Recientemente campeón por segunda vez consecutiva en el Seven Internacional de la Playa, que organizó con éxito el Club Universitario de Concepción del Uruguay en el balneario de Banco Pelay, La Tahona sigue causando una revolución en el ámbito del rugby playero.

Al observar el plantel y ver tantas caras diversas, de diferentes nacionalidades y con representantes de distintos clubes, muchos se preguntan quiénes son, cómo surgieron y qué hace tan distinto a este conjunto notablemente ganador, que cuenta con una considerable base de uruguayos, peruanos y argentinos, entre los cuales Entre Ríos está imprimiendo su marca.

Los sanduceros Matías Zanoniani y Luis Pedro Achard, personas cuyo nombre es sinónimo de Seven tanto en la Unión de Rugby del Uruguay y en todo Sudamérica, fueron los artífices de esta gesta. En diálogo con MIRADOR ENTRE RÍOS, ambos repasaron sus sensaciones respecto al pasado, presente y futuro de La Tahona.

–¿Cómo se proyectó La Tahona 7?

Matías: –Con Luis Pedro siempre tuvimos la idea de poder seguir vinculados a un equipo, de seguir viajando, compartiendo terceros tiempos, aunque sin estar atados específicamente a un club. Parecía una idea algo utópica en principio. Los dos estamos muy vinculados a este desarrollo inmobiliario que se llama justamente La Tahona, que tiene barrios por todo Uruguay y viven actualmente más de 1.500 personas. Uno de esos barrios está al lado del Paysandú Golf Club, donde tiene su sede Trébol Rugby, el actual campeón uruguayo. En ese sentido, pensamos en armar un combinado para competir entre varios de los integrantes de ese barrio. Fue así que decidimos armar un plantel con diferentes jugadores que, en su mayoría, hayan pasado por distintos seleccionados pero que principalmente les guste jugar Seven, que tengan buena onda, que sean referentes en sus clubes y con la consigna fundamental de competir divirtiéndose.

–¿Cómo fue diagramándose el plantel?

Luis: –En principio, para bajar a tierra esta idea loca que teníamos, armamos un plantel con uruguayos que por mi parte dirigí en el seleccionado uruguayo y que en su paso por Los Teros 7’s, Matías también había tenido de compañeros. Y quien no haya pasado por un seleccionado, buscábamos que sean referentes en sus clubes. Pero, ante todo, pretendíamos que fuesen buena gente y que quieren estar. Diagramamos una lista muy grande, con jugadores con muchas ganas.

Al primer equipo lo establecimos apenas comenzaron a abrirse las restricciones relativas a la pandemia, con todo lo que eso implicaba. Recién se abrían las fronteras y muchos jugadores debieron bajarse por no tener permisos, por no contar con la vacunación completa o por tener Covid-19. Ese plantel fue la base de todo lo que continuó después.

Presente

–El equipo cuenta con uruguayos, argentinos y peruanos. ¿La integración y la amistad, son las claves de este plantel?

Matías: –Tenemos un equipo muy diverso y variado, de distintos clubes y edades. Se ha generado una relación muy estrecha de amistad y camaradería pese a la distancia. Hay jugadores de Perú, Entre Ríos, Buenos Aires y por supuesto de Uruguay. Nos vemos cuando podemos, más allá de encontrarnos lógicamente en la temporada de Sevens. Pero durante el año nos mantenemos en contacto vía WhatsApp y estamos al día entre todos. Siempre decimos que con este grupo tenemos una casa a donde quedarnos, a donde fuera que vayamos. Somos todos amigos. Cada vez tenemos más ganas de encontrarnos y de seguir proyectando cosas en conjunto.

–Dada tu trayectoria como entrenador, ¿qué considerás que hace rugbísticamente diferente a La Tahona?

Luis: –Lo primero que me viene a la mente es que todos los que están en el equipo, realmente desean estar y a todos les apasiona el Seven. Entonces, cuando llega ese momento de competir, todos hacemos lo imposible por poder estar. Ese es el plus más importante. Tal vez no tenemos un estilo de juego definido porque simplemente nos juntamos para jugar y divertirnos, pero todos entendemos el juego y creo que todos lo llevamos muy adentro. Cada integrante del plantel sabe que para poder progresar de instancias en cualquier torneo, la base es la defensa. Es clave ese uno contra uno que tanto transmite y contagia. Si uno es sólido en defensa, lo demás es mucho más fácil. Todos son muy buenos jugadores y cuando un jugador es fanático de la defensa, lo otro es más simple. En todos los torneos en los que estuvimos llegamos a instancias finales. Algunas finales ganamos y otras perdimos. En esas, principalmente, nos tocó felicitar el contrario, pero con la tranquilidad de haber dado todo.

Objetivos

“Los anhelos de este combinado pasan por competir, divertirnos y dejar una buena imagen. Ahora, estamos evaluando distintos torneos para participar. Ya jugamos en diferentes lugares de Argentina y ahora vemos la posibilidad de participar de certámenes incluso del exterior. Tenemos invitaciones de Brasil, España y otros. Queremos que sepan principalmente que cuando va La Tahona a competir, va a haber rugby y diversión”, sostuvo Matías Zanoniani.

“La Tahona es un grupo completamente abierto en el que todos tienen las puertas abiertas. Los mismos integrantes fueron proponiendo gente que no necesariamente hayan sido jugadores, sino que se han sumado preparadores físicos, kinesiólogos, colaboradores, entre otros. Siempre, con la premisa de ser una buena persona y dejar muy bien representado a su club de origen”, concluyó Luis Pedro Achard.