En el primer día de vacunación contra el dengue en la provincia, la ministra de Salud, Silvia Ciancio, brindó algunas precisiones sobre la campaña que se realiza en forma focalizada y por etapas, luego de la compra, por parte del gobierno santafesino, de 160 mil dosis que serán colocadas a 80 mil personas (son dos dosis con diferencia de tres meses cada una).

En esta primera fase, la campaña involucra a población de adolescentes y jóvenes de 15 a 19 años de áreas priorizadas que están ubicadas en los departamentos 9 de Julio, General Obligado y San Cristóbal.

En los próximos días se incluirá, con el mismo criterio etario, a barrios de las ciudades de Santa Fe, Rosario y Rafaela. Y en la última semana de septiembre llegará el turno del personal de salud (público y privado), bomberos y policías de entre 20 y 39 años.

¿Por qué se eligió a esta población? ¿Por qué la vacuna se colocará en personas de estas edades? ¿Qué recaudos son necesarios si se quiere acceder a la inmunización por vía particular?

Sobre todos estos temas, Ciancio dialogó con Mirador Provincial.

- ¿Por qué se decidió iniciar la campaña de vacunación con este grupo etario, de 15 a 19 años, y no por personas que ya tuvieron dengue?

- Nosotros nos regimos por recomendaciones de la Comisión Nacional de Inmunizaciones (CoNaIn) que es referencia en este tema, entendiendo que esta campaña, si o si, iba a ser focalizada porque no tenemos una disposición masiva de vacunas (Qdenga del laboratorio Takeda Argentina SA), principalmente por la capacidad de producción. Tenemos que buscar la población objetivo y en este punto vemos que donde fue mayor la incidencia de la enfermedad entre personas de 15 y 39 años. Iniciamos la campaña en los departamentos San Cristóbal, 9 de Julio y General Obligado donde la incidencia acumulada entre 2009 y 2024 fue muy alta. Por eso las vacunas se destinan a esa población. Luego entendimos que deberíamos ampliar, teniendo en cuenta la posibilidad que tuvo la provincia de acceder a una importante cantidad de dosis, a la población que nos cuida. Observamos que el grupo de 20 a 39 años de edad había sido muy afectado y eso les ha impedido llevar adelante sus tareas de manera normal.

¿Por qué no a las personas que sufrieron dengue? Primero, porque no tenemos nominalizados a los pacientes que sufrieron la enfermedad; solamente a aquellos que lo han tenido por laboratorio y son unas 50 mil personas en la provincia aunque las proyecciones hablan de 500 mil: es imposible contactar a cada una de esas personas y entendimos que buscando al grupo etario de mayor incidencia seguramente estaremos vacunando a personas que tuvieron dengue.

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- ¿Hay posibilidad de que este plan se amplíe y la provincia pueda acceder a mayor cantidad de dosis?

- Las negociaciones con el laboratorio Takeda comenzaron en mayo, cuando el gobernador decidió iniciar la compra de vacunas al ver que el gobierno nacional no daba precisiones al respecto. Las puertas están abiertas a las negociaciones y accedimos a una importante cantidad de vacunas que estamos recibiendo en etapas. Pero es necesario que el esquema se complete con la segunda dosis; por eso este diseño está pensado con las 160 mil vacunas para 80 mil personas.

La segunda dosis no es un refuerzo; es una dosis más del esquema y para que impacte en lo sanitario necesitamos que esté colocada.

Hay experiencias en jurisdicciones de nuestro país donde hay muy baja adherencia a la segunda dosis y por eso buscamos tener no solo las vacunas sino también los padrones nominalizados de las personas que las van a recibir con nombre y apellido, para ir a buscarlas en la primera y la segunda dosis.

Se hará una evaluación por etapa a través de nuestro equipo de fármaco vigilancia para establecer cómo se va desarrollando la campaña y allí abrir la posibilidad de comprar nuevas dosis. Pero, antes, tenemos que evaluar esta etapa de trabajo.

- El gobierno nacional anticipó que podría acercar algunas dosis de vacuna para zonas endémicas. ¿Santa Fe está incluida en ese listado?

- Estuvimos en contacto con gente de Nación y el lunes próximo tenemos la segunda convocatoria del año al Consejo Federal de Salud (Cofesa). Entiendo que allí vamos a tener precisiones. Extraoficialmente podríamos sumar a algunas regiones de la provincia a alguna cantidad de dosis que aún no tengo definida. Pero la verdad es que fue un poco lenta la llegada de la información (desde el gobierno central) y por eso tuvimos que generar nuestra compra y nuestro propio plan de prevención de dengue.

- Más allá de este plan oficial que están llevando adelante otras provincias, la gente decide colocarse la vacuna por su cuenta. ¿Tiene alguna contraindicación? ¿Requiere la indicación de un médico?

- En principio esta vacuna no está indicada en embarazadas, mujeres lactantes, en personas inmunodeprimidas o que están haciendo tratamientos oncológicos o con corticoides, ni en personas que tengan antecedente de reacción alérgica a algunas vacunas.

Esta es una vacuna de virus vivos atenuados y la prescripción debe ser individual y la compra en la farmacia requiere de una receta. Es importante que cada persona consulte con su médico para que evalúe si por la edad, las condiciones de salud, el lugar donde reside, es una vacuna que debe o no comprar.

- De estas 80 mil dosis, ¿cuantas estarán destinadas a la población joven y cuántas para el personal de salud, policial y de bomberos?

- Son números estimativos porque si bien tenemos a la población nominalizada, las campañas requieren adherencia de la población. Esta no es una vacuna obligatoria. La primera población entre 15 y 19 años es de 40 mil personas.

- ¿Cuando se anuncian los barrios de Santa Fe, Rosario y Rafaela que estarán incluidos en el operativo?

- Esta semana, luego del miércoles, jueves, viernes y sábados estaremos abocados a esas tres ciudades.

- ¿Cuál es el panorama que anticipan para esta próxima temporada luego de un verano con récord de casos de dengue?

- La cuestión climática va a ser un punto de inflexión con respecto a lo que ocurra. El dengue es una enfermedad que vino para quedarse y se comporta por brotes.

Pensamos, diseñamos y estamos ejecutando un plan de prevención cuyo punto estratégico es la prevención del vector y no la vacuna. Dependerá mucho de cuánto sea el compromiso de la comunidad en la prevención, por supuesto acompañada del Estado. Por eso trabajamos en Educación y con los gobiernos locales, con capacitaciones y con la previsibilidad de contar con insumos necesarios cerca de los distritos para los momentos de control focal y bloqueos.

En cuanto a la proyección, no es alentadora para nada. Quizá el pronóstico de menos precipitaciones pueda hacer que generemos algún cambio. Pero tenemos que trabajar en la prevención y me gustaría que la campaña de vacunación no desvíe la mirada de lo que es importante, que es el control del vector.