Carlos Retamal
Un siniestro de tránsito registrado en la mañana del martes 19 de julio, con una víctima fatal, tuvo un nuevo y definitivo giro tras el resultado de la autopsia. En un primer momento se dijo que el cuerpo tenía un impacto de arma de fuego en uno de sus hombros, pero en el Instituto Médico Legal se constató que en realidad era una fractura expuesta, producto del impacto.
El choque se produjo antes de las 6 en la esquina de San Lorenzo y bulevar Avellaneda, cuando la víctima –identificada como Cristian Alexis Ramírez–, de 28 años, chocó con su moto Honda Tornado contra la parte trasera de un colectivo del transporte interurbano de pasajeros.
Según las primeras pericias, la moto circulaba de sur a norte por bulevar Avellaneda e impactó con el colectivo cuando éste doblaba por calle San Lorenzo. Como consecuencia del impacto, el joven falleció prácticamente en el acto.
El médico forense que revisó el cuerpo en el lugar vio que tenía un disparo de arma de fuego, con orificio de entrada sin salida, a la altura del hombro derecho, por lo que la investigación quedó en manos de la Unidad de Homicidios Dolosos, a cargo del fiscal Patricio Saldutti, quien ordenó la realización de autopsia.
En las últimas horas de la noche del martes se conoció el resultado de la pericia forense, que dio un nuevo y probablemente último giro al caso.
Fuentes del Ministerio Público de la Acusación indicaron que “se constató que la causa de fallecimiento es un traumatismo de cráneo con la presencia de un grave traumatismo torácico y que no presenta impacto de arma de fuego”.
“Se detectó que la forma del orificio, el cuál en los exámenes primarios se presumía que era producido por un disparo de arma de fuego, era de formación irregular para ser producido por un proyectil, por lo que se realizó placa torácica constatando que no había presencia de un proyectil dentro del cuerpo”, señala el informe.
Al analizar el lugar de la herida en el hombro derecho se constató que presentaba “múltiple fractura en el húmero y que el orificio fue producido por el desprendimiento del hueso en el impacto, lesionando la piel”, remarcaron desde el MPA.
“Esta conclusión explica el porqué de las roturas en la remera del fallecido y no así en la campera que llevaba al momento del hecho”. Por lo tanto, la investigación será llevada adelante por la Unidad de Siniestralidad Vial.