Carlos Retamal
Un nuevo crimen sacudió a Villa Gobernador Gálvez. El tercer asesinato cometido en esa ciudad en lo que va del año tuvo como víctima a un joven de 23 años y como trasfondo una pelea con otro muchacho por causas que se investigan. El hecho ocurrió en una esquina del barrio Pueblo Nuevo, a menos de 200 metros de donde, el 21 de febrero, mataron a un hombre (y dos días más tarde asesinaron a su hermano en la puerta del cementerio de esa ciudad).
El violento episodio ocurrió poco antes de la 1 de este jueves 11 de marzo, en la esquina de Rivadavia y General López, a muy pocos metros de avenida Circunvalación.
Según indicaron fuentes policiales a El Litoral, un rato antes, dos jóvenes que se desplazaban en moto mantuvieron una discusión en otro punto del barrio Pueblo Nuevo y pocos minutos después, la disputa verbal siguió en la esquina donde finalizó todo.
La reyerta terminó en forma abrupta, cuando uno de los jóvenes sacó de entre sus ropas un arma de fuego y le efectuó al otro al menos 3 disparos, dos de ellos impactaron en su cuerpo, uno en el brazo y el otro en el cráneo, por lo que cayó y quedó tendido en el suelo.
Mientras el atacante se daba a la fuga en la moto, vecinos de la zona salieron de sus casas y al ver la escena llamaron al 911. Al rato llegaron al lugar varios policías, que constataron la muerte del joven, que fue identificado como Ricardo Benavidez, de 23 años.
En el lugar se secuestraron algunos estupefacientes, varias municiones y un arma de fuego (que estaba escondida en el tronco de un árbol).
El fiscal en turno de la Unidad de Homicidios Dolosos, Adrián Spelta, ordenó a personal del Gabinete Criminalístico el relevamiento de cámaras de la zona y la toma de testimonios a vecinos.
En base a datos preliminares de la investigación, se allanó la vivienda del principal sospechoso del crimen, donde se hallaron municiones calibre 22, una moto que se investiga si fue la usada en el hecho, dos motores de moto con la numeración limada y 6 plantas de marihuana. También se detuvo a una mujer de 54 años, madre del principal sospechoso, quien al cierre de esta edición continuaba prófugo.
Este es el tercer asesinato en Villa Gobernador Gálvez en lo que va del año, el 8° en lo que va de marzo y el 44° en todo el 2021 en el departamento Rosario.
Los otros dos crímenes tuvieron como víctimas a Javier y Marcelo Procopp, de 36 y 45 años, respectivamente. El menor de los hermanos fue asesinado el 21 de febrero en la puerta de su casa, ubicada en Edison al 800 (a dos cuadras de donde cayó muerto Benavidez) y el mayor sólo dos días más tarde, en la puerta del cementerio municipal de Villa Gobernador Gálvez, cuando esperaba la llegada del cortejo fúnebre de su hermano.
Voceros de la investigación de estos dos crímenes manejan la hipótesis de que Javier fue asesinado por error, ya que los sicarios que en la noche del domingo 21 le propinaron al menos media docena de balazos, uno de ellos en el cráneo, estaban buscando a su hermano Marcelo, quien en ese momento estaba de viaje.
El mayor de los Procopp también fue víctima de un ataque sicario, perpetrado en horas de la mañana del martes 23 por 4 personas que se desplazaban en moto y que, antes de la llegada del cortejo fúnebre, lo rodearon casi en la puerta del cementerio y, a la vista de familiares y de vecinos de la zona, le efectuaron al menos 12 disparos casi a quemarropa, varios de ellos en la cabeza.
Marcelo Procopp estuvo vinculado a la familia de Luis “Pollo” Bassi, a quien se lo asoció al crimen del líder de la banda Los Monos, Claudio “Pájaro” Cantero, ocurrido en mayo de 2013 en la puerta de un boliche, ubicado en Villa Gobernador Gálvez.
Esa muerte inició una saga extensa de crímenes, que comenzó con familiares de los supuestos asesinos y también con gran parte del clan Bassi (Leonardo y Maximiliano Bassi, hermanos del Pollo, muertos en octubre y diciembre de 2013 y su pare, Luis Ángel, asesinado en octubre de 2014).