Desde este jueves rige la alcoholemia cero en la ciudad con mayor cantidad de población de Santa Fe, a partir de la aprobación por dos tercios del Concejo de Rosario.
Hagar Blau Makaroff
Entrada la tarde y con algunos problemas de sonido que impidieron escuchar el argumento de unos pocos ediles, el Concejo de Rosario aprobó por votación nominal la modificación de la alcoholemia cero en el Código de Tránsito del territorio rosarino. Del total de ediles presentes (27), hubo 18 votos a favor y nueve en contra.
En el palco y con remeras alusivas se encontraban activistas de Compromiso Vial y familiares de víctimas de siniestros viales, como Cintia Pizorno, que perdió a su marido y su hijo hace dos semanas, y como Valeria Tortoz, madre de Facundo Aguirre, adolescente muerto en un siniestro junto a Emi Cáceres provocado por su compañero Federico Gómez en el caso conocido como “Emi y Faku” en una madrugada de verano de 2014.
La emoción se sintió desde el comienzo bajo la alocución de la presidenta del Concejo María Eugenia Schmuck, impulsora del proyecto. Fueron varios los concejales que hablaron de empatía, de pensar en el otro, así como de un fin a la conocida práctica de la especulación con la cantidad de alcohol a tomar para conducir, entre los argumentos para bajar el nivel de alcoholemia permitida de 0,5 a cero en la ciudad.
Entre los opositores, todos del bloque Cambiemos, los argumentos que se repitieron fueron la necesidad de mayor control en las calles -que se fustigó con la falta de radares funcionando y los pocos alcoholímetros-, y la educación vial, para modificar la cultura del manejo.
De esta forma, Rosario se suma a las ciudades de Santa Fe, Reconquista y Pueblo Esther, en lo que muchos ediles calificaron como “el fin de las especulaciones con el alcohol al volante”, dejando latente el terreno ganado en el camino de provincializar la medida, que en septiembre 2019 ya había tenido media sanción en la Cámara de Diputados.
Qué pasará si se registra alcohol en sangre entre 0,1 y 0,5
La concejala Jésica Pellegrini del bloque Ciudad Futura destacó sobre el cierre de la jornada de debate en el recinto que se buscará modificar lo que sucede con las alcoholemias que quedan entre el 0,1 y el 0,5, que hasta ahora eran permitidas. Ese vacío se subsana, explicó Pellegrini “modificando el artículo 45 del Código de Tránsito que refiere a la remisión de rodados, modificando términos para sancionar, con remisión al corralón cuando se detecta al menos un miligramo en sangre hasta el 0,5 hasta ahora permitido”. Según apreció, “esa modificación era fundamental para que el Código de Tránsito no tolere ni un mínimo de alcohol en sangre. Luego se discutirán las sanciones económicas pertinentes”.
A esto se sumó que la concejala del mismo bloque, Luz Olazagoitía, propuso dos proyectos de ordenanza relacionados al tema: “Uno de campaña permanente para ‘el alcohol cero salva vidas’; y una modificación a la ordenanza de presupuesto incrementando las partidas de la Secretaría de Control para que pueda aplicar más controles de alcoholemia”.