El ministro de Seguridad de la Nación, Aníbal Fernández, aseguró que el gobierno nacional hace todos los esfuerzos para frenar la ola de violencia en Rosario.
El funcionario público presentó 300 gendarmes y 100 agentes de la Policía Federal Argentina más para frenar los homicidios y balaceras que van en aumento en esta ciudad. “No hemos subestimado nada. Sabemos cuál es la gravedad de la situación de la ciudad”, aseguró el ministro. “El día que asumí, al primero que recibí fue al gobernador de la Provincia de Santa Fe”, sostuvo Fernández. “Todo lo que ven aquí está funcionando a pleno”. El propio gobernador Omar Perotti, el intendente Pablo Javkin y el ministro de Seguridad provincial, Claudio Brilloni, estuvieron en el acto desarrollado en el predio de Gendarmería Nacional Argentina (GNA) de la zona norte de la Circunvalación.
“No vamos a bajar los brazos en ningún momento”, agregó el ministro. “Hay hombres, mujeres, niños, ancianos que viven con el corazón en la boca. Estamos metidos todos en esto para encontrarle las soluciones. Y la vamos a encontrar”.
Sobre los teléfonos móviles en las cárceles, Aníbal Fernández expresó: “No soy yo el que se los otorga. Con esos teléfonos se hacen muchos de esos daños”. En relación a la connivencia de policías con bandas criminales, aseveró: “Si hay policías que tuvieran esa connivencia, nosotros vamos a detenerlo. No toda la policía tiene ese comportamiento y hay mucha gente que ha participado y que ha hecho actos muy importantes siendo de la Policía de Santa Fe”.
Con respecto a tiempos anteriores, el ministro de Seguridad nacional señaló: “Hace 10 años baleaban la casa del gobernador Bonfatti, con lo cual esto empezó muchísimo tiempo antes. En ese momento, no existían (había en Rosario) 3.000 hombres y mujeres de las fuerzas federales ni por casualidad. Si había 500, era mucho. En este momento, estamos rondando los 4.000. No nos vamos a detener”.
También fue preguntado por la balacera en la puerta del supermercado del suegro de Lionel Messi acontecida la semana pasada. “Creo que lo que han querido es hacer un enorme ruido y el ruido lo han conseguido. Nada más que eso. Nosotros no tenemos nada que ver con eso”, afirmó Fernández. “No vinimos específicamente por lo que sucedió con la familia Messi. En un par de meses más vamos a estar viniendo con otro grupo de fuerzas especiales con tareas nuevas”.
La palabra de Perotti
También habló el gobernador con los periodistas. “La magnitud de lo que hay que enfrentar amerita que haya una coordinación creciente”, subrayó el primer mandatario provincial. “La estructura de la Justicia Federal tiene casi 30 años de la misma manera. Y con esas herramientas es donde hay que dar la pelea”, aseveró Perotti.
“Estamos en un destacamento que no existía, que pasa a ser permanente. Esta es una primera gran diferencia”, comentó Omar Perotti. En relación a los controles que ejercen los gendarmes, aseveró: “El grueso de balaceras o de sicariato se da con dos personas en moto. Si no tenemos instancias donde podamos hacer controles de documentación, estamos garantizándole la circulación con total libertad”.
“La marginalidad siempre es un caldo de cultivo bueno para la captación de jóvenes a las bandas narcotraficantes”, aseveró el gobernador. “Todo lo que podamos para dar oportunidades diferentes a eso es lo que tenemos que marcar”.
Por su parte, el intendente Javkin señaló: “Completamos 1.400 agentes federales acá. Si no tienen movilidad, si a la vez no intervenimos los teléfonos en las cárceles, si no trabajamos en el lavado de dinero, no lo vamos a resolver con un aspecto. Es todo y todo a la vez”.
El acto se desarrolló en el destacamento de la GNA en Circunvalación, a unas 30 cuadras de la zona donde mataron a Máximo Gerez, niño de 11 años, días atrás.