Ignacio Pellizzón
Crece el malestar de madres, padres y familiares por tener que realizar extensas filas para adquirir las entradas para las más de 600 graduaciones que se realizarán en Rosario y el Gran Rosario en los próximos 45 días. Se pasan horas en la calle esperando poder hacerse del ticket para la cena o el brindis.
El principal reclamo pasa por la falta de “planificación” para poder organizar el expendio de las entradas. “Somos muchos los que nos tenemos que adecuar a los horarios y hasta nos tenemos que pedir días en el trabajo para poder ir a comprarlas de forma presencial”, se quejó a Mirador Provincial Norma, madre de Betiana que se gradúa del secundario.
“No es posible que en los tiempos que corren tengamos que ir de forma presencial y hacer colas infinitas para poder comprar las entradas. Hay padres que estuvieron hasta cuatro horas esperando porque solamente hay una persona para la venta”, agregó.
Resulta que, con las nuevas flexibilizaciones provinciales para los salones de eventos, se reprogramaron muchas graduaciones atrasadas. Ante la necesidad de adecuar los tiempos y cumplir con los contratos, se acumularon una gran cantidad de eventos para ser desarrollados antes de que termine el año.
Según informó a
Mirador Provincial el titular de la Cámara de Eventos y Afines de la Provincia de Santa Fe (Ceasf), Iván Hawryluk, “este cuello de botella se genera, porque la autorización (de la Provincia) llegó muy sobre la hora. Entonces empezamos con las reprogramaciones para tratar de sostenerlo. Salieron las autorizaciones hace dos semanas y tuvimos que rearmar todo. Lógico que es difícil resolver todo en tiempo record. Es difícil organizar en dos semanas lo de todo un año”.
Norma señaló su malestar por no poder hacer una transferencia bancaria o adquirirlas de manera online, como sí sucede en otros espacios que ofrecen las entradas de manera virtual, justamente, para evitar amontonamiento de personas en tiempos de pandemia.
El referente de Ceasf explicó que “todos los salones no están dentro de la cámara, por ende, desconocemos cómo se manejan los demás”. “Cada salón comercializa tickets a través de una productora. Es una empresa la que se ocupa. La cámara no puede intervenir”.
Se estima que Salón Metropolitano en Alto Rosario Shopping canaliza el 40% de los cubiertos de la ciudad. De ese 60% restante, un 25% se reparte en cada una de las productoras (Color y Dreamers) y el 10% sobrante son salones que la comercializan por su cuenta.
Entre Rosario y el Gran Rosario se desarrollarán entre 600 y 800 graduaciones dentro de los próximos 45 días. “De terciarios se están haciendo ya y las de secundario tiene que terminar el año lectivo aún. Pero es un hecho que hay graduaciones, se hacen todos los días”, indicó Hawryluk.
Pese a las explicaciones, las madres, padres y familiares insisten con la “necesidad” de que, “aunque sea”, se incorporen “más empleados” para agilizar la venta y que “extiendan el horario” de expendio, dado que son más de 600 graduaciones las que están en marcha “y sí o sí te exigen que vayas a cambiar la entrada por un ticket para entrar al salón; hay que corregirlo”, concluyó la madre.
En base a las cifras que maneja la Cámara, había unos 7.000 contratos atrasados, de los cuales ya se “avanzó” y hoy restan ejecutar unos 4.500 más, que se dividen en unos 70 salones entre Rosario y el Gran Rosario, que contempla localidades aledañas como Ibarlucea, Pueblo Esther, Funes, entre otras.
Se estima que desde que comenzó la pandemia en marzo del 2020, con el confinamiento, hasta la fecha hubo más de 15 emprendimientos que no lograron resistir los embates de la crisis económica que generó el covid-19 y tuvieron que bajar sus persianas de forma definitiva.