escuela también lo de las conexiones es un problema, entonces pensaron en que se pueda descargar y luego pueda utilizarse sin necesidad de tener una conexión”, comentó la docente y analizó: “Estas ideas también solucionan un problema social”.

La aplicación todavía no está disponible, pero las creadoras y sus asistentes ya tienen fechas estimativas para el lanzamiento. “En el PlayStore no tenemos una fecha exacta, pero debe estar terminada a principios o mediados de noviembre para enviarla. Lo que falta es poco, la estética más que nada, definiendo colores y demás”, explicó la profesora.

“Las alumnas pensaron en chicos que no sepan qué seguir, o que tengan definido pero no sepan en dónde, entonces crean una especie de test vocacional que pueda dar con el perfil del chico que no sabe aún qué quiere estudiar, y por otro lado un buscador que tiene información de las carreras en las que están interesados en alguna carrera en particular”, describió López y agregó:
 “La idea a largo plazo es poder poner algunos videos de quienes son ‘influencers’ en este momento, en los que cuenten por qué estudian alguna carrera, de qué sirve, y en dónde se puede cursar, pero esto es un proyecto a futuro”.

A su vez, la licenciada valoró que “nosotros dimos el primer empujón y el primer paso para que pudieran comenzar con este proyecto y desde acá seguirán en otros lugares, quizás ganen becas, así que estamos felices por este logro maravilloso”.