Se acerca el momento de hacer balances y Rosario Central va por el buen camino. Después de algunos altibajos, logró regularidad, apoyado sobre todo en su extraordinaria campaña de local, y a dos fechas del cierre de la temporada se encuentra en puesto de clasificación a Copa Libertadores de América. O sea que está entre los mejores cuatro equipos de toda la temporada, nada más y nada menos. Al mismo tiempo, todavía mantiene vivo el sueño de clasificar a los cuartos de final de la Copa de la Liga. Este sábado, deberá refrendar todos esos logros momentáneos recibiendo a River en el Gigante de Arroyito. “Llegar al lugar donde estamos no es simple”, advirtió el entrenador Miguel Ángel Russo.

Central acumula 59 puntos en la tabla anual del fútbol argentino de Primera División. Eso se traduce en el cuarto lugar de ese escalafón, consiguiendo por ahora un boleto a la Libertadores 2024, el mayor torneo continental, que además otorga millonarios premios en dólares solo por el hecho de estar entre los clasificados. El equipo rosarino deberá defender esa posición en los dos partidos que le quedan, ante River de local y frente al ya descendido Arsenal en Sarandí. En el peor de los casos, ya se aseguró un lugar en la Copa Sudamericana del año que viene.

En la Zona A de la Copa de la Liga, Central quedó un poco relegado tras el empate de este lunes frente a Barracas Central en cancha de Huracán. Sin embargo, está a solo dos puntos de Banfield, que a falta de dos fechas es el último equipo que está logrando el pasaje a los playoffs, junto con River, Independiente y Huracán en ese mismo grupo.

“Ver a dónde agarramos el equipo y dónde estamos, no es fácil”, remarcó Miguel Ángel Russo tras la igualdad con Barracas Central, un equipo siempre complicado. “Nosotros queríamos los tres puntos, pero son partidos difíciles, con un equipo duro que pelea la categoría y necesita sumar”, analizó el DT canalla.

“Los primeros que nos exigimos somos nosotros, creo que podemos más. A esta altura me molesta que me hagan un gol de esta forma”, comentó Russo sobre el tanto del empate de Barracas, que llegó tras una distracción de la defensa de Central en un saque lateral. Después consideró que “salvo River, nadie ha sacado diferencias tan grandes”.

“Si me decías que íbamos a estar peleando un lugar en la Libertadores, te lo firmaba enseguida”, sentenció Russo, dejando en claro que está más que conforme con la campaña que vienen realizando sus dirigidos. El sábado que viene, desde las 18.30, Central jugará su último partido de local en el año -en caso de clasificar a los play off, se jugarán a partido único en cancha neutral-, nada menos que ante River, el último campeón y puntero de su zona. Allí los canallas pondrán en juego su largo invicto de local e irán por un golpe futbolístico que les permita seguir soñando despiertos.