Luego de la victoria ante Atlético Nacional, el entrenador de Patronato no ocultó su emoción y afirmó: “Estoy feliz de haber llegado a Paraná, me ayudaron a cumplir un sueño”. Además, Nazareno Solís, expresó: “Nos propusimos un cambio y se ve”.
Con la voz quebrada y ronca, Rodolfo De Paoli no ocultó su emoción en Conferencia de Prensa luego del triunfo de Patronato, ante Atlético Nacional en Medellín, que le otorga el pase a la Copa Sudamericana: “Nunca me pasó el tener una relación tan cercana con estos jugadores. El abrazo del final con los jugadores, es mágico”, inició.
“Venimos de abajo, de nuestras historias, el club está en su mejor momento, jugó la Libertadores, va a jugar la Sudamericana, es el último campeón de la Copa Argentina, tiene un trago amargo de irregularidad en el Torneo más difícil del mundo, sin exagerar”, contempló en la misma tónica, contando sus emociones.
En otro momento, agregó: “Estoy feliz de haber llegado a Paraná, me hayan ayudado a cumplir mi sueño. Ellos (por los jugadores) no son conscientes, pero me han ayudado muchísimo. Estoy feliz y agradecido, porque los jugadores se brindaron al cien por ciento”.
Pese a dejar de lado lo futbolístico, reconoció lo valioso de la victoria: “Tenemos solo seis entrenamientos y tuvimos tres partidos en diez días. La última vez que use este saco, fue relatando la final de la sudamericana a River y hoy lo volví a usar, cumpliendo un sueño. Admiro a Nacional y ganarle a este equipo de esta manera, fue especial”.
Por último, expresó: “Fuimos a buscarlo de entrada, pero el rival juega y tenía que salir a demostrar y cambiar la cara frente al fastidio de la gente. Me quedo con las felicitaciones del entrenador rival. Hicimos historia, le ganamos a un gran equipo. Estamos felices”.
NAZARENO SOLIS
Uno de los puntos altos de Patrón en Medellín, también describió sus emociones: “Fue un partido emocionante, llegamos convencidos. La semana que trabajamos con Rodolfo notamos un cambio grande, nos propusimos eso, un cambio. Hoy le ganamos a un equipo muy grande”.
“Fue un partido aparte, no llegamos cómo favoritos, venimos de perder un partido en una categoría muy difícil, pero se está notando un cambio, de los últimos dos partidos con Rodolfo ganamos dos y eso quiere decir algo”, afirmó.
“Estoy contento por el esfuerzo, hay que cambiar el chip constantemente y esto se disfruta poco, porque las alegrías son cortas. Ahora hay que disfrutar y prepararnos para recibir a Flandria”, completó la idea, ya hablando en relación al partido del próximo domingo en la Primera Nacional.
En esa tónica, indicó: “Ahora queda sentar cabeza, tratamos de vivir el día a día y el partido a partido, pero nos beneficia jugar contra rivales que proponen más, pero nos tenemos que replantear eso en el torneo, la concentración que tenemos en la Copa, regularizarla en el campeonato”.