En la lucha contra el dengue, Argentina podría tener un nuevo aliado: los drones agrícolas. La tecnología ofrece mayor precisión, eficiencia y seguridad en las aplicaciones, además de reducir el impacto ambiental.
En los últimos meses, los drones agrícolas vienen experimentando un auténtico boom de demanda en nuestro país, aunque un suceso inesperado, como es la expansión del dengue generó una nueva necesidad. Según Silvio Aran, titular de la firma Aran Tecnologías (de Humberto Primo), el aumento en la demanda de estos equipos obedece a su eficiencia para el uso agrícola.
"Ya tenemos un montón de unidades vendidas y eso ha despertado un interés en algunos Municipios y Comunas, que nos han estado consultando o preguntando si es una herramienta apta para combatir el dengue, dada la situación extrema o límite que se está alcanzando".
Según manifestó a Campolitoral, en otros países se han desarrollado exitosas campañas contra el mosquito transmisor de la enfermedad a través de la combinación del uso de aviones y de la pulverización terrestre. "En el caso del dron agrícola, es una herramienta que, a diferencia de una pulverizadora que genera diferentes tipos de gotas a medida que va avanzando, gotas muy gruesas, gotas óptimas y gotas extremadamente finas que tienen una deriva, y esa deriva no sabemos dónde va a parar, o un avión que viene dejando una estela de fitosanitarios que va quedando sobre el campo".
Un vórtice directo
Sin embargo, explicó que un dron ejecuta ese tipo de aplicación o de pulverización hacia abajo y el vórtice que generan las aspas, empuja las gotas hacia abajo. "Entonces estamos yendo a una velocidad baja: 15, 18, 20 kilómetros por hora, generando una gota controlada, que además de ser una gota controlada, está siendo empujada hacia abajo por las hélices o por el vórtice. Y cuando me refiero a gota controlada, me refiero a que nosotros tenemos la opción de generar una gota más fina o una gota más gruesa, pero el 100% de las gotas del mismo tamaño y no tener gota ultra fina que se deriva o tener una gota muy grande que no se puede dispersar bien" detalla Aran.
Esta posibilidad de generar una pulverización mucho más controlada, otorga al drone la ventaja de ser óptimo para aplicar en zonas pobladas y, al mismo tiempo, tener una gran efectividad. Al respecto, remarca: "El dron garantiza mucho más que una pulverizadora y que un avión que la gota vaya hacia abajo y que obviamente la podamos controlar y usar a nuestra necesidad teniendo por supuesto los recaudos necesarios tomados" y agrega: "estamos siendo consultados por varios municipios y comunas que nos han estado pidiendo demostraciones dinámicas, que nos acerquemos con el dron propio que tiene Aran Tecnologías".
Cabe aclarar que actualmente el uso de drones para aplicaciones en zonas urbanas y periurbanas no está legislado. En Argentina, contamos ahora con una herramienta de avanzada sumamente eficaz para ayudar en la lucha contra el dengue. Está en manos de nuestras autoridades que eso sea posible.