La búsqueda de Enrique Fabiani, vecino de la provincia de Santa Fe que fue visto por última vez el 4 de junio en un campo ubicado en Mojones Sur Segunda, en el departamento Villaguay, tuvo avances este jueves con un careo entre Julio Lodi, dueño del campo, y el hijo del hombre.
Cristhian Panceri, abogado que asiste a Julio Lodi, dueño del campo donde el 4 de junio fue visto por última vez Enrique Fabiani, precisó que las acusaciones trabajan hipótesis que conducen a la Brigada de Abigeato. Lodi fue la última persona que vio a Fabiani, oriundo de Santa Fe, antes de que interviniera la Policía, que acudió ante un llamado suyo por una persona armada dentro de su propiedad.
Panceri asiste a Lodi y a María Trevisan y su familia, que son dueños del campo ubicado en Mojones Sur Segunda, en el departamento Villaguay, donde Fabiani fue visto por última vez, según consta en el legajo de investigación, entre las 0 y la 1 del 4 junio. Enrique había llegado a Entre Ríos a cazar con amigos y un hijo.
Panceri precisó que “hoy 4 de julio se realizó en la ciudad de Villaguay, ante el fiscal Mauro Quirolo, quien lleva la investigación garantizando todas las garantías del debido proceso, un careo por malas interpretaciones que surgieron de las testimoniales, entre mi representado y el hijo del señor Fabiani”. Añadió que fue con el objetivo de aclarar dudas y para prestar “ayuda y solidarizándose con los familiares del desparecido, quienes tienen una angustia por no saber el paradero o más datos de su padre”.
El letrado precisó que “hoy, esta parte pudo conversar con el querellante, Rubén Pagliotto, y el fiscal, aportando otras hipótesis, las cuales están dirigidas a la Brigada de Abigeato” y añadió que “solo esto puedo adelantar, a modo de infidencia y teniendo en cuenta los antecedentes que, según mi experiencia personal como abogado de la Federación y Asociaciones de Caza, Tiro y Pesca y todos sus miembros, Cotos de Caza, Tiro Federal Argentino y armerías, tanto de Entre Ríos y Santa Fe”.
En aquella línea, el letrado añadió: “Puedo decir y sé cómo se desempeña la Brigada de Abigeato, actuando muchas veces de manera abusiva, agresiva y de forma prepotente al realizar su trabajo y en desconocimiento de la ley”. No obstante, destacó que “dichas investigaciones o líneas investigativas, son debidamente realizadas con la prudencia y el fiel cumplimiento de las garantías llevadas adelante por el fiscal Quirolo y la querella particular”. Panceri también resaltó que “ante estas circunstancias es importante resaltar que ante todo lo dicho, mi representado siempre actuó con la mayor predisposición no solo hacia la justicia sino también hacia la familia para lograr el paradero del señor Enrique Fabiani”.
Respecto del hecho que se investiga, el abogado precisó que entre “las 0 y la 1 mi representado escucha ladrar a sus perros, sale de su casa con una linterna creyendo que era algún animal y se encontró sorpresivamente a un señor que portaba un arma de fuego”. El letrado añadió que ante aquella situación “Lodi le preguntó ¿qué hace usted aquí?”, recibiendo por respuesta que estaba “cazando”.
El letrado expresó que “ante dicha respuesta mi representado le solicitó de manera urgente y a viva voz que se retire del lugar porque era una propiedad privada y porque está prohibido cazar. Así, lo guio con su linterna hacia el camino vecinal, fuera de su propiedad, ya que el cazador no poseía linterna”. Finalmente, según consignó el letrado, Fabiani se disculpó y “se retiró sin más”.
Panceri indicó que “inmediatamente” a que Fabiani se retirara de la propiedad, “Lodi llamó a la Policía de Alcaraz, no teniendo respuesta alguna atento que no les funciona el teléfono fijo, y luego llamó a la Brigada de Abigeato, que llegó más tarde”. El letrado añadió que “es así que mi representado, sin pedido de la Fiscalía o de la querella, no realizó la cosecha de cereales correspondiente al mes de junio aun sabiendo el perjuicio económico que le traerá y paró todas sus actividades laborales, a los fines de colaborar y que se pueda rastrear los últimos movimientos de Fabiani”.
No obstante, Panceri agregó: “Pero habiendo transcurrido ya casi un mes, mi representado, quien es jubilado, necesita continuar sus actividades y hoy esto es un impedimento, ya que, ante la situación de desesperación, e incertidumbre, los familiares de Fabiani han ofrecido una suma de dinero a quien encuentre o tenga más datos. Es así que personas de los pueblos cercanos realizan una búsqueda de manera privada, invadiendo la propiedad privada de mi representado y de otros vecinos”.
Para el defensor de Lodi, aquella situación genera “un entorpecimiento a la Fiscalía” porque los voluntarios “causan estragos en los campos, es decir rompen, cortan instalaciones eléctricas de los paneles solares, cierran las bombas de aguas de los bebederos de los animales y aprovechan a cazar con la excusa de que está buscando al desaparecido”. Panceri indicó que aquellas acciones fueron puestas en conocimiento del fiscal este jueves, adelantando que “esta parte anotició a la Fiscalía y realizará las presentes denuncias formales” atento “los daños que causan personas ajenas, no solo a mi representado sino a otros campos linderos”.