La revista literaria El Cocodrilo es hija de la Asociación de Graduados en Letras de Rosario. Desde hace ocho años ofrece un espacio de lectura y publicación promedio de un texto semanal. A dos meses de haber participado en la ciudad de Paraná de la Feria de Revistas Independientes y Autogestivas, la presentamos en Mirador Provincial.
Un bautismo y nombre con historia
Sin dejar de lado el semblante seductor que lo caracterizaba, cierta vez Adolfo Bioy Casares supo contar una anécdota muy particular en la que se vieron involucrados dos escritores, con dos estilos completamente antagónicos en sus formas de narrar y crear literatura. Dos autores que marcaron a fuego las letras no solo de Argentina sino el andar de la narrativa de habla hispana en sí, por lo menos durante el siglo pasado.
En la oralidad de la anécdota, el creador de “La invensión de Morel (1940)” y “Diario de la guerra del cerdo (1969)” evoca a su amigo Jorge Luis Borges en referencia a las formas de vida de Roberto Alrt, unos de los grandes representantes del llamado Grupo de Boedo, espacio donde encontró conexión con la Editorial Claridad para publicar sus primeras novelas, “El juguete rabioso (1926), “Los siete locos (1929)” y “Los Lanzallamas (1931)” y gran parte de su obra posterior.
Foto: Gentileza.
Según Bioy Casares, el creador de “Ficciones (1946)” y “El Aleph (1949)” quien pertenecía más por adjudicación ajena que propia al Grupo de Flores (alter ego literario de Boedo), ironizó al referirse a Roberto Arlt como a alguien muy ingenuo que se dejaba engañar por cualquier plan para ganar mucha plata, a condición de que hubiera en él algo deshonesto.
Los dichos de unos de los últimos grandes genios que tuvo la literatura hispanoamericana fueron según Bioy Casares sostenido por algunos ejemplos audaces al referirse al creador de Endosain, “se interesó mucho en instalar una feria para rematar caballos, en Avellaneda. El verdadero negocio consistía en que clandestinamente cortarían las colas de los caballos, venderían la cerda y ganarían millones. Un negocio adicional: con las costras de las mataduras del lomo fabricarían un insecticida infalible.”
El ánimo de creciente indignación borgeana traspolaba a los ideales políticos de Roberto Alrt, “era comunista: se entusiasmó con la idea de organizar una gran cadena nacional de prostíbulos, que costearían la revolución social. Era un malevo desagradable, extraordinariamente inculto”.
Borges era bastante desconfiado de la ajena disputa de los supuestos grupos antagónicos de Flores y Boedo. Más bien estaba donde la literatura convocaba y en la búsqueda de bautismo de fuego para una revista literaria se encontró hablando una noche con Ricardo Guiraldes (autor de Don Segundo Sombra, 1926) y Evar Méndez (fundador y director de la mítica revista Martín Fierro). En la mesa también estuvo presente Roberto Arlt, quien con su voz tosca, extranjera y llena de vicios preguntó en forma de sugerencia: “¿Por qué no le ponen Cocodrilo?”. La anécdota culmina cuando Bioy Casares revela la risa de Borges ante la naturaleza “imbécil” de Roberto Arlt.
El nombre de la revista literaria hija de la Asociación de Graduados en Letras de Rosario es un homenaje al popular escritor Roberto Arlt, una búsqueda de su deseo. Literatura y periodismo literario encuentran sus cruces de contenidos con una publicación promedio de un texto por semana.
