La imagen se repite en varios sectores de Concordia. Explicaron cuál puede ser la causa, que estaría relacionada con las temperaturas invernales.
Desde Saneamiento Ambiental de la Municipalidad de Concordia informaron acerca de las probables causas de la mortandad de peces en los arroyos que desembocan en el río Uruguay, donde se los puede ver flotando en la superficie desde hace semanas.
El fenómeno no se limita solo a Concordia, puesto que también se ha reportado en otras localidades de la costa uruguaya y en la provincia de Santa Fe.
Carlos Pantaleone, director de Saneamiento Ambiental de la subsecretaría de Medioambiente de la Municipalidad de Concordia, explicó: “Venimos siguiendo la mortandad de peces desde que comenzaron los fríos invernales”. Precisó que “este año se ha dado el fenómeno no solo de un invierno intenso, sino que también ha sido persistente con hasta 20 heladas agronómicas continuas, razón por la cual los peces de nuestros arroyos, especialmente los de ‘escamas’ (sábalos, bogas y palometas) son muy sensibles a la temperatura del agua y por debajo de 13 grados centígrados su metabolismo prácticamente se detiene”.
Como consecuencia, ello provoca que “bajen sus defensas y sea atacado por microorganismos presentes en el agua, principalmente hongos, aunque también las bacterias pueden atacarlos; esto los enferma y es prácticamente irreversible, terminando con el pez muerto”.
“Tuvimos muchos días de temperaturas por debajo de 6 grados sobre cero e incluso en la zona de los arroyos, temperaturas de algunos grados bajo cero en más de una ocasión. No descartamos nada y no queremos aventurar una causa determinante hasta que no tengamos resultados de las muestras que tomaremos de agua y peces en ambos arroyos la semana entrante, pero creemos que la causa determinante de semejante mortandad es un problema climático”, indicó el funcionario municipal.
Y agregó: “Si se fijan bien, la mayoría de los ejemplares muertos son sábalos juveniles que ya tienen varios meses de vida y pesan más de 400 o 500 gramos, lo que evidencia que hay un patrón; estamos coordinando con biólogos locales y con municipios de la costa del río Uruguay para colaborar y llegar a determinar fehacientemente la causa del problema”.
Pantaleone puntualizó que “el fenómeno de mortandad se ha registrado en ciudades como Ubajay, Concepción del Uruguay y Gualeguaychú, también en las costas de algunas poblaciones santafesinas, como Santo Tomé, donde en el río Salado, que es de mucha mayor profundidad que nuestros arroyos, también se vieron peces muertos, aunque en menor cantidad”.
“Es de resaltar que en estos momentos los arroyos tienen muy poco caudal de agua, lo que hace que la disponibilidad de alimentos y oxígeno sea menor ante semejante cantidad de cardúmenes; esto se suma el problema del frío, ya que los individuos son más proclives a enfermarse, por lo que nuestro Municipio está armando un programa de monitoreo de los arroyos locales para implementar, de manera periódica, controles de sus aguas y la flora y fauna que conviva en sus ambientes”, concluyó Pantaleone.