La actual gestión provincial estuvo atravesada por una pandemia. Y Salud, sin dudas, es el área que más dejó en evidencia las fortalezas y debilidades de un sistema que no se define por los últimos cuatro años ni la actual gestión.

La pandemia demostró que en Santa Fe faltaban camas en terapias intensivas, respiradores, insumos… pero también evidenció el profesionalismo de todo el personal de salud (médicos, camilleros, enfermeros, choferes de ambulancia, personal de limpieza, entre otros).

El Covid-19 mostró que en Santa Fe, la salud estaba concentrada en dos grandes ciudades: Santa Fe Capital y Rosario, y que era necesario descentralizarla para garantizar el acceso a ciudades y localidades más pequeñas, como se hizo.

La salud antes y durante la pandemia
Transcurría la primera quincena de diciembre de 2019 cuando el gobernador Omar Perotti presentó a los ministros de su gestión. En Salud, quien ocupaba ese rol era Carlos Parola. Hasta ahí, solo había que esperar el transcurso de los meses para saber qué acciones se harían en la cartera sanitaria, qué cosas se proponía mejorar la gestión, continuarlas o dejarlas sin efecto -venía de varias gestiones socialistas-.

Pero no hubo tiempo. Un virus completamente desconocido y mortal -en esa fecha- empezaba a extenderse por todo el mundo. Y Argentina no fue la excepción: el 3 de marzo de 2020, el servicio de virosis respiratorias del Instituto Malbrán detectó la presencia de SARS-CoV-2 en un hombre de 43 años que había estado en Europa, más específicamente en España e Italia.

En Santa Fe, el primer caso de Covid-19 se conoció el 15 de marzo de 2020. Y eso fue un antes y un después no solo en la gestión, que por ejemplo derivó en el cambio del ministro de Salud, sino en toda la población.

"Ya en diciembre cuando asumimos, no me gustaba nada todo lo que escuchaba sobre este virus completamente desconocido. Estaba haciendo estragos en países del primer mundo…", cuenta hoy a El Litoral quien tomó los guantes de la situación y aceptó el cargo de ministra de Salud, luego de una charla que tuvo con el gobernador Perotti en la cual éste le transmitió confianza, apoyo y seguridad: Sonia Martorano.

La noenatóloga, que desde el 16 de junio de 2020 ocupa el cargo de ministra de Salud, formaba parte de la gestión de Omar Perotti desde el primer día. Lo hacía como secretaria de Salud de la provincia.

La diferencia entre Santa Fe y otras provincias con respecto al coronavirus fue que, con aciertos y errores -ambas cosas incuestionables en un contexto de incertidumbre total y de miedo- fue que no hubo improvisaciones. Hubo decisiones. Hubo conducción. Hubo una cabeza dentro de un enorme equipo de trabajo donde no importaron partidos políticos, ni lo público o lo privado. Hubo un gran equipo tirando para el mismo lado y dando lo mejor de sí siempre.

Santa Fe ya contaba con sectores preparados para la atención de casos covid cuando empezaron a aparecer los primeros. Eso, junto con la compra anticipada de insumos como barbijos Nº 95 para el personal de salud, contribuyeron a que en medio del caos haya un poco de orden.

"A fines de marzo, Santa Fe ya tenía protocolos de actuación y toda una estructura propia de acción en el marco de la pandemia. Tenía gobernanza, es decir un Ministerio de Salud que con el aval del gobernador daba todas las indicaciones. Y una excelente respuesta del otro lado, sin la cual no podríamos haber hecho nada. Eso también fue fundamental", dice la ministra Martorano mirando hacia atrás.

Si bien fallecieron muchas personas a causa del covid, el trabajo realizado en Santa Fe durante la pandemia fue muy bueno. Los médicos y todo el personal vinculado a la sanidad lo dieron todo y las autoridades fueron claras a la hora de tomar decisiones y adoptar medidas.

La llegada de las dosis de las vacunas también es para destacar. Los operativos de vacunación a lo largo y ancho de toda la bota, en cuanto a organización de turnos y logística, funcionaron muy bien.

¿Hubo vacunatorios VIP en Santa Fe? Esta pregunta aún es una incógnita. Funcionarios del gobierno aseguran que no, pero hubo denuncias al respecto y hasta fue noticia la renuncia de una alta autoridad de la Empresa Provincial de la Energía por este tema.

La salud pos pandemia
La provincia de Santa Fe tuvo, durante los dos años de pandemia y en paralelo, una agenda no covid en Salud. Eso posibilitó fortalecer el sistema y, lo más importante, descentralizarlo.

Entre lo realizado figuran la proyección y construcción de nuevos hospitales fuera de Rosario y Santa Fe Capital -las dos grandes ciudades de referencia para el sur y el norte provincial-, la apertura de terapias intensivas en ciudades como Rafaela; la creación de cargos para que lleguen profesionales médicos a zonas poco pobladas; la recategorización de hospitales según las normas de calidad; y el acceso de médicos de toda la provincia a becas y congresos de capacitación.

"Esta gestión se propuso una salud de cercanía. Es decir que la gente no tenga que irse kilómetros de su casa para recibir atención. Tranquilamente podríamos haber mejorado significativamente los hospitales, pero optamos por hacer otra cosa. Decidimos llevarle la atención a sus propios lugares o por lo menos más cerca. Con respecto a la capacitación de los médicos no es algo menor. Hoy tenemos profesionales del Alassia entrenándose en el Garrahan para realizar cirugías 100% locales en pacientes con cardiopatías congénitas", destacó Sonia Martorano.

Algo novedoso y para destacar es la incorporación en la provincia de mayor tecnología en lo que respecta a biología molecular. Para que se entienda, las muestras que antes se enviaban al Instituto Malbrán en Buenos Aires ahora se estudian acá.

"Santa Fe adquirió aparatos con extractor de ácido nucleico robotizado. Esto sirve, por ejemplo, para el análisis de PCR que se hacía para covid pero también para dengue, chagas... Pero además permiten la secuenciación genómica. Es decir que si hoy aparece una nueva cepa, acá ya se puede estudiar. No hace falta mandar nada al Malbrán".

Varias cuestiones pendientes
A poco de que finalice la gestión de Omar Perotti es una realidad que hay cosas que quedarán pendientes y que será misión del próximo gobierno -sea cual fuere el color político- tenerlas en cuenta o no. Entre ellas, la refacción edilicia de hospitales y centros de salud, en algunos casos casi completa, y la situación del personal de la salud, que se encuentra completamente agotado.

Al respecto cabe recordar que Santa Fe atraviesa una emergencia pediátrica por falta de médicos, muchos profesionales están migrando al exterior en la búsqueda de mejores oportunidades y cada vez son menos los egresados de medicina que eligen especializarse en algo porque no lo ven redituable. Hoy hay un nuevo paradigma en el Sistema de Salud que quienes asuman a partir de diciembre deberán comprender y, sobre todo, atender.