Belén Fedullo | redaccion-er@miradorprovincial.com


Desde mediados de 2020 la historia se repite sin cesar. Personas de barrios llenos de necesidades se agrupan, invaden terrenos públicos o privados que están vacíos e instalan allí precarias casillas de madera.


Luego viene el conflicto. La Policía se presenta en el lugar con directores municipales y comienza un operativo que arrasa con las casas, las pertenencias y las personas. Hay discusiones entre dirigentes, organizaciones sociales y empresarios, pero nada cambia.


Este jueves, a dos meses del último desalojo, la Unidad Operativa de la Dirección de Prevención y Seguridad de la Municipalidad de Concordia, junto con la Policía, llevó adelante un nuevo operativo y pudo recuperar un espacio público.
El trabajo se llevó a cabo en inmediaciones del arroyo Manzores y Belgrano y, según describieron, lograron recuperar un espacio que había intentado ser intrusado.


Como resultado del procedimiento, desarmaron una casilla de madera e identificaron a las personas que intentaron cometer el ilícito, lo que a su vez permitió a la Policía avanzar en otras investigaciones que estaban realizando vinculadas a otros delitos.

La palabra oficial

“De forma permanente y en articulación con la Jefatura Departamental Concordia de la Policía trabajamos en prevenir y desalentar los intentos de usurpación, protegiendo los bienes y espacios públicos que son de todos los concordienses”, señaló al respecto el director de Seguridad y Prevención del Municipio Claudio Purgat.


Según explicó el funcionario, la idea de la actual gestión municipal es que "no se permite ningún tipo de usurpación". Por lo que mencionó, "trabajando con el acompañamiento de la Justicia se logra disuadir y recuperar los espacios que se han visto usurpados, defendiendo los intereses de todos los concordienses".


Por ordenanza, la Municipalidad de Concordia estableció un registro de usurpadores. Quienes estén en la lista no podrán acceder a beneficios habitacionales.