El fiscal Eduardo Lago junto al delegado del Ministerio de Seguridad, Nahuel Pasquinelli, estudiaron la escena del crimen. Daniel M. tenía 66 años y fue asesinado de un disparo en la zona abdominal. Los delincuentes se llevaron una fuerte suma de dinero y armas.
Tras el hallazgo del cuerpo sin vida de Daniel M., de 66 años, este domingo en una estancia ubicada en jurisdicción de Venado Tuerto, cerca del límite con Carmen, el fiscal Eduardo Lago, junto con Policía de Investigación, Policía Científica, personal del Comando Radioeléctrico y de las Comisarías 2ª y 14ª, pusieron en marcha un arduo trabajo para poder dar con los autores de este hecho.
Durante este lunes, recorrieron el predio en búsqueda de elementos de interés para la causa, además de intentar recrear el movimiento de los delincuentes durante la noche del sábado y primeras horas del domingo.
Hasta el momento, lo que es seguro es la faltante de una importante cantidad de dinero (se habla de millones de pesos) que Daniel, quien administraba el campo, tenía en su poder luego de concretar una venta de ganado. Además, se habrían llevado varias armas que estaban en la vivienda.
Las primeras hipótesis, confirmadas de manera extraoficial, ya que hay gran hermetismo por parte de los investigadores, hablan de un operativo comando y el uso de armas de fuego de grueso calibre para cometer este ilícito, incluso para quitarle la vida a la víctima, quien se habría intentado resistir y defender, recibiendo un disparo a corta distancia en la zona abdominal.
El trabajo de campo habría arrojado algunos indicios o líneas investigativas en las que se intentará avanzar para dar con los autores del hecho. A su vez, está en análisis si hubo algún informante que haya aportado datos del dinero que tenía en su poder el administrador.