Daniel Domínguez
En épocas de receso, las versiones sobre transferencias e incorporaciones abundan. Esto, sumado a la gran dificultad económica que padecen la mayoría de los clubes argentinos, hacen que los mercados de pases sean un suplicio para todos.
En Newell’s la cosa no es nueva. Desde hace muchos años, el club del Parque Independencia está inmerso en deudas interminables, contratos a mitad de camino y muy poca efectividad a la hora de contratar refuerzos.
La nueva dirigencia, con Ignacio Astore a la cabeza, considera que esta ventana de pases es clave a la hora de planificar el futuro inmediato y buscará traer “cuatro o cinco jugadores de jerarquía”, según las propias palabras del presidente leproso.
Javier Sanguinetti, conjuntamente con el mánager Julio César Saldaña, están abocados a cerrar, primero, a los jugadores que permanecerán en el plantel y luego, acelerar por los nuevos.
El flamante DT quiere que se haga el máximo esfuerzo por retener a José Canale y Cristian Lema, aunque todo parece indicar que no podrán darle ese gusto. El paraguayo retornó a Libertad y el club Gumarelo no ve con buenos ojos una nueva cesión, por lo que comprar el pase no está dentro de las posibilidades rojinegras.
En el caso de Lema, Peñarol de Uruguay pica en punta para contar con sus servicios, ya que lo pretende para potenciar el conjunto que participará de la próxima Copa Libertadores.
Para colmo de males, uno de los jugadores que venía desempeñando la función en la zaga, el juvenil Diego Calcaterra, no llegó a un acuerdo con los dirigentes y a partir de enero podrá salir con el pase en su poder. El destino sería Cadiz de España, que ya lo venía siguiendo desde hace algunos meses.
Más allá que los rendimientos del jugador no fueron los esperados, con participación directa en varios goles recibidos como contra Arsenal, Sarmiento y el juego ante San Lorenzo en la que no le salió una, también es cierto que su puesto natural es el de volante de contención y cuando lo hizo allí sus actuaciones fueron diferentes.
Ante este panorama, los rojinegros deberán agudizar bien la ingeniería para poder rearmar una defensa que quedó desmembrada.
En 2019, en una situación similar, Frank Kudelka logró ordenar la última línea y terminó de sostener aquella muy buena campaña, sobre referentes como el propio Lema o Santiago Gentiletti, retirado tras el parate por la pandemia.
Uno de los primeros apellidos apuntados ya quedó descartado. Miguel Ángel Torrén, surgido de las inferiores de Newell’s, continuará en Argentinos Juniors, donde es capitán y referente, por lo que el sueño de la vuelta ni siquiera comenzó.
Tanto la comisión directiva como el nuevo cuerpo técnico saben que, además del tema dinero, una de las cuestiones que más preocupan es el tiempo. El calendario 2022 estará más compactado que nunca por el Mundial de Qatar y los futbolistas leprosos tendrán escasos días de vacaciones, ya que la pretemporada comenzará el 3 de enero en Bella Vista para viajar a fin de mes a jugar un cuadrangular internacional en Uruguay. El inicio de la Liga Profesional está pensado para la primera semana de febrero.
Entonces, esos cuatro o cinco refuerzos que los leprosos necesitan, deberían estar cerrados en menos de diez días, algo que, por ahora, parece directamente improbable.
Dentro de la danza de nombres, Astore se encargó de descartar a uno “pesado”. El delantero de la selección de Bolivia Marcelo Moreno Martins fue acercado por intermediarios, pero el mandamás del Parque afirmó que es imposible desde lo económico y no está dentro de los pedidos de Sanguinetti en lo estrictamente futbolístico.
El ex entrenador de Banfield fue muy claro a la hora de solicitar los puestos a cubrir y, sabiendo el tema de la defensa central, también apuntó a los laterales, un volante mixto y dos delanteros.
Hoy por hoy, para esos lugares, solo aparecen juveniles que ya sumaron minutos en primera en este 2021, pero ninguno pudo afianzarse y ganarse la titularidad en los diferentes ciclos de los cuatro entrenadores que pasaron por la institución (Kudelka, Germán Burgos, Fernando Gamboa y Adrián Taffarel).