Domingo para el olvido

Newell's y Central salieron malheridos de sus derrotas ante River y Boca

 


Ampliar [+]
Lalo Falcioni


Los equipos rosarinos de primera división tenían el fin de semana dos pruebas de alta motivación, pero también de gran riesgo. Y ninguno de los dos salió ileso de los choques ante River y Boca. Muy por el contrario, quedaron bastante malheridos luego de los cruces con los dos clubes más poderosos del fútbol argentino. Sobre todo Newell's, que obtuvo como saldo negativo profundos cuestionamientos para su arquero Iván Arboleda, principal responsable de la victoria "millonaria" en el "Coloso Marcelo Bielsa", y dos lesiones que preocupan al técnico Javier Sanguinetti de cara al futuro.

Rosario Central dejó una imagen aceptable en su derrota frente al "Xeneize" en cancha de Vélez, pero una vez terminado el partido, el referente Emiliano Vecchio detonó la sensación de aparente tranquilidad con una publicación en redes sociales que podría abrir la puerta de su alejamiento de la institución.

Arboleda explotó el Parque

Los hinchas de Newell's, que colmaron el estadio del Parque Independencia de Rosario el domingo por la noche, pasaron del éxtasis a la ira en cuestión de minutos. Como se esperaba, River logró imponer sus condiciones en el partido, pero los dirigidos por Javier Sanguinetti amortiguaban el poderío "millonario", que de ninguna manera era abrumador. Por eso la bronca se desató contra el arquero Iván Arboleda, que ya había comprometido a su propio arco en el primer tiempo, cuando promediando el segundo regaló la pelota en salida para que Juan Fernando Quintero -justo a él- pudiera lucirse con una definición con clase.

Al rato, el portero colombiano puso las manos flojas en un remate potente pero al medio del arco de Robert Rojas, y la historia se acabó. En la jugada siguiente, cuando Arboleda tomó la pelota, una cortina de silbidos e insultos cubrió al ex Banfield y Rayo Vallecano de España. Como se dieron las cosas, no será fácil para el arquero recuperar la confianza que le había dado Sanguinetti.

Claro que Arboleda no fue el único responsable de la previsible caída "rojinegra", pero sí el principal. El entrenador deberá trabajar mucho en las manos del colombiano, pero mucho más en su cabeza para ponerlo de nuevo en competencia. Sanguinetti no cuenta con muchas opciones, ya que el actual suplente -el santiagueño Franco Herrera- tiene apenas 18 años y Ramiro Macagno se recupera de un desgarro.

Pero eso no es todo en el cuadernillo de anotaciones de cuestiones negativas que le dejó a Newell's el partido con River. Hubo dos lesionados, que se perderán los próximos partidos. Leonel Vangioni sufrió un problema muscular en el segundo tiempo, cuando Sanguinetti ya se había quedado sin cambios. Y a Jerónimo Cacciabue lo retiraron de la cancha en camilla. Los dos se perderán los próximos partidos con seguridad.

Newell's, que había entusiasmado a sus hinchas con la primera presentación ante Defensa y Justicia, retrocedió hasta el punto de partida después de las derrotas contra Argentinos y River. A partir del próximo lunes, cuando los "rojinegros" visiten a Talleres en Córdoba, el nuevo cuerpo técnico deberá iniciar el proceso de restauración de confianza.

El ojo de Ojeda y el posteo de Vecchio

En Rosario Central, los problemas y los rebotes de los mismos estuvieron afuera de la cancha y no tanto adentro. Si bien el "Canalla" regresó de Liniers con una derrota, la imagen futbolística que dejó el conjunto rosarino ante Boca fue buena. Incluso en el primer tiempo dominó a su rival y dispuso de un penal que el arquero Agustín Rossi le desvió a Emiliano Vecchio. Finalmente, la jerarquía individual de los jugadores "xeneizes" inclinaron la balanza a favor del equipo de Battaglia.

El joven volante "canalla" terminó con uno de sus ojos en "compota" por un manotazo del ex jugador de Rosario Central, Diego "Pulpo" González. Con la asistencia del VAR, sistema que se implementará en el fútbol argentino desde la octava fecha de este mismo torneo, el mediocampista de Boca se hubiera ido expulsado. Pero el árbitro Ariel Penel no lo vio así y el "Kily" González otra vez dio rienda suelta a su furia.

Todo eso quedó en el contexto del juego; no así lo que sucedió después con Vecchio. El referente "auriazul" hizo un posteo muy sugestivo en su cuenta de Instagram: "Hay que saber decir adiós", escribió junto a una foto suya de espaldas, dejando la cancha.

Vecchio, seguramente más tranquilo, volvió a entrenarse con el resto del plantel "canalla". Consultado por este tema, el vicepresidente de Central Ricardo Carloni comentó: "Le mandé un mensaje, simplemente quería darle el apoyo. El fútbol siempre tiene revancha y lo he aprendido en estos años. También los hinchas se manifiestan en las redes y si fuese por las redes deberíamos poner todos una bomba nuclear. Y cuando caminan en la calle siempre tienen cariño por los jugadores". El tiempo dirá que pasará con uno de los capitanes del equipo.

Continuar Leyendo...


+ Mirador Provincial