Violencia
Funcionarios, vecinos y profesionales quedaron en medio de un enfrentamiento a balazos
Estaban realizando un abordaje en un barrio de Concordia y debieron tirarse “cuerpo a tierra”. Una vecina fue testigo y habla de bandas delictivas que llenan de miedo a quienes viven en el barrio.
BELÉN FEDULLO
redaccion-er@miradorprovincial.com
El hecho tuvo lugar este miércoles 7 de septiembre, cerca del mediodía, en la zona de calles Sargento Cabral y cortada Nº 52 del barrio “José Hernández”, uno de los puntos donde más escaló la violencia vinculada con el narcotráfico.
Del operativo de abordaje territorial participaban concejales, el secretario de Salud, Mauro García; Leticia Ponzinibbio, esposa de Enrique Cresto, en calidad de presidenta de la Fundación Conased; más un grupo de 60 estudiantes de Enfermería (Uader), quienes debieron tirarse al piso para protegerse de las balas.
Según las versiones, el origen del conflicto guardaría relación con una puja por poderío territorial vinculado al tráfico de drogas: en horas de la noche, un enfrentamiento similar había dejado a una persona herida de bala.
El Ministerio Público Fiscal inició actuaciones de oficio, a lo cual se irían sumando denuncias de algunas de las personas que se encontraban en el lugar.
EN PRIMERA PERSONA
La paz que se vio interrumpida a plena luz del día no es una constante en el barrio. Los vecinos lo saben y son testigos de una escalada de violencia que parece no tener fin.
“Nos estábamos congregando para lo que iba a ser un abordaje de salud, porque hay muchos casos de sarna y problemas de piel en niños y adolescentes acá en el barrio”, reveló María, una vecina que vivió el minuto a minuto de lo que comenzó siendo un “Abordaje Unidad Extramuro”.
“De repente empezaron a los tiros y tuvimos que tirarnos al piso, cuerpo a tierra, para conservar nuestras vidas”, señaló.
Fueron muchas las balas que vieron pasar, además de una pelea entre mujeres. “Tuvimos que suspender todo el abordaje por la violencia entre estos hombres, uno de un lado y dos del otro, que se tiraron como seis tiros y después también entre las mujeres que se revolcaron en el barro peleándose”, relató María.
“Verbalmente, de un lado al otro, se prometieron prenderse fuego”, reprodujo esta vecina, convencida de que “la violencia está instalada en el barrio”.