Todos prestan servicio en la Policía de Acción Táctica (PAT). Siete de ellos quedaron en prisión preventiva por 90 días y el restante por un mes. Están acusados de los delitos de violación de domicilio, robo agravado, falsificación ideológica, asociación ilícita y encubrimiento.
Un espectacular y a su vez escandaloso procedimiento policial realizado a mediados de agosto en una vivienda de barrio Belgrano derivó en el pase de la investigación del fuero provincial al federal y múltiples allanamientos en la sede de la Policía de Acción Táctica (PAT) y la casa de al menos 8 uniformados. Y ahora se confirmó la prisión preventiva para 8 policías de la PAT, por los delitos de violación de domicilio, robo agravado, falsificación ideológica, asociación ilícita y encubrimiento.
Los policías, que fueron detenidos en forma preventiva el miércoles 2 de octubre, son los suboficiales de policía: Fernando F., Gerardo P., Guillermo T., Iván S., Jesús B., Sergio R., y sus jefes, los oficiales Agustín M., y Renzo M., que fueron detenidos el miércoles 2 por orden del Ministerio Público Fiscal.
La imputación, a cargo de los fiscales Soledad García; María Virginia Sosa; Javier Arzubi Calvo y Andrés Montefeltro, sostiene que el 13 de agosto pasado, a las 16.30, los seis suboficiales llegaron hasta un domicilio ubicado en Forest al 5600 (casi esquina Teniente Agneta), en barrio Belgrano.
Ingresaron a la casa y redujeron a 3 personas adultas, dos hombres y una mujer, que estaban en la casa (a los dos hombres los esposaron y a la mujer la encerraron en un dormitorio con sus dos hijos –de 1 y 8 años– y bajo amenazas y sin testigos, realizaron una requisa de la vivienda y de los autos de los varones.
Al parecer, todo se hizo bajo instrucciones del oficial Renzo M. (jefe), quien en un momento llegó al lugar junto con el oficial Agustín M. (subjefe).
Cuando se comunicó el hecho en la Fiscalía de Flagrancia de la Fiscalía Regional II, se dijo que habían llegado hasta esa casa luego de una persecución policial que seguía a dos varones. Y que al ingresar se habían encontrado en distintos elementos sobre una mesa: 4 armas de fuego (escopetas y carabinas), 4 teléfonos celulares; 3 granadas de gas lacrimógeno; alrededor de medio kilo de cocaína y una balanza.
Dos días después del procedimiento, las 3 personas detenidas en la vivienda de calle Forest al 5600 fueron a la audiencia imputativa en el Centro de Justicia Penal de Rosario, donde dieron su versión de lo sucedido casi 48 horas antes, en una causa que se tramitó como ‘microtráfico’.
Pero ante las nuevas evidencias, el fiscal de Flagrancia Rodrigo Urruticoechea pidió que la causa pase al fuero federal. El juez provincial Gonzalo Fernández Bussy hizo lugar al pedido y es así que la investigación pasó al Área Investigación y Litigio Casos Complejos-Oficina Criminalidad Económica, Trata de Personas y otros de la Unidad Fiscal Rosario
Y en base a distintos testimonios y el cruce de información, los fiscales Soledad García; María Virginia Sosa; Javier Arzubi Calvo y Andrés Montefeltro constataron una gran incongruencia entre los relatos y el acta de procedimiento. Se presume que en lugar de medio kilo de cocaína había alrededor de 15 kilogramos; cerca de 50 mil dólares y casi 300 mil pesos, entre otras cosas.
Estos y otros datos, entre ellos que los uniformados estaban fuera del cuadrante asignado para patrullar, decidieron a los fiscales a pedir al juez Carlos Vera Barros que avale las órdenes de allanamiento en la sede de la PAT, ubicada en Lola Mora al 100 bis y en los domicilios particulares de los uniformados implicados: tres en Rosario; dos en Santa Fe; uno en Vera; uno en Fortín Olmos; y el restante en Tostado. Dicho operativo fue hecho el miércoles por personal de Gendarmería y de la Policía Federal.
Y este viernes 4 de octubre avaló las imputaciones a los 8 efectivos de la Policía de Acción Táctica (PAT). A 7 de los policías se les dictó la prisión preventiva por 90 días y al restante por 30, por los delitos de privación ilegítima de la libertad agravada porque había un menor, porque eran policías y porque eran varios; violación de domicilio, robo agravado, falsificación de documentos, asociación ilícita y encubrimiento.