Algunas secciones de la revista literaria en su versión digital
Crónicas, ensayos, reseñas, entrevistas (entre las que se pueden leer las realizadas a Mariana Enríquez, Luis Gusmán, Milena Bertolino, Selva Almada, Luciano Lamberti y Patricio Pron), poemas (en esta sección se encuentran poemas de grandes poetas emergentes y contemporáneos como Diego Colomba, Flor Inflowerland, Pablo Bilsky, Pau Turina, Ana Clara Pugliese, Marina Maggi, Maia Morosano, Ángel Oliva, Olivia Milberg, entre otros), traducciones (en esta sección podemos leer distintos textos traducidos al castellano, como “Paranoia, un canto” de Stephen King realizada por Mecela Alemandi, poemas de Tony Harrison caídos al castellano de la mano de Marcelo Bonini o poemas de Andrea Cohen bajo la lupa de Lucía Thobokhol, por no nombrar los poemas italianos de Cesare Pavese convertidos al castellano con el trabajo de Nadia Grisetti) y aula (donde se desarrollan distintos textos analíticos sobre el sistema educativo en general) son algunas de las secciones que conforman el formato y la entrega de la revista. En ella participan escritores no solo de la ciudad de Rosario.
Algunas voces del pulmón literario
“Del equipo editorial hay tres que somos graduados, Tomás Sufotinsky, Manuel Díaz y y yo (Chechu Muñoz), todos egresados de la carrera de letras de la facultad de Humanidades y Artes dependiente de la U.N.R. Después hay dos estudiantes de letras que son Thiago Susán y Felipe Hourcade y Enesto Gallo que es estudiante de psicología” afirmó Chechu Muñoz en diálogo con Mirador Provincial.
“La revista tiene un perfil literario, la idea es publicar siempre un texto que mantenga relación con la literatura. La revista tiene diferentes secciones, como crónica, narrativa, entrevistas, aula que es una sección para textos en relación a lo pedagógico. En la sección textos se encuentran diferentes trabajos, hay reseñas también. Siempre en relación a la literatura”, agregó.
Haciendo historia, el primer número de la revista salió en el año 2014. La Asociación Graduados de Letras cumplió diez años el año pasado y si bien depende de la asociación, mantiene cierta autonomía en lo que es la organización y la gestión de las publicaciones. La revista no tiene fines de lucro y depende económicamente de la asociación. Chechú nos señaló, “es una revista que se desarrolla a pulmón, las tareas nos la repartimos y las selecciones de las publicaciones las realizamos a partir de textos que nos mandan personas que quieren publicar en la revista y también buscamos escritores y escritoras no solamente de Rosario sino de otras provincias para que colaboren y presten sus escritos”.
Desde Mirador Provincial también nos acercamos a Tomás Sufotinsky quien contó: “la revista El cocodrilo surge desde una asociación civil que nuclea a graduados de la carrera de letras de Rosario, es decir, la asociación de Graduados de Letras de Rosario que es una asociación que no tiene ninguna vinculación con la universidad mas que el hecho de que quienes formamos parte de ella estudiamos ahí en su gran mayoría. La asociación existe desde el año 2012 y en el año 2014 salió el primer número de la revista con el formato de Issuu”.
Al preguntarle sobre la frecuencia de publicación, contó que “salió una publicación por año en el 2014 y 2015. También hay algunos ISSUUS más que salieron semestrales”. La web existe desde el año 2018 y se fue perfeccionando a lo largo del tiempo, “por la comisión editorial de la revista fueron pasando varias personas que en su origen fueron miembros de la asociación civil, luego se fue ampliando. Primero formaban parte los asociados, después no necesariamente asociados, como lo es hoy en día que tenemos gente que no viene de la carrera de letras. Así que la revista ha ido diferenciándose un poco en su constitución”.
En cuanto a las publicaciones que hacen señaló: “hemos publicado tanto a asociados como a gente diversa de espacios diversos y de lugares geográficos distintos. Poemas, textos narrativos, entrevistas, traducciones, etc tienen lugar en la revista” y agregó “tenemos el sector aulas que tuvo profusión sobre todo durante la pandemia más cerrada, que tenía que ver con estrategias, reflexiones, experiencias en cuanto a la enseñanzas en la escuela de la literatura”.
Integrantes del equipo editorial
Tomás Sufotinsky, Chechu Muñoz, Thiago Susán, Felipe Hourcade, Manuel Díaz y Ernesto Gallo.
Contacto
web: revistaelcocodrilo.com
Instagram: @revista_el_cocodrilo
Facebook: Revista El Cocodrilo