Durante octubre, la llegada del fenómeno de El Niño se hizo sentir en la costa del Uruguay. Una de las ciudades más afectadas es Concordia, en donde el río pasó los 13 metros y debieron evacuar a más de 600 familias en pocos días.

Aunque ahora el río comenzó a bajar, lo hace a ritmo lento y aún está sobre los 12 metros, lo que no permite recuperar el paseo de costanera ni tampoco da la posibilidad a muchos de los vecinos de volver a sus viviendas.

Según las previsiones, el Uruguay se mantendrá en un promedio de 12,60 metros al menos durante una semana y después habrá que esperar para ver qué impacto tiene la llegada de agua desde el norte y las lluvias pronosticadas para los próximos días.

Los especialistas aseguran que las precipitaciones pasadas no son, aunque en algunas zonas parezca, las más copiosas y que durante el trimestre que comprende a noviembre, diciembre y enero “El Niño se hará sentir”.

La temperatura de la superficie del mar (TSM) sobre el Pacífico tropical sigue siendo mucho más cálida de lo normal y la circulación atmosférica sobre los trópicos responde a este calentamiento. De hecho, en el último mes, el actual fenómeno de El Niño se ha acrecentado, entrando en la categoría de intensidad fuerte.

En ese marco, los meteorólogos prevén que el actual evento seguirá intensificándose. Un nuevo modelo de previsión climática desarrollado por el Centro Nacional de Investigación Atmosférica de Estados Unidos (NCAR) predice que se convertirá en un “Súper Niño”, y podría ser uno de los más intensos de la historia.

LO QUE VIENE

El meteorólogo Miguel Thea, que trabaja en el Servicio Meteorológico Nacional en Concordia, contó qué previsiones tienen para los próximos meses. “El pronóstico trimestral para toda la zona del Litoral, en noviembre, diciembre, y enero de 2024 indica que habrá precipitaciones por encima de lo normal. Tendremos lluvias un 50% por encima de lo normal”, advirtió en diálogo con Mirador Entre Ríos.

En cuanto a lo que ocurrió durante el mes pasado y la diferencia con lo que pasará, explicó: “Octubre no fue tan lluvioso en esta zona, pero a partir de ahora sí va a ser un poco más lluvioso y se sentirá. Durante esos tres meses llovían 300 milímetros en total, ahora puede llegar a llover 400 milímetros o más. Eso nos da una pauta de lo que podría llegar a ocurrir. Es algo extraordinario”. Según el meteorólogo, las precipitaciones no serán la única novedad, sino que el verano tendrá también otros componentes que variarán. “En temperatura también vamos a andar un 45% o un 50% pobre encima de lo normal, así que se dará una combinación para que haya días pesados: humedad y calor es lo que se espera para este verano. La temperatura se mantendrá sobre los 30 grados y la humedad por encima del 70 u 80%”, aseguró y aclaró: “Esa es la característica de la región. Nos habíamos acostumbrado a tener bajos porcentajes de humedad porque así se dio durante el fenómeno de La Niña, pero vivimos en una zona muy húmeda”.

Thea mencionó además que el pronóstico coincide con lo que se prevé en toda la cuenca del río Uruguay y países vecinos. “Estas previsiones son iguales para el Litoral argentino, el sur de Brasil y también parte de Paraguay. Justamente en Brasil se siente en este momento porque tienen precipitaciones abundantes, pero luego pasará en toda la cuenca”.

Acerca de lo que ocurrirá con el fenómeno de El Niño y la probabilidad de que continúe en los próximos meses, explicó: “Ahora solamente podemos ir previendo de a trimestres. El ENOS, que es la entidad que investiga el fenómeno de oscilación sur que da El Niño, se renueva cada tres meses. El último parte da una probabilidad 100% de Niño activo, así que al menos hasta diciembre sabemos que efectivamente lo tendremos y creemos que luego continuará”.

EL COMPORTAMIENTO DEL RÍO

Con un escenario de probabilidades que indica que las precipitaciones irán en aumento durante los próximos meses, en Concordia se preparan para vivir un “verano atípico” con probables variaciones en el nivel del río frente al puerto. El ingeniero Guillermo Collazos, jefe del área de Hidrología de la Comisión Técnica Mixta de Salto Grande, asegura que están ante un escenario de “fluctuaciones constantes”.

“Ahora se ve un panorama un poco alentador, el río creció mucho, pero menos de lo que esperábamos y pudimos manejar la creciente subiendo el nivel del embalse. Ahora hubo un descenso y eso dio un respiro, pero estamos atentos a lo que podría ocurrir ya que sabemos que estamos en fase Niño y lo que eso implica”, aseguró a Mirador Entre Ríos.

“Vamos trazando previsiones de acuerdo con el comportamiento del río y las precipitaciones en toda la cuenca, tenemos el sistema para estudiarlo. No podemos prever tanto, pero notamos que el trimestre hasta enero será lluvioso y ante eso tendremos que estar preparados para operar. Seguramente habrá crecientes ordinarias y alguna que otra extraordinaria, por lo que no nos relajamos y estamos informándonos constantemente para poder trabajar y procurar que la crecida cause el menor daño posible”, explicó.