Gisela Mesa redaccion@miradorprovincial.com
¿Por qué volver al teatro después de la pandemia? Porque el humor sana, contagia y no precisamente de covid-19 sino alegría. Para todos aquellos que esperaban ansiosos que se reabran las puertas del teatro para distenderse un momento a puro regocijo, ¡les traemos buenas noticias! Este viernes a las 21 Maximiliano Sánchez presenta "Humor a Bordo" en el teatro Empleados de Comercio.
En este show, el comediante estampa su sello propio y se divierte trasladando al escenario la vorágine propia de su talento.
Mirador Provincial dialogó con el humorista para conocer esta propuesta artística y como viene atravesando esta apertura post-pandemia.
-¿Cómo estás llevando este período post covid, con todos vacunados y reabriendo los teatros? -Este período post covid es raramente hermoso. Lo que era tabú, prohibición y mal visto, hoy comienza a retomar la habitualidad y muta hacia lo que siempre fue, o sea que podamos ir a un teatro, a un cine, a un recital y que quien tiene deseos de hacerlo no sea mal visto. En resumen, lo vivo con una sacudida felicidad.
-El humor nos agrada a todos, nos hace bien, pero no todos tienen el talento para hacer reír. ¿Cuándo comenzó tu carrera de humorista? -Mis primeros pasos los hice con Gustavo Puchades en el año 2009 aproximadamente, pero debo decir que el humor me atravesó desde que no tengo conciencia… bah… sigo sin tenerla, pero haciendo memoria debo reconocer que ya desde la escuela primaria me anotaba para participar en todos los actos, inclusive en los que no me correspondía, y siempre quería hacer un papel que haga divertir al público. En honor a la verdad debo decir también que no siempre lograba mi cometido, porque a veces no me dejaban actuar ni tampoco me daban papeles en los que tenía que hacer reír. ¿Se imaginan a Sarmiento contando chistes?
-¿Cómo es el humor en cuarentena y post cuarentena? -El humor en cuarentena fue un descubrimiento. Yo no conocía y casi no participaba de la virtualidad, y en tiempos de covid, los streaming y los más de 200 vivos diarios (sin costo alguno) hicieron seguir acercándome a mi público a pesar de la imposibilidad de contacto.
Durante la cuarentena me impuse hacer estos vivos para llevar a la gente un momento en el cual puedan olvidarse del encierro y a través del feedback que ofrecen Faceboock e Instagram emular el estar en vivo compartiendo un escenario o el estar caminando entre las mesas. Quizás parezca loco, raro, poco creíble, pero varias criaturas, yo no les digo personajes, han nacido y otras se han reinventado durante este tiempo de cuarentena y durante este tiempo de diario contacto virtual con mi público. O sea, mientras estuvimos guardados, yo estuve presente en los hogares de no se cuántas familias acompañando el hastío.
Y ahora… ¿qué me pasa ahora en el regreso al mundo?, estoy sumamente feliz, trabajando mucho gracias a Dios, con realidades y con proyectos y con más pilas que nunca. Dirigiendo y actuando que son las dos cosas que más felicidad me dan.
-¿Alguna anécdota que quieras contarnos sobre situaciones de covid-19 en casa? -El contacto con la niñez es algo que forma parte de mi vida a través de los talleres que dicto, y en cuarentena fue divertido hacer personajes del patio de una casa al patio de la otra, y esto ocurría siempre con los hijos e hijas de los vecinos. Es probable que para el resto de los seres vivos, ponerse una capa, una peluca y moverse raro sea una locura, una pavada o algo fuera de lo normal, pero para los peques era un momento de distracción y para mí un momento de felicidad.
-¿El estado de ánimo predispone el repertorio de un humorista? -Es una repuesta personal, creo, pero también creo que si el humorista es profesional, la respuesta debería ser un no rotundo. En mi caso el estado de ánimo no está por sobre mi profesionalismo. De hecho puedo contarte que un día, en el instante previo a abrir el telón, y quiero recalcar que realmente fue en ese preciso momento, me dieron la noticia del fallecimiento de mi abuela. Tomé aire, cerré los ojos, y sin retraso alguno ni demostración al público, el show fue lo que debía ser. Y una vez que el telón se cerró me di permiso al llanto y el lógico dolor.
En cuanto a la creatividad es común decir que en los momentos de dolor es cuando más afloran los textos, las canciones y las expresiones artísticas en general. En lo que a mi respecta te cuento que cuando estoy alegre, es cuando más situaciones nuevas se me ocurren para incluir en mis espectáculos. Pero no es privativo de estos momentos, porque la creatividad no va de la mano del estado de ánimo tampoco, es un trabajo, una dedicación, es un ponerse a hacer lo que debes hacer en el momento que lo debes hacer. Como cualquier trabajo.
-Siempre se debate sobre los límites del humor, ¿existe tal límite? -Sí claro que existe, o al menos debería existir. En mi humor, o en lo que yo pienso como humor, el límite es el respeto, el límite es no dañar, el límite es no cosificar. El límite es reírnos CON y no reírnos DE. En nombre del humor se han hecho atrocidades. Y creo que en estos tiempos se ha visto una importante evolución del humor. Hay cosas que puestas en el hoy serían total y completamente inadmisibles, y creo que eso forma parte de un crecimiento sin dejar de hacer reír, que en definitiva es el final que persigue el humor.
Criaturas mágicas
-¿Cómo se da la génesis de sus criaturas? -El nacimiento de mis criaturas es algo maravilloso. A veces es buscado y a veces es encontrado, pero casi siempre parten de algo o alguien verdadero, de alguien de carne y hueso. Ese nacimiento mágico va de la mano de la constante observación. Te cuento un detalle… no sé manejar y no quiero saberlo. Muchos pueden decir que es raro, que es increíble, pero yo digo que es responsable. Y por qué es responsable, porque me cuesta mucho concentrarme en el tránsito y perderme la infinidad de posibilidades que la calle te brinda para tener vestuario nuevo, gestos nuevos, voces nuevas, colores y combinaciones nuevas. Si manejase me estaría perdiendo de todo esto que pasa por al lado y me da material para mi trabajo. Uno de los momentos más divertidos suelen ser las odiosas detenciones en los semáforos. Ahora les propongo que hagan esto. En los semáforos, en lugar de agarrar el celular, miren a todos los que cruzan, los que están hablando en la esquina, los que están en los autos de al lado, lo que hacen, lo que dicen, lo que se imaginan que están diciendo y cómo lo están diciendo, la ropa que tienen puesta.
Después de hacer esto en unos cuántos semáforos van a ver que todas mis criaturas están sacadas en parte o en su totalidad de la vida real. Les digo criaturas y no personajes porque tienen vida propia, yo les presto mi cuerpo para que ellas vivan.
Lo que se viene
- ¿Cómo es el unipersonal que veremos en la sala Empleados de Comercio este viernes 12? -Es una creación que hice con mi colega y amiga Andrea López Mediza. Esta obra estuvo en cartel en el año 2019 y es dirigida por ella que es una profesional maravillosa y contenedora. Me siento más que seguro y protegido con ella en la dirección y también compartiendo escenario porque hace de Pamela que es una de las azafatas de esta loca aerolínea que les va a brindar una hora y media de diversión con un sinfín de criaturas en escena.
Queda hecha entonces la invitación para este viernes 12 de noviembre a las 21 en Corrientes 450, la sala de Empleados de Comercio.