Ignacio Pellizzón Después de incesantes denuncias de vecinos de la zona como concejales y diputados sobre robos y hechos de vandalismo en el Hospital Regional Sur en Rosario, que se mantiene en obras desde hace once años, finalmente la Provincia invertirá 24 millones de pesos para construir un cerco perimetral que resguarde el inmueble.
Según la licitación publicada, se llevará a cabo un cerco que bordeará por completo el efector. También, se mejorará la luminaria del predio y se instalarán cámaras de seguridad en el obrador, con el fin de evitar más desguaces.
La firma que se hará cargo de los trabajos es PH Constructora SRL y el costo de la obra, que tendrá un plazo de ejecución de tres meses, será de 24 millones y medio de pesos.
Resulta que la mega obra -paralizada- que se levanta en la zona sur en la avenida de Circunvalación y San Martín, y que comenzó a construirse bajo gobierno de Antonio Bonfatti en 2011, aún sigue inconclusa. Ante el abandono de la obra, el inmueble viene siendo desguazado por incesantes robos de materiales.
Tanto las aberturas como cualquier producto de aluminio o bronce fueron los más saqueados del hospital. De esto dio cuenta, hace pocos meses, el secuestro de una chata por parte de la policía que estaba repleta de estos materiales. Sus ocupantes se dieron a la fuga, dejando el vehículo abandonado.
Ante esta situación, la propia ministra de Infraestructura, Servicios Públicos y Hábitat de la Provincia, Silvina Frana, había admitido a Mirador Provincial que la gestión de Perotti “no culminará la obra del efector”, aunque sí confirmó que lo dejarían con “todos los servicios”, sumado al cerco perimetral, que se acaba de anunciar.
Quejas al Municipio Ante la indefensión del denominado “Elefante Blanco” de zona sur, que se ubica en el barrio Las Flores, desde el Concejo de la ciudad se encomendó a la Municipalidad que gestione ante el Ministerio de Salud de la Provincia la contratación de una empresa de seguridad privada para custodiar la obra del efector durante las 24 horas.
La concejala socialista Verónica Irizar -impulsora de la iniciativa- criticó fuertemente la falta de avance en las obras y documentó a su vez el pésimo estado en que se encuentra en la actualidad, con situaciones de robo constantes, con solo dos policías para casi 30 mil metros cuadrados ni un plan para terminar una obra fundamental para la zona sur de la ciudad.
A este reclamo de obras inminentes y más seguridad en el predio también se sumaron desde Vecinales Rosarinas Unidas. Las vecinas y vecinos de la zona piden por la intervención del hospital y la reactivación urgente de la obra para poder frenar los hechos de inseguridad y brindarle, sobre todo, una respuesta sanitaria a toda la zona sur de Rosario y alrededores.
Una obra interminable
El mega proyecto, que comenzó la gestión socialista en 2011 y que según aventuró el ex gobernador Miguel Lifschitz en su última recorrida sería “el más grande y moderno del país”, se encuentra a medio camino.
Es que la pandemia obligó a repensar todo el sistema sanitario no sólo de Santa Fe sino del país y la necesidad de camas acaparó todas las energías y recursos del 2020.
Apenas asumida la actual gestión peronista se estimó que hacían falta cerca de 4 mil millones de pesos para finalizar y equipar el megaproyecto. Dos años y medio después, y con un promedio inflacionario superior al 50 por ciento anual, esa cifra quedó muy lejos de lo que podría ser necesario para concluirlo.
En pleno confinamiento decretado por el presidente Alberto Fernández, la secretaria de Arquitectura y Obras Públicas de la provincia, Leticia Battaglia, había anunciado que en el Presupuesto 2021 pensaban en “elaborar alternativas para poder avanzar con el efector, quizás con financiamiento extranjero o algún programa nacional en el que nos podamos incluir, porque es una inversión costosa y hoy no contamos con los recursos para hacerle frente con medios propios”, algo que finalmente no sucedió.
Frana admitió que la gestión de Perotti no terminará el hospital, aunque sí lo dejaría con todos los servicios resueltos y aseguró: “También vamos a hacer la obra de provisión de agua, que la vamos a desarrollar en conjunto con Aguas Santafesinas”.
“A su vez, vamos a crear un cerco perimetral para proteger el inmueble y la ministra de Salud, junto a un grupo de expertos, va a redefinir el destino de ese lugar, porque la pandemia generó nuevas demandas, una nueva situación de salud y nuevos requerimientos, por eso hay que repensar la totalidad del lugar y a partir de allí se comenzarán con las obras”, añadió la funcionaria.
Además, confió que se encuentran en tratativas con el gobierno nacional para acceder a algún financiamiento para resolver distintos trabajos en etapas. Por ahora, la construcción del cerco parece lo más cercano en concretarse, el resto el tiempo lo dirá.