El premiado unipersonal sobre las mujeres que habitan a Juana Azurduy “Territorio coraje” vuelve a escena en el Mes de la Mujer en acompañamiento de la lucha feminista de la actualidad. La obra teatral comenzó con una investigación histórica basada en el trabajo de la historiadora Berta Wexler, y desde su estreno fueron decenas las repercusiones y premiaciones obtenidas por este equipo teatral rosarino de mujeres.

Azurduy protagonizó innumerables combates con su filoso sable y la seguían ciegamente centenares de hombres y mujeres armados de lanzas. Vivió en un orfanato, sufrió la muerte de sus hijos y de su marido Manuel Asensio Padilla en combate. Fue distinguida por el gobierno de Belgrano por sus proezas en las batallas del Alto Perú, pero murió en la pobreza y el olvido el 25 de mayo de 1862. En 2009 fue ascendida a general post mortem, convirtiéndose en la primera mujer en alcanzar ese grado.
Bajo dirección de Cielo Pignatta, la dramaturgia y la actuación de María Victoria Franchi, la obra dialoga constantemente entre pasado y presente, marcando líneas de fusión y encuentro permanentes para pensar la actualidad desde referencias históricas. La polifacética vida de la heroica Juana Azurduy se despliega mientras una famosa periodista televisiva opera para los realistas y se empeña en denostar la lucha de las mujeres.

En ese camino, y con un trabajo de actuación y del cuerpo notable de la actriz, Juana se enamora, juega con sus hijos y lucha con su familia al frente de las tropas, mientras un guerrero poeta escribe versos en combate y las Amazonas arrebatan banderas. El escenario será el campo de batalla, la memoria, un sable filoso, y allí se utilizan variadas expresiones como el clown, la poesía y máscaras, y el recurso del humor infaltable en momentos de quiebre del drama.

Incluso en algunos fragmentos de la obra se destacan escenas con técnicas de sable en las artes marciales, con armas de aquella época, que Franchi incorporó con la maestría de Hernán Fernández.

La obra se podrá ver en una función única en la Sala Empleados de Comercio, Corrientes 450, este sábado a las 20. Entradas con descuento al 341-3440030 ó al 341-6388722. Descuentos especiales para instituciones o grupos de compañeras.

Su intérprete y dramaturga María Victoria Franchi relató a Mirador en torno al proceso de creación de esta obra con investigación histórica, los ribetes de la actualidad, y un mensaje que permanece intacto de la lucha por los derechos de las mujeres y de los pueblos. Vuelve un día después del 8M y es por eso que por esta ocasión la obra fue rebautizada por sus creadoras “Territorio coraje: Juana Azurduy y la lucha colectiva”.

- ¿Por qué la historia de Juana Azurduy tiene vigencia?

- Me parece que su figura tiene vigencia porque ha podido encontrar un lugar en la historia, comparado con muchas otras que han quedado totalmente al margen.

Sus hazañas fueron de gran valentía y compromiso con la causa. Será por eso que Belgrano le regaló su sable y le dio un rango en el ejército cuando eso era imposible para una mujer en la época. Será por todo esto que su figura está vigente y tiene un lugar en los libros, desde hace un tiempo.

También creo que nosotras buscamos nuestras referentes en la historia que es contada desde una lógica androcéntrica. Es por eso que muchas artistas y todo el colectivo busca contar la historia donde estemos todos y todas. Y creo que el gran desafío con el que nos encontramos día a día es en cómo contarla. Encontrar la manera, nuestra manera.

Además de estos análisis por los que nos llevó la obra, cuando leemos sus historias e imaginamos su presente, sentimos que su tremendo coraje es la llama que sigue encendida.

Como si nunca se hubiera apagado y está a lo largo de la historia de la humanidad y en la actualidad, en cada una de las mujeres que da batalla en los barrios, en los comedores, en las escuelas, en sus trabajos, en sus casas. Es esa llama la que está vigente, la de querer cambiar la realidad de este mundo desigual.

-¿Cómo fue el trabajo de crear la narrativa de la obra, que se basa en la investigación histórica de Berta Wexler, relacionando la historia de Juana Azurduy con las luchas feministas de la actualidad?

-Para escribir la obra investigué y fui recopilando información de varios libros. Di con el libro de Berta y fue clave para poder darle esa perspectiva que describí más arriba. La de una Juana rodeada de movimientos de mujeres en la lucha altoperuana.
Con esa mirada y ese material nace el personaje de la conductora de televisión, que es la que cuenta estos hechos. Y nos imaginamos como relatarían los medios hegemónicos estas batallas. El resultado es una mezcla de algo muy trágico contado con humor.

Contamos la historia de Juana Azurduy desde la lucha colectiva. Desde la Juana que es joven, la que es madre y guerrillera, y sus logros individuales fueron logros colectivos. Creamos puentes temporales para mirar desde allí que muchas de aquellas luchas siguen vigentes.

Contamos desde la voz de una conductora de televisión actual las grandes hazañas colectivas protagonizadas por mujeres en aquella época, que dan cuenta que el colectivo siempre estuvo presente haciendo historia.

Los cambios siempre son colectivos, la lucha es colectiva y viene trabajando a través del tiempo para construir nuestra historia. Ya no queremos contar a una heroína única en su especie. Queremos contar la historia de alguien que estuvo conectada con su tiempo y los movimientos que la rodeaban. Que lo hizo junto a otras y otros.

Premios, menciones y ficha técnica de la obra

Esta obra fue ganadora para representar a la provincia de Santa Fe en la Fiesta Nacional del Teatro 2023. Obtuvo una Mención especial a la actuación y el vestuario por el jurado de la 37 Fiesta Provincial del Teatro 2023; Mejor unipersonal en los Premios la Gordillo; Mejor unipersonal en los Premios Rosarigasinos; Mejor Música en los Premios La Gordillo.

Creada bajo la dirección de Cielo Pignatta; dramaturgia y actuación de María Victoria Franchi; asistencia técnica Constanza Viaplana; diseño de vestuario de Liza Tanoni; diseño de escenografía y realización de máscara de Pali Diaz; música original de Piter Jozami y Victoria Virgolini; asesoramiento en texto histórico Berta Wexler; diseño de iluminación de Diego Cuilicci; entrenamiento marcial de Hernán Fernández y fotografía de Mica Pertuzzo.