Ignacio Pellizzón | region@ellitoral.com
Por estas horas el Club Ministerio de Obras Públicas, más conocido como “MOP”, ubicado a metros de la estación Fluvial y el Monumento a la Bandera de Rosario, se encuentra bajo la lupa del Concejo por avanzar con obras en sus instalaciones sin solicitar autorización municipal.
Según detectaron desde el Palacio Vasallo, la entidad se encuentra ampliando su área de guardería náutica, para lo cual es necesario contar con permisos de construcción exhibidos, algo que el MOP estaría incumpliendo.
Según contó a El Litoral la edila del bloque Iniciativa Popular (IP), Fernanda Gigliani, los trabajos en el club se están desarrollando “a puertas cerradas”. La legisladora detectó que se construyeron las estructuras para dos naves de camas náuticas “sin mostrar o exhibir ningún permiso de obra”.
El conflicto nace a raíz de que se tratan de tierras cedidas por el gobierno nacional al municipio para la ampliación del Parque Nacional a la Bandera y no para explotarla con fines comerciales. Es que el MOP tiene una sesión precaria hasta el 2030 y el objetivo de esa sesión es que se pueda utilizar el espacio para actividades recreativas, deportivas y culturales.
Lanzarse de forma intempestiva y a espalda de todos a “hacer un negocio de guarderías náuticas desvirtúa ese requisito que se pide en la sesión y, lo que es peor nunca se autorizó una tercerización”, destacó la concejala Gigliani quien realizó acciones concretas para obtener información oficial sobre lo qué está sucediendo puertas adentro del club.
La información le llega a Gigliani gracias a un grupo de vecinos que detectaron movimientos inusuales en el interior del club. Por eso, mediante el aporte de imágenes, pudieron certificar que se estaban desarrollando tareas dentro de la institución en inmediaciones de la guardería náutica.
Para poder realizar obras dentro del MOP, es necesario que las tareas sean autorizadas por el Concejo, con lo cual la edila estima que será imposible que se le otorgue la habilitación, en el caso de que concluyan con la iniciativa.
La concejala señaló que cuando Miguel Lifschitz era intendente de Rosario, el Palacio Vasallo “rechazó un mensaje” que envió para poder ratificar un convenio que autorizaba al club a encarar una obra de 7 mil metros cuadrados, que incluía una guardería náutica para 1.200 embarcaciones, salón de eventos, boliche, locales gastronómicos y comercios.
También se descartó otro mensaje, pero esta vez de su sucesora, Mónica Fein, quien “no juntó los votos” para poder avanzar con el proyecto. Sin embargo, “sí se estableció la obligación del MOP de informar sobre las obras que quisiera encarar para sacar provecho comercial”, aseveró Gigliani.
Es por eso que le extraña que “a los socios se les otorgue una factura que dice Servicios Náuticos Vip SA”. Ante esta situación, la edila pidió en la comisión de Planeamiento que se de a conocer “cuál es la habilitación comercial para explotar esa guardería”. Todavía no hubo respuesta oficial al respecto.
Básicamente, el Concejo requiere que se informe sobre el certificado urbanístico de la obra; visación previa, si se hubiese producido; permiso de edificación, indicando su número y con el correspondiente plano, denuncias, actuaciones referidas a inspecciones y paralización de obra, si las hubiere.
