Crítica posición de entidades ambientalistas

Autoridades advierten sobre nuevas quemas en las islas

 La cartera de Ambiente provincial avanza en un protocolo de acciones, desde Protección Civil ya se detectaron columnas de humo, y los ambientalistas reclamaron que se avance en gestiones concretas “que prevengan que vuelva un ecocidio como los que tuvimos en los años pasados de la pandemia”.


Ampliar [+]

 En las últimas semanas fueron varias las novedades en torno a las políticas ambientales y a las condiciones climáticas que propiciarán una nueva posible temporada de incendios de los pastizales en las islas entrerrianas. El lunes se reunieron los secretarios de ambiente de Santa Fe y de Entre Ríos para trabajar en un protocolo de acciones conjuntas que prevengan un nuevo ecocidio.

Desde la Universidad Nacional de Rosario explicaron que con el inminente regreso del fenómeno La Niña ya se percibe la bajante del Paraná y el descenso de precipitaciones, lo cual se suma a las muy bajas temperaturas desde mayo, las cuales generaron sequía en los pastizales, y que podría desencadenar en una nueva etapa de fuego y humo en las islas entrerrianas.

El secretario de Protección Civil ya reconoció que producto de esta biomasa en los pastizales “ya se comenzaron a visibilizar columnas de humo a lo largo de toda la provincia, frente a lo cual personal de Bomberos Voluntarios, Zapadores, Protección Civil y gobiernos locales vienen dando respuesta”.

El director del Observatorio Ambiental de la UNR, Matías De Bueno, advirtió que “hay que generar prevención, desarrollando cortafuegos y fortalecer los faros de conservación que al final consistieron sólo en montar unas cámaras”.

En torno de la reunión de los secretarios de ambiente de Santa Fe y de Entre Ríos para trabajar en un protocolo de acciones conjuntas para robustecer sus sistemas contra una posible nueva ola de incendios en las islas, el ambientalista de la Multisectorial Humedales (MH) Ivo Peruggino apreció:

“Celebramos acciones concretas con resultados, y esperamos que estén a la altura de las circunstancias. Nos gustaría que se avance en tareas de prevención y control para evitar los incendios en las islas, y que no quede en una foto o un discurso. Debemos estar preparados como sociedad para prevenir que vuelva un ecocidio como los que tuvimos en los años pasados de la pandemia”.


Un desglose a la mirada sobre el ambiente en la Ley Bases


La MH lanzó un comunicado tras la firma de los gobernadores del llamado Pacto de Mayo que conlleva la Ley Bases, con la preocupación de que buscará “avanzar en la explotación de los recursos naturales del país incumpliendo con la Constitución Nacional y tratados internacionales”, y que “a fin de ampliar las fronteras agropecuarias, irán por los humedales y los bosques”.

En su discurso el pasado 9 de julio en Tucumán, el presidente Javier Milei valoró que “en cada rincón de la patria se puede generar riqueza con los recursos naturales”, y estableció que “la naturaleza debe servir al ser humano y no al revés”.


Luego de esto, el viernes pasado decenas de organizaciones ambientalistas nacionales destacaron que lo establecido en la Ley Bases, así como las palabras de Milei, “reflejan una visión anacrónica que ignora los avances internacionales en materia ambiental de las últimas década”.


Mirador consultó entonces a la Multisectorial Humedales sobre el contenido de esta ley, de por qué es anacrónica y peligraría la sostenibilidad de los ecosistemas, y su referente, Ivo Peruggino desglosó una serie de factores: “La Ley Bases va completamente en contra de la protección y preservación de los ecosistemas. El Régimen de Incentivos a las Grandes Inversiones (RIGI) atraerá empresas de actividad primaria y extractiva como el agronegocio, la minería, el petróleo, el gas, y se les da prioridad absoluta para obtener los insumos que necesita su proceso extractivo, que generalmente es agua. Entonces ante la falta de este recurso, va a tener prioridad una minera para producir antes que la población para consumir”.


En esta nueva ley, prosiguió, “no figura exigir ningún estudio de impacto ambiental sobre la actividad a desarrollar en el territorio, y estas corporaciones también tendrían privilegio impositivo, regulatorio, cambiario, aduanero. La vigencia es a 30 años, y en este contexto de crisis climática y de contaminación. El Ejecutivo además tiene facultades de modificar fondos públicos como el de bosques nativos y el de manejo del fuego”.


En torno a su inconstitucionalidad, Peruggino destacó: “Se está violando el principio de no regresión ambiental al que Argentina adhirió en el acuerdo de Escazú en 2022, así como todos los acuerdos internacionales en materia climática, el Acuerdo de París; y hasta nuestra propia Constitución Nacional, que en su artículo 41 brinda el derecho de vivir en un ambiente sano y equilibrado, y en el artículo 124 que establece que corresponde a las provincias el dominio de los recursos naturales existentes en cada territorio. Todo esto pone a los territorios en riesgo de muerte inminente. La gestión tiene una postura negacionista y extractiva”.


Mirador: - Justamente en los últimos días desde el Observatorio de la UNR y otras organizaciones vienen planteando que varias circunstancias climáticas (camino a La Niña, sequía, bajas temperaturas y baja del río) hacen propenso un retroceso en el asunto quemas de pastizales en los humedales, e incluso el Gobierno provincial reconoció que ya se ven zonas de quemas. ¿Cómo ve la MH la realidad actual de las islas, y cuál es la postura en torno a un supuesto agravamiento del ecocidio en estos próximos meses?


Ivo Peruggino: - La Multisectorial Humedales ve con mucha preocupación este futuro de los próximos meses, y también del próximo año en el Delta del Paraná frente a Rosario, porque ya están bajando los niveles del río, quedan al descubierto tierras, y comienzan las actividades productivas.


Prevemos que se empezará a ver quemas, llegando el humo nuevamente a las comunidades y eso afectará a la salud pública de los santafesinos, ni hablar de los isleños que habitan allí. A eso se sumará que veremos en las islas terraplenes, rellenos, elevación de terrenos y actividades productivas opuestas a la conservación.


En los humedales lo que más se visibiliza son las quemas, pero también se están viendo estas otras cosas que lamentablemente no dejaron de suceder: seguimos observando otras problemáticas como la caza furtiva, la carga ganadera, la sobrepesca, empresarios usurpando tierras públicas, construcciones sin cumplir reglamentaciones, loteos ilegales, venta de vida silvestre.
El humedal es tierra de nadie, y eso es consecuencia de que no tengamos una ley de presupuestos mínimos para la conservación y la protección de estos ecosistemas.


- ¿Qué ocurrió con la ley de Humedales, la cual fue un reclamo con fuerza en la pospandemia?


- Lamentablemente los lobbies dentro del Congreso y los intereses hicieron que la ley de Humedales pierda el estado parlamentario por cuarta vez. Era una ley de presupuestos mínimos para conservación y restauración de estos sistemas que necesitábamos para mitigar un poco las consecuencias del cambio climático por su enorme capacidad de absorber carbono, entre otras múltiples funciones.


Hubo una traba muy grande en la Comisión de Agricultura, Ganadería y Pesca, y cuando logramos que se avance, un plenario de las tres comisiones (Agricultura, Presupuesto e Intereses marítimos) tuvieron dos dictámenes, uno por mayoría y otro por minoría, que ninguno llegó al Recinto.

Era una oportunidad muy grande que se perdió después de haber tenido más de un millón de hectáreas quemadas en el Delta del Paraná. Hoy no hay ningún otro proyecto de ley de humedales presentado. Es una deuda histórica de la política argentina para con su pueblo.


Continuar Leyendo...


+ Mirador Provincial