Mientras se espera la sustanciación del debate, Sebastián Portillo continuará con arresto domiciliario. Se le imputan cuatro graves hechos cometidos con arma de fuego. En uno se logró determinar que el arma era de utilería. También se le atribuyó resistirse a un arresto y amenazar de muerte a un policía y su familia.
Fuentes judiciales informaron que el viernes 22 de diciembre, la jueza de Garantías de Paraná, Marina Barbagelata, resolvió prorrogar la prisión preventiva que viene cumpliendo el imputado Sebastián Portillo, que enfrenta cargos en tres legajos por sendos hechos. En la audiencia de prórroga de la prisión preventiva estuvieron la defensora pública oficial, Antonella Manfredi, y la fiscal, Melisa Saint Paul.
El joven enfrenta cargos por los delitos de Robo agravado por ser en poblado y en banda y por la utilización de un arma de utilería; Robo calificado por arma de fuego cuya aptitud para el disparo no se tiene por acreditada, en calidad de autor; Amenazas calificadas y Resistencia a la autoridad; y Robo simple en grado de tentativa.
UTILERÍA
El primer legajo que se sustanció contra Portillo consignó que “el 17 de septiembre de 2023 aproximadamente a las 7.35 Sebastián Portillo, Gustavo Benítez y Sebastián Valdez, ingresaron al local comercial sito en calle Miguel David al 3000 muñidos de un arma de fuego de utilería y luego de golpear con el arma en la cabeza a CCG, se apoderaron ilegítimamente de un celular, la suma de 3.000 pesos y una cortadora de fiambre para luego darse a la fuga con los elementos en su poder y descartando a los pocos metros la cortadora, que fue recuperada por vecinos. La conducta de los imputados fue subsumida en la figura de Robo agravado por ser en poblado y en banda y por la utilización de arma de utilería”.
En el segundo, se le endilgó que junto a dos desconocidos, “el 17 de septiembre de 2023, aproximadamente a las 19.30, en inmediaciones del campo sito en calle Enrique Mihura y Tibiletti, dañaron la moto Honda CG titán de KERS, que se encontraba acompañado de su novia AN, y se apoderaron ilegítimamente de dos cascos de moto, luego de lo cual Portillo exhibiendo un arma de fuego negra, les manifestó: ‘quedensé quietos, miren cómo les rompimos la moto’, lo que causó gran temor en los mismos, que comenzaron a correr pidiendo ayuda dejando caer un celular, apoderándose Portillo del mismo para darse a la fuga junto con las otras dos personas por la vía del tren”. Este hecho fue subsumido en la calificación legal de “Robo calificado por arma de fuego cuya aptitud para el disparo no se tiene por acreditada, en calidad de autor”.
En el tercer legajo que comenzó a sustanciar el fiscal Martín Abrahan por los supuestos delitos de Amenazas calificadas y Resistencia a la autoridad, se le imputó a Portillo que “el 27 de septiembre de 2023 a la 1.35 aproximadamente, estando en la intersección de calles Hernández y Soldado García, amenazó con un machete a sus vecinos LDL y CEA. Posteriormente hizo presente personal policial y estando en la puerta de la vivienda de Portillo, amenazó al funcionario policial Marcelo Pereyra diciéndole: ‘ya me tienen cansados ustedes, a vos te voy a matar y a tu familia le voy a llegar y a tu hijo y tengo un 38 para ellos’”.
Finalmente, se le imputó que “el 1 de octubre de 2023, alrededor de la 1.20, Portillo y otra persona aún no identificada, forzaron la puerta del local comercial sito en calle Jorge Newbery al 3500 de Paraná, pero al notar la presencia del móvil policial es que emprendieron la fuga, arrojando un hierro hacia las malezas, siendo aprehendido Portillo”. La conducta del imputado fue subsumida en la figura legal de Robo simple en grado de tentativa.