Ignacio Pellizzón Después de que la ONG ambientalista “El Paraná No Se Toca” divulgara imágenes en las que se mostraban máquinas topadoras en pleno desmonte en el humedal, cerca del arroyo Careaga, y tras un escrache en redes, finalmente el municipio de Victoria -Entre Ríos- notificó a los maquinistas y
“frenaron las tareas”, confirmó a Mirador Provincial la directora de Producción y Ambiente de la Municipalidad de Victoria, Luciana Silva. “Después de que la Delegación de Islas de la ciudad de Victoria hiciera una constatación del lugar, sacara fotos e informara sobre la cautelar vigente, se informó al Juzgado Federal y a la provincia de Entre Ríos”, agregó.
Resulta que desde el 2020 hay una medida judicial cautelar que prohíbe este tipo de tareas, pero en algunas ocasiones, con autorización judicial, pueden realizarse movimientos de suelo, siempre y cuando no se realice un cambio morfológico de una isla o se interrumpa o modifique un curso de agua, contaron a este medio desde el municipio de Victoria.
El cese de actividades de las topadoras se da al mismo tiempo que integrantes de la comisión de Ecología y Ambiente del Concejo Municipal dieran despacho a un pedido de informes que encomienda al Ejecutivo rosarino a gestionar información ante el municipio de Victoria y la Secretaría de Ambiente de la Provincia de Entre Ríos sobre el movimiento de suelos con el fin de modificar la topografía de las islas.
A su vez, se sumó otro proyecto del concejal Ciro Seisas, de Arriba Rosario, que propone que se gestione ante el Juzgado Federal de Victoria, Gendarmería Nacional y la policía de esa ciudad entrerriana para que “se informe si vinculados a los mismos terrenos se recepcionaron denuncias o constataron actividades de desmonte o prohibidas en la zona de islas”.
Esta última solicitud incluye información sobre si existen permisos y autorizaciones otorgadas en la misma zona, quien es el responsable de otorgarlas, su procedimiento, requisitos y su forma de revocación.
Otro dato que se requiere es si existen cambios de titularidad en el registro dominial del lote 10 y qué actividades se realizan en el lugar y cuáles se encuentran permitidas, entro otros datos. Entre ellos, si se encuentran reglamentadas a la fecha, normas de producción, de urbanización, de flujo poblacional, de fuentes de energías alternativas y otros aspectos pertinentes, de modo tal que, protegiendo los procesos naturales, se alcancen niveles de rendimiento de los recursos compatibles con su sobrevivencia y utilidad a perpetuidad en consonancia con el artículo 22 de la Ley 10.479.
Qué pasó A principios de octubre, la ONG ambientalista “El Paraná No Se Toca” divulgó imágenes en las que se muestran máquinas topadoras en pleno desmonte en el humedal, cerca del arroyo Careaga.
Tras los incesantes incendios que vienen acechando a Rosario y ciudades aledañas, los ambientalistas siguen recibiendo denuncias de muchos habitantes de las islas que denuncian el accionar de maquinarias en el territorio.
“Esto forma parte de un paisaje habitual. Es cierto que rige una medida judicial que impide el acceso de este tipo de maquinarias al territorio de islas, pero evidentemente esto no se está respetando y mucho menos controlando”, contó a Mirador Provincial el referente de la ONG, Jorge Bártoli.
La zona denunciada es a la altura de Puerto General San Martín, específicamente en el arroyo Careaga, antigua vía navegable que unía Rosario con la ciudad de Victoria, previo a que se construyera el puente.
Lo llamativo de este caso en particular es que a pocos metros de este lugar hay una comisaría de islas que, evidentemente, “no estaba informada al respecto y tampoco tomó nota del traslado de este tipo de equipamiento mediante embarcaciones”, afirmó Bártoli.
“Entendemos que estas máquinas fueron llevadas para desarrollar un trabajo intenso de desmonte, algo muy habitual en este tipo de territorios”, añadió.
Desde la ONG señalaron vía redes sociales que las máquinas avanzaron “sin importarle absolutamente nada, arrasando todo en su camino isla adentro, y nadie las detuvo, siendo que no está muy lejos de la Comisaría de la 1ª Sección de Islas, por otro lado, esta zona está declarada por Victoria como Reserva Natural”.
“Esta problemática ya está judicializada en la Justicia Federal”, confirmó el referente de la ONG y agregó: “Nosotros somos frecuentes receptores de este tipo de denuncias; estas fotos nos llegan por parte de personas que viven en la isla y que se ven afectadas por este tipo de operaciones”.
Este desarrollo que se ve en las imágenes “se debe a un emprendimiento estrictamente ganadero en las islas”. “Esto no implica que todos los productores ganaderos estén en la misma bolsa, porque no hay que generalizar, pero en este caso en particular no es amigable con el medio ambiente”, continuó Bártoli, quien apuntó contra un frigorífico.
Más allá de las personas involucradas, “insistimos que estos son casos generalizados a lo largo y ancho de todo el Humedal del Delta de Paraná que no hay que dejarlos pasar y mucho menos en estas circunstancias que venimos atravesando”, cerró el vocero de “El Paraná No Se Toca”.