Lucía Dozo
Luego del revés judicial del empresario náutico-ganadero Enzo Mariani, quien pretendía quedarse con las 800 hectáreas que ocupa en la isla entrerriana El Charigüé, sobre el río Paraná, y que pertenecen a la ciudad de Rosario, el municipio avanza en el reclamo de las tierras legadas por el filántropo Carlos Deliot para recuperar el espacio lo antes posible. En el marco de una política de preservación y de protección del medio ambiente, allí se podrían desarrollar actividades de investigación, control o monitoreo, sosteniendo también el espacio como destino ecoturístico.
El empresario, dueño de la guardería Henry Morgan, mantiene usurpadas hasta hoy 807 hectáreas -casi siete veces el Parque Independencia- en la isla Charigüé. Para la explotación ganadera en su estancia “La Catalina”, Mariani bloqueó cuatro arroyos con 11 kilómetros de terraplenes provocando un enorme daño ambiental, al cortar esos cuatro arroyos, secar una laguna y destruir el hábitat de miles de especies nativas.
En el año 2020, la Justicia entrerriana le exigió a Mariani retirar las retroexcavadoras con las que estaba construyendo dichos terraplenes y el 30 de marzo pasado rechazó su pedido de quedarse con las tierras que usurpó. Según se indica en el fallo, Mariani alegaba ocupar las tierras durante un plazo que no pudo acreditar, no pagó impuestos de manera periódica y los testigos que ofreció fueron dubitativos, confusos y contradictorios.
“La reserva es hogar de una biodiversidad muy importante del Delta del Paraná que requiere todo el cuidado posible -explica a
Mirador Provincial Pablo Benve, integrante de la Multisectorial Humedales-. Desde hace muchos años los humedales ubicados frente a las costas de Rosario vienen sufriendo el impacto de la acción del hombre, siendo visible el pasado año con los incendios, que produjeron la quema de más de 300.000 hectáreas en la zona del Delta del Paraná, y movilizaron a organizaciones y al municipio a tomar acciones a través de la Justicia”.
Algunos miembros de la Multisectorial forman parte también de la Comisión Multisectorial Legado Deliot, conformada por representantes de ONG vinculadas al río Paraná y sus islas, y por funcionarios de las direcciones generales de la Municipalidad de Rosario y de la Provincia de Santa Fe. La función de este organismo es establecer estrategias de acciones secuenciales que permitan recuperar ambiental, social y culturalmente los lotes, y mantener y fortalecer a los habitantes isleños como los pescadores artesanales, que practican un modo de vida sustentable, sin trasladar valores urbanos a la isla.
“Venimos trabajando desde el año 2013, estableciendo estrategias que permitan recuperar los terrenos cedidos al municipio. Se han hecho relevamientos de flora y fauna, sobre todo de aves. Se instalaron un muelle y pasarelas que conducen a una zona alta donde lugareños serán guías para los recorridos marcados sobre esas tierras. Se evalúa desarrollar cabalgatas y recorridos educativos. Otra de las alternativas es utilizar las tierras para investigaciones académicas: de los humedales pueden tomarse muestras para investigaciones, estudiar especies (animales y vegetales), así como analizar el comportamiento del agua”, explica Benve.
Además, el comité está trabajando con el Ministerio de Medio Ambiente de la Nación para ubicar faros de preservación, unidades dotadas de personal especializado para monitorear de manera permanente y con carácter preventivo cualquier episodio que impacte contra la biodiversidad. Esto serviría no solo para prevenir incendios, sino para establecer rápidamente, en caso de que se produjeran, quiénes son los responsables.
“Este es un momento muy complicado por el tema covid -agrega Benve-, pero de todas maneras venimos trabajando sobre los protocolos necesarios para las visitas guiadas que no se realizan desde 2018 por la pandemia”.
La Multisectorial Humedales ya realizó el año pasado acciones de visibilización para reclamar por esta situación frente a la guardería Henry Morgan, en el barrio La Florida. “Mariani provocó un terrible daño ambiental, todo para la explotación ganadera en su estancia. Esta abarca los llamados ‘tres cerritos’ que están en territorios chaná; en uno de ellos construyó una mansión y en los otros puso maquinaria y ganado que destruyeron reliquias ancestrales, profanando tumbas y provocando una pérdida cultural invaluable. Esperamos que la Justicia y el municipio avancen para preservar este espacio tan importante”, finalizó Benve.
Reserva Municipal Los Tres Cerros El Legado Deliot, ahora llamado Reserva Municipal Los Tres Cerros, es un sitio de 1.700 hectáreas que fueron donadas a la Municipalidad de Rosario por el filántropo Carlos Deliot en 1948. El nombre elegido a través del portal Rosario Participa evoca a los primeros pobladores de la zona. Los Tres Cerros refiere a montículos de tierra construidos por los chaná, indígenas del delta que ocuparon los sectores naturalmente elevados de las islas, como albardones y médanos, pero también hicieron montículos de tierra conocidos localmente como cerros o cerritos, donde instalaron sus asentamientos y enterraron a sus muertos.
Estos cerros o cerritos llegaron a tener tres metros de altura y centenares de metros cuadrados de superficie, constituyendo una notable modificación del paisaje, que era completamente llano. Fueron las estructuras más duraderas y visibles que han erigido las poblaciones indígenas del litoral y en ellas se han encontrado vasijas y restos de cerámica de gran importancia arqueológica.
Estudios de investigadores arqueológicos de la Universidad Nacional de La Plata sobre los Tres Cerros indican que se trata de una elevación artificial a la que se agregaron arcillas, tierras quemadas, huesos y fragmentos de vasijas para aumentar su altura y cohesión. La superposición de capas sirvió, entre otras cosas, para proteger el sitio de las crecidas del río.
Las investigaciones llevaron a concluir que los asentamientos tenían distintas jerarquías, funciones e intensidad de ocupación. En algunos se han diferenciado espacios destinados a actividades domésticas de otros que servían de basurero, con miles de fragmentos cerámicos y huesos de los animales.
Al Legado Deliot desde Rosario Es posible llegar con embarcación propia o alquilando una (la misma debe ser de tamaño mediano para poder navegar por el arroyo Paranacito, cuyo curso es angosto), cualquier día de la semana en cualquier horario. La entrada es libre y gratuita y se encuentra a una hora de viaje desde Rosario. Sin embargo, a causa de la pandemia y la histórica sequía que vive esa geografía desde 2020, el programa municipal de ecoturismo no está en funcionamiento actualmente.
En los senderos y pasarelas es posible encontrarse con ejemplares de árboles y flora nativos y no nativos, cada uno cumple su rol y todos son importantes para mantener el equilibro del ecosistema. Además, en el humedal abundan las aves, mamíferos e insectos. Es un lugar perfecto para disfrutar de la fotografía de flora, fauna y paisajes.