Juicio
Piden la absolución de Juan Pablo Aguilera y su esposa en la causa Imprentas
Marcos Rodríguez Allende, defensor de Juan Pablo Aguilera y su esposa, Luciana Almada, pidió la absolución de ambos en el legajo denominado Imprentas. Se trata de uno de los cinco hechos en los que se investiga la responsabilidad del exgobernador y actual embajador en Chipre e Israel, Sergio Urribarri, dos exministros, funcionarios de sus gestiones y particulares, por delitos de corrupción.
MIRADOR ENTRE RÍOS
redaccion-er@miradorprovincial.com
En la causa Imprentas se investiga el direccionamiento de la pauta publicitaria estática en vía pública hacia las empresas Tep SRL y Next SRL, de las que Fiscalía dice que son propiedad de Aguilera y no de su esposa y Emiliano Giacopuzzi, en el caso de Tep SRL; y de Maximiliano Sena y Alejandro Almada, en el de Next SRL. Para los fiscales, estos serían testaferros de Aguilera.
En esta jornada de este jueves 10 de marzo terminó sus alegatos Miguel Ángel Cullen, que pidió la absolución de la contadora de las empresas Tep y Next, Corina Cargnel, en el contexto de la causa denominada Parador de Mar del Plata, donde se investiga si se usaron fondos públicos que fueron desviados a la campaña para la precandidatura a presidente 2015 de Sergio Urribarri.
En ambos casos los defensores solicitaron la exclusión probatoria de informes y pericas que se ofrecieron como prueba y de todos los actos que de ellos se derivaron. Se trató de los informes fotográficos que realizó una contadora y perito del Ministerio Público Fiscal, y de los que realizaron los bioingenieros del MPF, que extrajeron información de un disco rígido externo que fue muy criticado por las defensas en virtud de las circunstancias en las que fue hallado.
A primera hora de la mañana de este jueves, Cullen cuestionó la mutación que realizó Fiscalía respecto de la imputación, de la que primero se investigaba la desviación de fondos para instalar el Parador para promocionar la precandidatura de Urribarri a presidente, y luego fue mutando, con la prueba que se presentó en el proceso, al posicionamiento de aquel a nivel nacional. Cullen sostuvo que se probó que no hubo promoción y criticó que la mutación afectó el derecho de defensa.
Rodríguez Allende sostuvo que no se pudo probar que las empresas fueran en realidad de Aguilera y añadió que aún si así se hubiera hecho, no existió delito alguno porque no se pudo probar que su defendido se haya interesado en beneficiarlas desde el lugar que ocupaba como jefe de campaña del Partido Justicialista y como empleado del Senado. También afirmó que ningún testigo dijo nada acerca de que el exgobernador Urribarri y el exministro de Cultura y Comunicación, Pedro Báez, imputado en cuatro de los cinco hechos, hayan realizado, desde sus roles, alguna conducta que sugiriera determinado interés en beneficiar a las empresas de Aguilera.
El debate continuará el lunes 14 de marzo, cuando Rodríguez Allende terminará sus alegatos respecto de la causa Parador, donde está imputado Aguilera; continuarán el martes con los defensores Raúl Barrandeguy y Candelario Pérez, defensores de Urribarri; en tanto que el jueves se prevé que se realicen las réplicas y dúplicas.