La imagen se viralizó este domingo y recordó una de las historias más particulares de la ciudad de Santa Fe.
Se viralizó este domingo una foto de un yaguareté sobre un camalote en la Laguna Setúbal, en la zona de la costanera de la ciudad de Santa Fe.
A simple vista la imagen impresiona, pero al prestar atención en los detalles queda en evidencia que se trata de un montaje. Además de que no es una situación común en esta zona, el pasto qué hay sobre el camalote y lo seco que está animal son algunas de las irregularidades.
Un viaje al pasado
No sería la primera vez que un yaguareté aparece en la ciudad de Santa Fe. Al ver el montaje, varios santafesinos recordaron en redes sociales la historia del animal de estas características que atacó y mató a un grupo de sacerdotes en el Convento de San Francisco en 1825.
De hecho, hoy en día en el lugar se exhibe una mesa que lleva una marca del animal que habría llegado subido a un camalote en medio de una crecida.
Según los registros de la época, en plena madrugada, una fuerte crecida amenazó la ciudad de Santa Fe. En medio de las aguas revueltas, un yaguareté logró nadar hasta la costa de la ciudad y se coló en el Convento de San Francisco en busca de comida.
La marca que habría dejado el yaguareté en 1825.Foto: archivo/Luis Cetraro
Sin embargo, allí se topó con los habitantes del convento y acabó matando a tres de ellos. Al escuchar los gritos, vecinos y autoridades acudieron en su ayuda, logrando acorralar al yaguareté en la sacristía y lo mataron.
Esta historia, emblemática de la región de Santa Fe, ha conmovido a generaciones y sigue haciéndolo hasta el día de hoy, especialmente en las visitas escolares.
La especie
Los yaguaretés, también conocidos como jaguares, son una especie de felino que se encuentra en América del Sur y Centroamérica. Son los felinos más grandes de América y uno de los más fuertes del mundo, capaces de matar presas mucho más grandes que ellos.
Son animales solitarios y territoriales, y cazan principalmente por la noche. Son excelentes nadadores y trepadores, y se alimentan de una variedad de presas, incluyendo ciervos, peces, anfibios, reptiles y aves.
Desafortunadamente, la población de yaguaretés ha disminuido significativamente en los últimos años debido a la caza furtiva y la pérdida de su hábitat natural. Hoy en día, se consideran especies en peligro de extinción y muchos esfuerzos están en marcha para protegerlos y conservar su hábitat.