Gualeguaychú
A 32 años de su desaparición, sigue la búsqueda de Blanca Susana Sola
Mientras el juez de Garantías sigue incorporando a la causa declaraciones testimoniales, el Sifebu realizará un relevamiento de las huellas dactilares de aquellas personas fallecidas en Entre Ríos, desde 1990 y registradas como NN.
SABINA MELCHIORI
redaccion-er@miradorprovincial.com
Blanca Susana tenía 14 años recién cumplidos cuando fue vista por última vez, cortando camino por los terrenos baldíos que separaban la casa de su hermana mayor con la suya en el barrio de Obras Sanitarias. Era sábado de tarde y hacía calor. Tenía puesta una pollera de jean, una remera negra y zapatillas Topper de color rosado, que de tan gastadas parecían blancas.
“Era una nena, al único lugar adonde iba era a la casa de nuestra hermana Gloria, esa era su única salida, no salía ni a hacer mandados, no conocía mucho la ciudad y no andaba sola”, contó su hermano Juan cuando se cumplieron 30 años de aquel 17 de marzo. “Hasta el día de hoy no sabemos nada, nada, de ella, es como que la tragó la tierra, nadie supo nada, nadie vio nada, para nosotros es un misterio”, agregó.
Un misterio de los dolorosos. El papá y la mamá de Blanca Susana murieron sin saber qué ocurrió con su niña después de que dejara la casa de Gloria. La buscaron, la buscaron con desesperación, les preguntaban por ella a los vecinos y se hacían preguntas que siempre tenían respuestas inciertas.
La primera causa que investigó su desaparición fue incinerada en 2012. Hoy, sus hermanos y hermanas continúan la búsqueda en un contexto diferente: un juez de Garantías comprometido con la búsqueda y una sociedad que acompaña.
En la mañana de este jueves 17 de marzo, en diálogo con MIRADOR ENTRE RÍOS, el juez de Garantías Ignacio Telenta informó que se siguen tomando declaraciones testimoniales y que ha establecido comunicación con el Registro Civil de Paraná para que un equipo del Sistema Federal de Búsqueda de Personas Desaparecidas y Extraviadas (Sifebu) pueda cotejar las huellas dactilares de aquellas personas NN fallecidas desde 1990 en Entre Ríos.
LA ÚLTIMA TARDE
Gloria estaba bañando a sus hijos cuando llegó Blanca Susana, que era la tía pero parecía una hermana mayor. Le vino de maravillas. Los pequeños tenían el cumpleaños de una vecina y Blanca Susana podría llevarlos. “Me preguntó si podía quedarse en el cumpleaños de la nena. Me dijo que a ella también la conocían y seguro que se podía quedar. Le dije que no, que ya era grande, que se viniera a casa después de dejar a los chicos. Y como me había dicho que se quería quedar, la esperé en la puerta, mirándola a lo lejos. Cuando llegó la invité a tomar unos mates mientras yo seguía con lo que estaba haciendo en la cocina”, narró Gloria Sola a la periodista Paola Robles, de Gualeguaychú.
El relato de la última integrante de la familia en ver a Blanca Susana continúa así: “Ahí estuvimos con Susana hasta que llegó mi marido con otros peones a descargar madera para una obra que estaban techando. Entró él solo a la casa, entonces aproveché a pedirle el dinero que necesitaba para hacer una compra. Antes de irme le dije a Susana que me terminara de colar un poco de acelga que estaba preparando para hacer una tarta para la cena. Le dije que después se fuera para la casa de nuestros padres. Me subí a la bicicleta y me fui”. Cuando Gloria volvió del mercado era poco más de las ocho y media. Su marido se había bañado y estaba en la cocina. “Le pregunté por Susana y me contestó ‘se habrá ido’, nada más que eso. Y me pidió que fuera a comprar una damajuana de vino como se usaba en aquella época para tener para la cena”.
También una vecina, Ema Mercado, quien vivía a tan solo dos cuadras de la casa de los Sola, vio pasar a la joven aquella tarde. Dijo que Susana la saludó y que iba en dirección a su casa.
“La llevaron, la raptaron. Sola no se fue”, asegura su hermano Juan, quien para darle fuerza a su hipótesis agrega que su hermana “salió con lo puesto, se bañó, se cambió, no dejó nada que nos hiciera sospechar que haya querido irse”.