Redacción Mirador Entre Ríos
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La fundación Propuesta Solidaria llevó su misión humanitaria a la comunidad wichí que habita en el Impenetrable Chaqueño. “Fuimos a llevar un poquito de alivio, siempre hay mucho para hacer y lo que nos parece poco a nosotros, significa mucho para ellos”, comentó la voluntaria Analía Fabrega, quien diálogo con Mirador Entre Ríos y detalló la experiencia que vivieron en un territorio en donde las necesidades ganan por goleada.

“Nos encontramos con mucha pobreza, como siempre, pero más que lo habitual. Las personas padecen muchas enfermedades y los chicos están desnutridos”, relató la voluntaria y agregó que “comen una sola vez al día, después se mantienen a mate, secan la yerba al sol y hacen algún mate cocido con torta asada. La comida de ellos es muy básica, es todo a base de harina y por eso están tan mal nutridos”.

Fabrega con este viaje cumplió su quinta misión y relató que durante los dos días que estuvieron en el Impenetrable el trabajo fue arduo. “El primer día hicimos un recorrido por todos los parajes. El segundo fue el día fuerte, empezamos a trabajar a las 7 de la mañana y terminamos a las 8 de la noche, de corrido”, expresó la voluntaria y se sinceró: “Es un mimo que le hacemos a ellos y a nosotros también, es algo recíproco”.

La comitiva de Propuesta Solidaria fue de 22 personas, entre ellos viajaron tres médicos voluntarios, quienes controlaron las afecciones que padecen los wichís por las pésimas condiciones en las que viven. “La atención médica que se hace es básica, pero pudimos comprobar que el 90% de la población están chagásicos. Esto crece cada vez más y se ha vuelto una epidemia que no sabemos como combatirla”.

Salir adelante

La fundación paranaense lleva su ayuda a 140 familias, que están compuestas por más de 700 almas wichís que habitan en Paraje Techat. Uno de los hombres de la comunidad lleva adelante una escuelita para que los chicos eviten el analfabetismo, para ayudarlo, los voluntarios les llevaron elementos indispensables. “Pudimos llevar libros y útiles escolares. Para más adelante está la posibilidad de plantar árboles, hacer huertas para que aprender a cultivar”, indicó Fabrega.

Empero, entre tantos problemas que presenta el Impenetrable, la falta de agua potable para el consumo saludable es uno de ellos. A eso hay que sumarle que en la zona llueven pocos milímetros al año o caen grandes precipitaciones que arrasan con todo, como sucede desde las últimas semanas en este sector árido del noreste argentino.

Casi una década de solidaridad

La tarea solidaria de la fundación comenzó hace nueve años, impulsada por Ana Salas, quien es la actual presidenta. Hace cinco años van al Impenetrable Chaqueño, pero previo a definir ese lugar para llevar un poco de calma, viajaban pueblos vulnerados de Salta y Tucumán. La próxima misión para los voluntarios está prevista para octubre/noviembre.

“Para esta misión —que concretaron a fines de abril— estuvimos muy complicados para conseguir alimentos, llevamos un poco menos de la cuenta porque hubo poca participación de la gente para donar”, contó Analía y sostuvo que estuvieron a punto de suspender la misión: “Por suerte a último momento ‘cayó del cielo‘ un buen dinero que nos permitió comprar alimentos”.

Sobre estos contratiempos, la voluntaria entendió que la situación económica del país influye en todos los aspectos, ya que varios voluntarios no pudieron viajar. Entre ellos faltaron a esta misión los veterinarios, profesionales fundamentales debido a que la vulnerabilidad que sufren los animales repercute directamente en las personas por la transmisión de enfermedades. “En invierno duermen junto a los animales y el contacto con los chicos es permanente”, dijo.

El camión repleto llevó, además de productos alimenticios, camas, colchones, cobijas, agua potable y demás elementos para que el cruel invierno del Impenetrable afecte lo menos posible a la comunidad. Cada vez que visitan a la comunidad chaqueña, la fundación lleva material para construir una casa de pallets, ya construyeron ocho. En esta ocasión no pudieron llevarla, pero sí verificaron las que están construidas e hicieron algunas mejoras.

Para ayudar

Con la mente puesta en la próxima misión, Propuesta Solidaria empezará a organizar diferentes eventos, desde bingos hasta ferias de ropa, ya sea para juntar fondos para comprar los insumos para sus misiones, pagar el camión que traslada las donaciones y al mismo tiempo mantener a flote la fundación, con el alquiler de la sede.

Los productos que más precisan recolectar son: leche en polvo; agua envasada; cacao; yerba; aceite; azúcar; arroz; polenta; sal; harina; fideos; mate cocido; té; pañales; ropa para bebés; colchones; frazadas; alimento para perros.

Para colaborar, los interesados podrán contactarse vía Facebook en la Fan Page: “Fundación Propuesta Solidaria”, o por teléfono al 343-4055341.