Este lunes, el nivel del río San Javier alcanzó la preocupante cifra de 6,92 metros, exacerbando la situación y dejando a numerosos hogares sin agua, aún aquellos que tienen tanques de reserva. El jefe de la planta potabilizadora, Ignacio Gervasoni, informó a Radio Med sobre los severos problemas que enfrentan debido al caudal del agua y a los daños causados por los camalotes en las estructuras de bombeo. Actualmente, el equipo de la cooperativa está llevando a cabo reparaciones urgentes e instalando nuevas bombas con el objetivo de restablecer el suministro. Aunque se espera que la situación se normalice, Gervasoni advirtió que llevará tiempo.

La cooperativa hace un llamado a la solidaridad de la población, pidiendo a los ciudadanos que minimicen el consumo de agua para usos básicos hasta que se resuelva la emergencia.

Gervasoni detalló que la correntada ha causado daños significativos, incluso la rotura completa de un equipo de bombeo durante la noche. A pesar de los esfuerzos para instalar nuevas bombas, el proceso se ve obstaculizado por las difíciles condiciones de trabajo en el entorno acuático, especialmente durante la noche.

El jefe de la planta expresó confianza en que, con el tiempo, la situación se normalizará, especialmente con la entrada en funcionamiento del módulo 3 de la planta. Además, destacó la colaboración de los empleados de la cooperativa y del corralón local, que ofrecieron herramientas y personal para apoyar los esfuerzos de reparación.

Se espera que, a medida que avancen los trabajos y se restaure el suministro de agua, la presión se normalice gradualmente, permitiendo a la ciudad superar esta contingencia. La cooperativa insta a la comunidad a seguir las indicaciones, minimizar el consumo y mostrar paciencia durante este período desafiante. Ignacio Gervasoni agradeció la comprensión de la población y se puso a disposición, aunque advirtió que la atención telefónica podría estar limitada debido a las labores de emergencia.