Victoria

Se formalizó el nombramiento del CEF N°35 “Juan Leonardo Etchart”

Durante la ceremonia también se homenajeó al reconocido profesor local. La designación del nombre se realizó mediante concurso y dicha denominación fue propuesta por exalumnos, allegados y colegas del docente.


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IGNACIO ETCHART
redaccion-er@miradorprovincial.com


En Victoria se estableció el nombramiento del Centro de Educación Física (CEF) provincial N°35 bajo la designación “Juan Leonardo Etchart”, en homenaje al reconocido docente de la ciudad que trabajó durante la segunda mitad del Siglo XX. La designación del nombre se realizó mediante concurso y se encuentra establecida en la Resolución N° 3662/21 del Concejo General de Educación (CGE) de Entre Ríos.

La iniciativa fue formalizada durante un acto realizado en el Salón de Actos de la Escuela de Educación Técnica N°1 “Pedro Radío”, donde Etchart se desempeñó durante décadas, y fue impulsada por exalumnos, allegados y colegas del docente.

En este sentido, se presentó un escrito firmado por Clara Haydée Ramírez, Clara Obeid de Azcárate, Cynthia Anderson, María Alcira Liprandi, Rosa Azcárate, Mario Juárez y redactado y diseñado por Mariela Minaglia.

En dicho documento se explicitan los considerandos presentados en la propuesta de nombramiento, entre los cuales se recuerda al profesor Etchart como quien “salió del ámbito institucional a la sociedad victoriense, abriendo las puertas a una nueva disciplina: la ‘actividad recreativa mixta’, desconocida en nuestra localidad hasta ese momento”.

“Dio inicio a la actividad deportiva del softbol para ambos sexos, implementando encuentros intercolegiales y promoviendo un espíritu superador a los estudiantes. Fue precursor del básquet, llevándolo por la provincia en destacados encuentros del nivel secundario”, destaca el texto. “Se sumó al proyecto de la pileta preolímpica del Club 25 de Mayo, iniciando en ella las competencias provinciales. Además, realizó la gestión fundamental y necesaria para obtener el subsidio con el que se construyó la estructura del gimnasio de dicho club”, subraya luego.

El profesor Etchart también publicó su libro Manual de Recreación para docentes y guías de turismo, que es enseñado en diversas intuiciones del país. Además, dictó cursos en Entre Ríos, Santa Fe, Tierra del Fuego, Santa Cruz, Chubut, Río Negro, Córdoba, Corrientes, Chaco, Formosa, Santiago del Estero y la Ciudad de Buenos Aires, así como también en los países vecinos de Brasil, Paraguay y Uruguay.

También fue el preparador físico del único equipo victoriense de fútbol que ganó el máximo torneo provincial en 1956.


RECUERDOS


En el documento también se narran experiencias propias de quienes participaron en la elaboración formal de la solicitud. Entre ellas se destacan: “Hasta su llegada en la década del '50 no había profesores en la materia y la mayoría eran maestros que asumían la cátedra, pero centraban las actividades en gimnasia, salto en largo, en alto, trabajos con cajón y demás pruebas de atletismo principalmente. Él fue el primero en incorporar deportes a la enseñanza”, recuerda el periodista local, Mario Juárez.

“Introdujo el softbol, una disciplina desconocida en nuestra ciudad. Muchos estudiantes de la época se orientaron por seguir la carrera de Profesor de Educación Física, en gran parte, porque aprendieron a amar los deportes durante su paso por las escuelas”, agregó luego.

“Las actividades relacionadas a la recreación fueron otra de las especialidades, tenían un sinnúmero de juegos en el que se mezclaban el ingenio que entrelazaba con algún deporte”, mencionó Juárez para subrayar luego que “después del brote de poliomielitis, colaboró desinteresadamente muchísimo ayudando a pacientes a recuperar la musculatura y en la rehabilitación respiratoria de los afectados”.

Por su parte, Cynthia Anderson relató que “muy gratos recuerdos revive mi madre al nombrarlo. El profesor Etchart revolucionó Victoria implementando los deportes en equipo. Armó un conjunto de softbol femenino, allá por el año '55, y las llevó a competir a Nogoyá ganándole al local por 40 a 0. Era un profesor muy sociable y muy compañero”.

“Es digno destacar a una persona que hizo tanto por el deporte. En lo personal me ayudó muchísimo en el Instituto donde cursaba la carrera de la que sería luego mi profesión y laboralmente me guió en mis primeros trabajos”, recordó Rosa Azcárate.

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