Este fin de semana se realizó en Santa Ana el segundo encuentro de Jeep 4x4. Más 70 participantes de Entre Ríos, provincias vecinas y países limítrofes disfrutaron y brindaron un pintoresco espectáculo para los presentes. Los circuitos se realizaron en el pueblo, la zona de playas y campo traviesa. Tanto organizadores como espectadores resaltaron lo propicio del escenario natural para la prueba.
Cristian Ocampo y Walter Colombo organizadores del II Encuentro de Jeep 4x4 en Santa Ana e integrantes del Jeep Club 4x4 Mandisoví hicieron referencia a lo ocurrido el pasado fin de semana en el evento. Se mostraron muy satisfechos con la concurrencia, ya que participaron vehículos de Entre Ríos, Corrientes, Córdoba, Santa Fe, Buenos Aires, además de visitantes de Brasil y la República Oriental del Uruguay.
Este es el segundo encuentro que se realiza en Santa Ana, pero además ya se hicieron dos en Villa del Rosario, uno en Chajarí y otro en Federación. “El apoyo en Santa Ana por parte del municipio es muy bueno, y a la gente le gusta mucho por la particularidad de las playas, el hospedaje, y la cercanía, porque tenemos el comienzo de la trilla desde la puerta de la casa prácticamente, sin tener que hacer circular mucho los vehículos que son pensados y modificados para este tipo de circuitos” explicaron los organizadores.
La participación fue muy buena, unos 75 participantes, “casi el doble del año pasado que eran algo más de cuarenta jeep” añadieron.
Las actividades comenzaron el sábado a las 18 horas con la inscripción, y pase por una pista de obstáculos en la zona de Playa 52, 22:30 horas se trasladaron a la costanera de Santa Ana, con una travesía por barro, el domingo la largada fue a las 9 horas y nuevamente pasaron por costanera.
En cuento a los organizadores contaron que se trata de un grupo de catorce personas que llevan varios años reunidos, “salir al campo con estos vehículos es algo muy lindo, te despeja, y es un deporte que se lo hace en familia, con amigos, se genera algo muy agradable”, dijeron los entrevistados. “Llegar a una parte del bosque donde no se llega con ningún otro vehículo, comer un asado y salir es una experiencia única” aseguraron.