Daniel Domínguez deportes@miradorprovincial.com


Parece que le van a cumplir el deseo de Navidad al Kily Cristian González. El entrenador les solicitó expresamente a los dirigentes de Central que en la primera semana de pretemporada quería contar con, al menos, una cara nueva. Y quizás sean dos.

En las últimas horas la comisión directiva auriazul y el mánager Raúl Gordillo avanzaron en la contratación del arquero argentino Gaspar Servio, surgido en las inferiores de River y en conflicto con su último club Guaraní de Paraguay, para llegar a préstamo por un año.

El golero fue capitán y figura de los aurinegros hasta la última fecha donde su equipo se imponía 2-0 ante Cerro Porteño y se consagraba campeón, pero con el tiempo cumplido fue expulsado y todo cambió para él y para Guaraní.

Servio "arrastró" a un compañero que había caído fuera del campo acalambrado y comenzó a ayudarlo, algo que el árbitro interpretó como demora del juego, le mostró la segunda tarjeta amarilla y se fue a las duchas. En los minutos adicionales, Cerro Porteño igualó el juego 2-2 y con ese punto se consagró como el mejor de Paraguay.

Luego del partido, el presidente de Guaraní calificó a Servio como irresponsable y anunció que no seguiría en el club pese a tener contrato hasta 2023. Servio, quien salió campeón con River en la Copa Libertadores Sub 20 en 2012, también atajó en Banfield, Independiente Rivadavia de Mendoza, Arsenal de Sarandí y Dorados de Sinaloa, donde fue dirigido por Diego Maradona y en el que también fue despedido por cuestiones extrafutbolísticas.

En aquella ocasión, de paseo por Sinaloa, Sevio comparó la violencia en las calles de México con un juego en línea y causó malestar en los ciudadanos del lugar. Pese al pedido de disculpas, Dorados le rescindió contrato para recalar luego en Guaraní, curiosamente del que se fue también antes de la finalización del vínculo.

Con Servio casi cerrado, el Kily tendría otra buena nueva, debido a que Mauricio Caramelo Martínez está a un paso de vestir nuevamente la camiseta auriazul. El volante central, que también puede desempeñarse en la zaga, ya tiene todo acordado con los de Arroyito y en estos días será el turno de que ambas dirigencias se sienten para acordar los términos de la operación.

El futbolista surgido en Unión, tuvo un primer buen paso por la entidad rosarina en la temporada 2016 hasta que sufrió una grave lesión que lo marginó del primer equipo. En la última campaña en Racing disputó 31 partidos entre Copa de la Liga, Liga Profesional y Copa Libertadores, sin anotar goles.

Martínez puede ser una pieza importante en el sistema del Kily ya que aportaría el equilibrio que no encontró nunca en el medio o bien seguridad en la última línea, algo que tampoco tuvo el pasado campeonato.

Una vez firmados Servio y Martínez, Gordillo y el cuerpo técnico seguirán en la búsqueda de un volante mixto, un delantero, un lateral izquierdo y un defensa central. En el puesto de volante mixto, Walter Montoya tiene todos los boletos para regresar al club de sus amores. El chaqueño posee el pase en su poder luego de quedar libre de Cruz Azul y su retorno sería cuestión de horas.

Danza de nombres
Más allá de esto, hay otros nombres para la zona media como Federico Lertora de gran año en Colón y Leonel Picco, de Arsenal de Sarandí.

En el puesto de lateral izquierdo la cosa no es tan sencilla debido a que en el mercado no abundan jugadores en esa zona y tanto Gordillo como el Kily deberán ampliar los canales de búsqueda.

Para la ofensiva, el DT quiere recambio para Marco Ruben y Lucas Gamba, siempre y cuando Alan Marinelli y Luca Martínez Dupuy sean cedidos o transferidos. Es por eso que, por el momento, no se iniciaron movimientos para cubrir ese lugar.

Central de a poco parece armarse. Con las confirmaciones de continuidad de Ruben y Emiliano Vecchio también llegaron sus pedidos: conformar un equipo competitivo y de jerarquía para apuntalar a los juveniles.

Por ahora, en las primeras tratativas, la cosa parece que pinta bien: Servio, Martínez y posiblemente Montoya, son futbolistas de experiencia y buen presente que le pueden aportar eso que tanto está buscando el Canalla, dar el salto de calidad y ser protagonista.

Central de a poco parece armarse. Con las confirmaciones de continuidad de Ruben y Emiliano Vecchio también llegaron sus pedidos: conformar un equipo competitivo y de jerarquía para apuntalar a los juveniles.