Juan Carlos Scalzo | redaccion@miradorprovincial.com


Cuando la curva de contagios, a pesar de los pronunciados altibajos que muestran la estadísticas en forma diaria, empieza a marcar una tendencia alcista, aunque leve todavía, la ciudad se vio sacudida por la irrupción de esta nueva clase de coronavirus que tiene a maltraer a buena parte del mundo.



Tres días después de que desde la autoridad sanitaria local se indicara que la cepa predominante, entre todas las que ya tenían circulación en Rafaela era la Delta, las alarmas se encendieron subrepticiamente en la tarde de este jueves con la información de que cuatro casos positivos de CoViD-19 eran compatibles con la cepa Ómicron y estaban en estudio para su confirmación definitiva.



De acuerdo a la información que trascendió, los contagiados son de un mismo grupo que viajó a la provincia de Córdoba y estuvo en contacto con una persona que retornó del exterior y era portador de la nueva variante de coronavirus que se está expandiendo por todo el país.



Siete personas de ese contingente se quedaron en la vecina provincia y a comienzos de esta semana algunos de ellos manifestaron los síntomas propios provocados por el virus causante de la pandemia que azota al mundo y los hisopados arrojaron como resultado que eran portadores de la variante Ómicron.



Con la premura del caso, se aisló a los que se encuentran en Rafaela, lo mismo ocurre con los que permanecen en la provincia mediterránea y, rápidamente, se comenzó a buscar a todos los que estuvieron en relación directa con los infectados para someterlos a los test de rigor. "Estamos al aguardo de la secuenciación de cuatro muestras, contacto de un positivo de Córdoba que recién la semana que viene vamos a tener los resultados", confirmó a El Litoral la jefa de la regional de salud del ministerio de salud, Eter Senn.



Una cuestión muy reveladora a tener en cuenta para comprender la agresividad y velocidad de propagación de Ómicron es que todas las personas involucradas en este caso contarían con el esquema completo de vacunación contra el coronavirus.



Si bien el número de personas que ya tienen aplicadas las dos dosis es muy alto, más de tres cuartos de la población, y es sostenido el avance de la inoculación con la dosis de refuerzo, la noticia que hay infectados con esquema completo comienza a generar inquietud y desde los ámbitos sanitario y epidemiológicos volverán a insistir para que la población ajuste sus conductas a lo que indican los protocolos respetando el distanciamiento social y el uso de tapabocas.


Por otro lado, en el sistema sanitario se sigue con calma la llegada de Ómicron, algo que en ese ámbito, se sabía que iba a suceder, pero no se imaginaba que tempranamente, porque más allá del desvanecimiento que tuvo la pandemia en los últimos meses, en el Hospital Jaime Ferré, que concentró la atención de pacientes CoViD, mantiene su capacidad operativa a pleno y la estructura que se utilizó al máximo en el pico de la emergencia sanitaria está lista para ponerse inmediatamente en funcionamiento en caso de un rebrote de contagios a gran escala.