A través de un comunicado, la Comisión Directiva confirmó que traspasará su lugar en la categoría a Tomás de Rocamora, de Concepción del Uruguay. Será por la próxima temporada y con la intención de volver a la competencia para la edición 2025-2026. La anterior campaña dejó una deuda que sería de unos 27 millones de pesos.
La participación ininterrumpida de uno de los pioneros de la Liga Nacional de Básquetbol argentina masculina se truncó. Las autoridades del Atlético Echagüe Club (AEC) decidieron ceder la plaza en la Liga Argentina por una temporada, poniendo fin a 40 intervenciones consecutivas en el escenario nacional, récord que hasta ahora compartía solo con Atenas de Córdoba.
La entidad paranaense llegó a esta encrucijada producto de la millonaria deuda que dejó su participación en la última temporada y que aún no ha sido saldada. Según el resultado económico financiero final, la campaña 2023-2024 en la Liga Argentina (segundo nivel a escala nacional) dejó un pasivo de unos 27 millones de pesos, que está siendo auditado.
El AEC llegó a este paréntesis competitivo, con posibilidad de retomar su sitial en la temporada 2025-2026, gracias a la colaboración de socios, que sumaron contribuciones en calidad de préstamo. Así, se canceló el pasivo ante la Asociación de Clubes (ADC) –organizadora de la competencia– y, de esta manera, mantener su plaza. Pero, con el imperativo de devolver esos empréstitos y sin avales para continuar compitiendo, se resolvió hacer una alianza deportiva con Tomás de Rocamora, de Concepción del Uruguay.
Esto significa que Echagüe cede su lugar en la Liga Argentina, pero conserva la titularidad de la plaza, aunque sin obtener ingreso alguno. La opción era la venta de la misma.
DÍA DE DEFINICIONES
En la misiva enviada a la Comisión Directiva de la Asociación de Clubes (ADC), entidad rectora de la Liga Argentina, se expresó: “Les informamos que en reunión de Comisión Directiva del día 15 de julio de 2024 se ha decidido, en un todo de acuerdo con la oferta realizada por esa ADC, a través del señor Sergio Guerrero, realizar la alianza deportiva con el Club Tomás de Rocamora de Concepción del Uruguay, por el término de una temporada (2024-2025), con la firme intención de reorganizarnos para retomar la participación en Liga Nacional en la temporada 2025-2026, en un todo de acuerdo con los reglamentos de la ADC”.
La decisión se tomó la misma noche en la que un grupo de socios e hinchas se habían congregado en las puertas del club para expresar su rechazo a la potencial venta de la plaza de Echagüe en la Liga Argentina.
En horas de la mañana de ese lunes 15 de julio, desde la Comisión Directiva del AEC se había difundido un extenso comunicado en el que se detalló la delicada situación económica y las opciones que se evaluaban. “Se decidió presentar en la ADC la intención del Atlético Echagüe Club de vender la plaza o, en su defecto, realizar una alianza deportiva por la temporada 2024-2025”, se informó a los asociados a través del parte que firmaron el presidente Gustavo Piérola, la vicepresidenta 1ª Cristina Juri y el tesorero Roberto Rochi.
“Es nuestra intención realizar la gestión que se nos ha encomendado con la mayor responsabilidad posible, por lo que no podemos permitirnos asumir compromisos de esta naturaleza que lleven a la institución a seguros conflictos legales y/o económicos de difícil o imposible solución”, se destacó en un párrafo dirigido a los socios.
LA DEUDA
Al exponer la causa que motivó la determinación, las autoridades electas el último 6 de abril comunicaron: “Luego de finalizada la temporada 2023-2024 (de la Liga Argentina de Básquetbol), el responsable de la misma y exvicepresidente de la institución, contador Marcelo Casaretto, nos hizo entrega del resultado económico financiero final de la temporada recién concluida con una deuda de aproximadamente 27 millones de pesos –que se está auditando–, por gastos de funcionamiento y de los cuales 12 millones aún se debían por conceptos como sueldos de jugadores, cuerpo técnico, personal administrativo, kinesióloga, prensa y representantes de los jugadores; Asociación de Clubes, alquiler de cinco departamentos, hotelería, etcétera”.
Párrafo seguido, acotaron: “En reunión mantenida entre esta Comisión Directiva y el señor Marcelo Casaretto, en representación de la anterior gestión, este se comprometió mediante acta acuerdo a abonar esta deuda, lo cual no cumplió”. Luego de asumir estos compromisos “para evitar los problemas legales y deportivos que vendrían”, el club logró el libre deuda ante la ADC el 5 de julio, pero los desafíos no cesaron.
Así, al momento de tomar la decisión, los dirigentes no solo consideraron las dificultades para retribuir el empréstito recibido por parte de socios, sino el incierto panorama del futuro inmediato. No había posibilidades concretas de lograr esponsorización por parte de empresas y/o particulares y, por si fuera poco, el gobierno provincial analiza derogar la Ley 10.373 de Apoyo a las Instituciones Deportivas en Competencias Nacionales, que realiza un importante aporte al presupuesto.
“Pretendemos un club saneado, libre de deudas y con proyectos de crecimiento institucional como se lo ha propuesto la sociedad echagüense, tarea que se nos ha encomendado y que, sin lugar a dudas, lograremos cumplir”, resumieron, finalmente, desde la entidad.