La comunidad deportiva del Club Atlético Talleres se encuentra en estado de alerta después de un acto de vandalismo en la sede de Toribio Ortíz que dejó a sus instalaciones con grandes problemas en la iluminación y graves destrozos en diferentes sectores del predio.
El campo de deportes ubicado en Toribio Ortíz y Cruz del Sur ha sido víctima de robos anteriores, pero esta vez, la situación ha alcanzado un punto crítico.
Los destrozos y faltantes comprenden alarmas, conexiones de agua, iluminación, intento de ingreso a vestuarios y depósito de elementos de trabajo de los empleados, entre otros.
Los reiterados hechos delictivos generan preocupación en la Comisión Directiva, que realizó la correspondiente denuncia policial y solicitó una reunión con las autoridades policiales de la comisaría 2° de Paraná con el objetivo de resolver esta problemática a la brevedad.
En ese marco, la Directiva solicitó un servicio adicional al organismo provincial correspondiente pero la respuesta fue negativa aduciendo que la Policía no cuenta con “personal para cubrir con el servicio ante la gran demanda de pedidos solicitados con anterioridad”.
La sede es utilizada todas las semanas por cientos de socios, entre niños, jóvenes y adultos. Es un espacio deportivo que cuenta con canchas de hockey sobre césped, sóftbol y paddle; dos quinchos techados, vestuarios, baños, buffet, parrilleros y un sector de juegos infantiles.
