Casi un centenar de personas intentó sacar de una vivienda a un hombre al que apuntan como vendedor de drogas, en la zona de Cabal al 1300 bis. Hay un amplio despliegue policial.
Pasado el mediodía de este lunes 6 de marzo, luego del velorio de Máximo Geres, el niño de 11 años que fue asesinado de un tiro en el pecho durante una balacera en la zona de Los Pumitas, al este de barrio Empalme Graneros, casi un centenar de personas incendió una moto e intentó derribar una casa en construcción en la que, según señalaron, vive una persona que vendería drogas en el barrio.
Si bien en el lugar hubo varios coches policiales en el horario del velorio, realizado en el club Los Pumas, pasadas las 13, vecinos de la zona protagonizaron una pueblada y se dirigieron hasta una casa ubicada sobre calle Cabal al 1300 bis.
Muchos de los presentes intentaron hacer justicia por mano propia, lanzando ladrillos y botellas contra una vivienda y sacar del lugar a un vecino, ante las cámaras de televisión de varios canales que estaban en la zona.
Luego de varios minutos volvieron al lugar patrulleros de la policía provincial y también del grupo Giri (grupo de infantería de respuesta inmediata), para intentar calmar a quienes estaban protestando en plena calle.
En un momento, la policía logró sacar de la vivienda señalada por vecinos a una persona, que fue retirada con custodia. En pocos minutos, la situación se desmadró y la policía comenzó a efectuar disparos con municiones de goma. Tras casi 15 minutos, la situación se calmó, aunque todavía hay gran cantidad de vecinos y policías en la calle.