El diputado provincial declaró ante el tribunal que lleva adelante la causa

Pullaro explicó cómo sectores del Estado protegían a Alvarado

El testimonio del ex ministro de Seguridad giró sobre el reservado operativo para detenerlo en Río Tercero y la decisión de enviar el aparato telefónico a Estados Unidos para poder desentrañar vínculos con policías y funcionarios judiciales. Respaldo político a la hora de presentarse en el Centro Penal de Justicia de Rosario.


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El diputado Maximiliano Pullaro (Evolución - UCR) declaró ayer en Rosario ante el tribunal que lleva adelante el juicio oral contra Esteban Lindor Alvarado quien está acusado, junto a otras seis personas, de formar parte de una asociación ilícita dedicada a cometer diversos delitos. El ex ministro de Seguridad entre 2015 a 2019 fue citado a pedido de los fiscales Matías Edery y Luis Schiappa Pietra. Alvarado fue detenido en febrero de 2019 en un camping de Río Tercero.

 

Pullaro llegó al Centro de Justicia Penal acompañado por dos integrantes del gabinete de Miguel Lifschitz, Ricardo Silberstein (Justicia) y José Garibay (Infraestructura) más los diputados socialistas Clara García y Joaquín Blanco y el diputado nacional Gabriel Chumpitaz (Pro). "Detrás de Alvarado había una estructura que filtraba información" le dijo a El Litoral horas después de su declaración judicial.

 

- ¿Por qué declaró en el caso Alvarado?

 

- Los fiscales Edery y Schiappa Pietra me citaron como testigo para hablar de la detención de Esteban Lindor Alvarado, pero fundamentalmente del marco en el que se dio esa detención. Se tuvo que hacer un dispositivo encapsulado de información donde sólo el gobernador (Miguel Lifschitz) y yo teníamos la información porque era una organización criminal con mucha perforación en sectores policiales y/o judiciales. Eso ameritaba un operativo especial. La fortaleza de mi testimonio que pretendían tener la fiscalía era para que describa no solo la detención sino porqué llevamos adelante un operativo de esas características.

 

- Fue en Río Tercero, Alvarado tiró el teléfono al lago…

 

- En diciembre de 2018 había citado al jefe de la Tropa de Operaciones Especiales (TOE) (Maximiliano Bertolotti) a mi despacho y le pido que tome personalmente la detención de Alvarado que era jefe de una organización criminal con altos niveles de violencia y con lo que parecía en ese momento -después se probó en el juicio- que tenía una cobertura mayor. Hubo hechos muy significativos que a nosotros nos habían llamado la atención: el allanamiento fracasado en una isla cercana a Rosario y el cierre de una causa anterior que había mandado el fiscal Patricio Ferrari de San Isidro provincia de Buenos Aires. Esos hechos nos hacía pensar que había filtraciones dentro de la fuerza de seguridad. Un día me llama Bertolotti y me informa que a través de la intervención del teléfono de Rosa Capuano había un dato muy concreto sobre el paradero de Alvarado;  le ordené que vaya con vehículos civiles y con personal de su máxima confianza para la detención. Ingresaron por el agua a un camping en Río Tercero, lo divisan con su familia y amigos y lo detienen. Antes, él corre unos metros y tira el teléfono al lago y después de diez minutos lo recupera un agente de la TOE. Allí sentimos que había pruebas muy importantes dentro del teléfono. Pretendía saber quiénes eran los policías, integrantes de la justicia o dirigentes políticos que tenían vínculos con él. No se sabía, pero él tenía cobertura importante de agentes del Estado. Hable con Lifschitz y le solicité autorización para sacar a un policía del país, en forma reservada, a Estados Unidos, para el desbloqueo del teléfono. Allí se abrió la caja de Pandora porque se tuvo la posibilidad de desentrañar muchos delitos.

 

- Pudo saber de la cobertura que tuvo Alvarado

 

- Probamos allí y en el posterior juicio que había policías de jerarquía intermedia, de Rosario, involucrados, que eran quienes interactuaban con él y también miembros de la justicia -concretamente del Organismo de Investigaciones- que era la persona que lo informaba. Fue muy fuerte y la determinación del momento permitió condenar a hombres y mujeres de la policía.

 

- ¿La organización de Alvarado era más sofisticada que la de Los Monos?

 

- La organización de Alvarado tenía otras características. La semejanza era el alto nivel de violencia que impartían en el territorio. La diferencia era que Alvarado era una empresa criminal con lavado de activos, tenía siete empresas que se dedicaban al blanquear el dinero de ilícitos. Alvarado vivía en el Funes Hill y Los Monos en Las Flores. Ambas organizaciones con jerarquías muy marcadas de los jefes pero  Los Monos eran más violentos y precarios

 

- ¿En qué quisieron hacer hincapié el tribunal y los fiscales?

 

- Quisieron que contara por qué se llevó adelante el operativo especial con Alvarado. Grafiqué los anteriores hechos que ocurrieron y que nos hacían ver que había filtraciones o que no había la persecución penal esperada. Se pretendía saber por qué ordenamos ese operativo y por qué fracasaron los anteriores. Con los mismos elementos de prueba enviados por el fiscal Ferrari de San Isidro que no se valoraron positivamente en el 2008, hubo condenas cuando los fiscales reabrieron el expediente. Después el allanamiento en la isla que por más que alguien se pueda ofender, fueron a buscarlo a la isla, hubo una filtración y apareció en el lugar la entonces diputada (Alejandra) Rodenas, con su marido y un abogado muy reconocido de Rosario. Que queda claro, no intento perjudicar la imagen de la actual vicegobernadora. Insisto en que atrás de Alvarado había una estructura que filtraba información, de hecho hay policías condenados por ese operativo.

 

Hijo

En el juicio, en un testimonio grabado antes que lo asesinaron, un testigo Carlos Argüelles reveló que entre los planes de Alvarado estaban matar a un hijo de Pullaro y al diputado Carlos Del Frade. Hoy el diputado radical señala que "no lo sabía puntualmente cómo se conoció en el juicio. En 2018 nos entró una información de que iban a atentar contra el hijo de una testigo de identidad reservada y otra llamada al 911 sobre atentado contra mi familia y con muchas características similares a las de mi hijo. Ahora cuando declaró Argüelles los fiscales me pusieron al tanto de esto pero ya había pasado dos o tres años. Entiendo que pueden unirse esa planificación que llevaba adelante Alvarado con la información que tuvimos en ese momento".

El ex ministro señaló que durante la gestión de Lifschitz "molestamos a las organizaciones que tuvieron mucha impunidad en Santa Fe durante mucho tiempo. Se detuvo a Los Monos,. a Alvarado, a los Funes, Ungaro, Camino, Romero, el zurdo Villarroel, Mustafá, a Luis Paz, a Baigoría. Organización criminal que asomaba la cabeza con fiscales se les caía encima y se los detenía. Vimos acciones todos los días para que me vaya del Ministerio de Seguridad. Dos fiscales corruptos me intervinieron el teléfono en forma ilegal y las conversaciones de mi teléfono la tiraron a todos los medios de comunicación. Tenía la lógica de sacarme del ministerio de Seguridad. 

 

Respaldo

Pullaro dijo sentirse respaldado durante su declaración no solo por los dirigentes que lo acompañaron en su testimonio sino por su propio partido, marcando al presidente del comité provincial, Carlos Fascendini así como los senadores Felipe Michlig y Lisandro Enrico que estuvieron al tanto de todo.

 


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