La rueda del fútbol argentino no se detiene. Mejor dicho, se acelera porque a mitad de año se viene el largo receso por la disputa de la Copa América. Por eso, con la Copa de la Liga a punto de definir un campeón entre Vélez y Estudiantes, que juegan la final este domingo, el resto de los equipos anda ocupado en sus temas, que son las competencias internacionales, la Copa Argentina y la Liga Profesional que arranca el fin de semana que viene. En ese contexto se encuentran Newell’s y Central, los equipos rosarinos de primera división que sostienen algunas batallas parecidas y otras muy distintas a esta altura de la temporada. La “Lepra” busca resetearse para iniciar el próximo campeonato con paso firme, mirando de reojo la Copa Argentina, que es el camino más corto -pero no menos complicado- para aspirar a sumar un nuevo título y un pasaje a la Libertadores. El “Canalla” tiene en la mira a Atlético Mineiro, en un duelo clave que no tendrá el fervor de su hinchada debido a la sanción que le impuso Conmebol.

Volver a empezar

Newell’s está en deuda y no hay nadie en el club del Parque Independencia de Rosario que no sea consciente de eso. El técnico Mauricio Larriera trabaja desde hace varios días en Bella Vista para convencer a sus jugadores de que esta vez se puede sostener en el tiempo una idea de juego que vaya de la mano con resultados. En la Copa de la Liga, la “Lepra” hizo el proceso inverso: arrancó ganando los primeros cuatro partidos con funcionamiento colectivo y rendimientos individuales muy altos, pero luego se cayó a pedazos y terminó reducido a la mínima expresión.

Larriera, como el resto de los entrenadores del fútbol argentino, sabe que hasta el parate de mitad de año por la Copa América no podrá sumar refuerzos. De ahí que por estos días, antes del debut de local frente a Platense, se concentra en potenciar a su base de jugadores titulares y a la vez impulsar a los jóvenes que siempre piden pista en una institución formadora como Newell’s.

A propósito de la formación de futbolistas, esa es otra materia en la que Newell’s no puede lograr los resultados que en décadas pasadas lo situaron como un club modelo. Es verdad que todos los años al menos tres o cuatro jugadores de las inferiores logran debutar en primera, pero en los últimos años ninguno logró consolidarse como para darle a la institución primero réditos deportivos y luego económicos a partir de una buena venta. El más exitoso de todos fue el defensor campeón del mundo Lisandro Martínez, pero todos los beneficios se los llevó increíblemente Defensa y Justicia.

El otro gran objetivo que Newell’s tendrá en la segunda parte del año, es la Copa Argentina. El equipo rosarino ya tiene rival, día, hora y sede confirmada para el cruce de 16avos de final: será ante Deportivo Riestra, el próximo jueves 16 de mayo a las 17.10 en el estadio de Patronato de Paraná.

Sin respiro

La agenda de Rosario Central viene mucho más agitada. Al ser uno de los equipos argentinos que está disputando competencias internacionales, no hubo descanso para los jugadores “canallas”, a pesar de que el papel en la Copa de la Liga fue más que discreto y el equipo de Miguel Russo, defensor del título, se quedó sin chances reales de clasificar varias fechas antes del desenlace. Pero al equipo de Arroyito el gran esfuerzo se lo está demandando la Copa Libertadores, que a partir de la semana que viene empezará a tener los partidos revancha en los grupos y así empezarán a perfilarse los que tendrán más chances de avanzar a octavos -los dos primeros- o de bajar a la Sudamericana -los terceros de cada grupo-.

En dos semanas, Central deberá afrontar seis partidos muy exigentes. El periplo “auriazul” empezará este martes a las 19, cuando los dirigidos por Russo reciban a Atlético Mineiro, por la cuarta fecha del Grupo G de la Libertadores. El marco será lamentable, ya que el encuentro no contará con hinchas en las tribunas debido a la sanción que Conmebol le aplicó a Central por los disturbios sucedidos en el primer encuentro frente a Peñarol.

Tres días después sería el primer encuentro de la flamante Liga Profesional. No oficializado aún, pero Central debutará en el torneo local el viernes 10 de mayo por la noche, visitando a Argentinos Juniors. El jueves 16, a las siete de la tarde, el “Canalla” tiene un partido en el que no puede fallar: de local ante Caracas de Venezuela, equipo al que los de Russo estarán obligados a ganarle y en lo posible por varios goles de diferencia.

El raid de Central seguirá con el enfrentamiento con Tigre, por la segunda fecha de la Liga Profesional. Será en Rosario, muy posiblemente el lunes 20 de mayo. Y luego chocará con Deportivo Riestra, por la tercera jornada del torneo local, probablemente el viernes 24 de mayo por la tarde -el equipo recién ascendido no cuenta con iluminación artificial en su cancha-.

La seguidilla frenética culminará con un duelo que seguramente será apasionante y caliente: la visita de Central a Peñarol en el estadio “Campeones del siglo” de Montevideo, el martes 28 de mayo a las 19. Recién ahí la dirigencia, el cuerpo técnico y el plantel podrán parar la pelota para observar el panorama y planificar el futuro.