Marianela Melo vive en Coronda y trabaja en Santa Fe. Hace 5 años perdió a una amiga por cáncer de mama y un año después ella lo contrajo. Pudo superarlo y está a punto de obtener el alta definitiva, aunque siempre deberá estar atenta. Un testimonio de fortaleza y de conciencia sobre lo positivo de los controles médicos preventivos.
Marianela Melo tenía 36 años en 2019 cuando recibió una de las peores noticias de su vida. Sin embargo, cuatro almanaques después pudo festejar con gran algarabía la llegada de sus 40, con una fortaleza y una serie de vivencias que dejan de manifiesto su don de gran ser humano y la alegría de vivir y disfrutar de todo lo que haga.
Un día que parecía cualquiera en su rutina, notó que tenía algo parecido a una de las bolitas de jugar en uno de sus pechos, y eso encendió todas las alarmas. “Nea”, como es más conocida, supo poco tiempo después que se venía una gran batalla en la cual debía estar muy bien parada para poder seguir adelante con sus proyectos.
Marianela dio positivo de cáncer de mamas, y con un cúmulo de temores, sufrimiento, dolor, desasosiego e inquietud transitó un sendero que ya le había quitado a una amiga poco tiempo atrás, paradójicamente.
Corondina, empleada de Jerárquicos Salud, al terminar su día laboral, Nea nos permitió charlar sobre la enfermedad y sobre todo, ayudar con esta visualización de su caso a que la prevención nunca está de más.
-¿Cómo descubriste que tenías cáncer de mamas? ¿Alguna vez antes, habías tenido molestias o surgió de golpe?
-Lo detecté yo en una de las mamas. Era un nódulo sólido, parecía una bolita de esas con las que se juega. Nunca antes había tenido algo parecido, por eso mismo enseguida fui al médico (a la ginecóloga que habitualmente me atendía y hacía controles anuales).
-Generalmente la mayoría de los casos se da después de los 45 años, a vos te tocó antes. ¿Te explicaron qué pudo pasar?
-Nunca antes me había hecho mamografía. Porque según mi edad y al no tener antecedentes familiares no eran necesarios. No se habló del porqué sino de que debía realizar la cirugía lo antes posible porque era muy riesgoso tener eso en mi cuerpo. Y después de evaluar lo retirado en la cirugía me hicieron el tratamiento. Según la edad, es lo que se está haciendo ahora con el avance de la medicina.
-¿Qué le pasó a tu cuerpo después de tu operación? ¿Seguís en tratamiento?
-Mi cuerpo no fue el mismo no sólo por la cirugía en sí. Sino por el tratamiento de quimioterapia y rayos donde cada uno de ellos fue invasivo a todo el cuerpo. Y el día de hoy tengo algunas secuelas de estos mismos. Esto fue en 2019 y aún estoy tomando una última medicación como para cerrar todo el tratamiento y asegurar que no se forme nada más en mi cuerpo.
-¿Qué cambió en tu mirada hacia vos misma como mujer, con lo que implicó la enfermedad en cuanto a tu operación y demás cambios? ¿De la Marianela sin este problema, a la que siguió adelante luego, qué se modificó en tu psiquis, tus pensamientos, tu filosofía de vida?
-En cuanto a lo físico aún el día de hoy lucho contra sentirme cómoda con cierta ropa y aunque a veces estoy un poco incómoda noto que también va de acuerdo al estado de ánimo y depende de si las secuelas que me dejó el tratamiento siguen dando vueltas en mi organismo. Lo que fue más impactante fue bajar diez kilos. Quedarme completamente pelada y anémica. La mirada de mis familiares y allegados fue conmovedora ahora que lo recuerdo… ellos sufrieron tanto como yo. En cuanto a lo que cambié… ya no me caben cosas mínimas por decirlo de alguna manera. Y veo cuáles son importantes y en ellas me centro y le pongo toda mi energía y ganas. El qué dirán y la mirada ajena trato de que cada día me importen menos. En este momento estoy haciendo actividades que me gustan y las dejaba de hacer por timidez o por falta de decisión y no me daba cuenta de lo feliz que me iban a hacer. Que justamente hoy hago eso, busco la felicidad en cada una de actividades que realizo.
Cuatro años después de que le detectaron cáncer, "Nela" celebró sus 40 con sus padres y seres queridos.
Gentileza.
-¿Habías conocido, tratado, cuidado o sabido de alguien cercano con cáncer durante tu vida, antes?
-Tuve una amiga de la infancia que el año anterior a lo mío falleció a causa del cáncer de mama. Al vivirlo cercano y después que me tocara a mí, me generó el pensamiento de que le puede pasar a cualquier persona indistintamente. Yo no tenía antecedentes y me hacía chequeos anualmente. Nunca antes había tenido un nódulo o algo irregular. Mi caso fue distinto, cada cuerpo es diferente y así también depende del diagnóstico para evaluar el tratamiento a seguir. Justamente mi detección temprana y la rapidez de los doctores hicieron que todo se diera de la mejor manera posible.
-¿Qué les dirías a las mujeres en este día tan especial?
-Les diría a las mujeres que se realicen controles anuales o si notan algo irregular, que vayan enseguida a su médico. Que los controles son sencillos y rápidos a la vez. Que es súper importante una detección temprana, que el cáncer de mamas tiene cura cuando se detecta a tiempo.
El pasado 24 de marzo, Marianela celebró con sus seres queridos un cumpleaños que suele ponerles “los pelos de punta” a las mujeres, pero que en realidad fue una especie de homenaje en vida por la ratificación del privilegio de salir adelante y por seguir con la búsqueda de la felicidad disfrutando de cada cosa que haga.