El “Canalla” debió jugar el sábado pasado en San Juan a las 17, con una sensación térmica de 45 grados. Los jugadores elevaron sus reclamos, pero la fecha que viene reciben a Atlético Tucumán a la misma hora.
En el fútbol argentino se están escuchando voces de protesta por los horarios en los que se programan muchos partidos, con el verano en su punto alto y en plena ola de calor. Por ejemplo, a las cinco de la tarde del sábado pasado, cuando Rosario Central visitó a San Martín de San Juan, en esa provincia se registraba una temperatura superior a los 40 grados y una sensación térmica de 45.
Los protagonistas se quejaron, pero no hay mucho por hacer, ya que el próximo partido del “Canalla” será el sábado que viene también a las 17. Sólo queda esperar que las altas temperaturas den una tregua y que el árbitro tenga piedad de los futbolistas y detenga el juego varias veces para que puedan hidratarse.
“La verdad es que fue una locura jugar a la hora en que lo hicimos con la temperatura que había”, se quejó Ignacio Malcorra, uno de los capitanes de Central. “Por lo que averiguamos, San Martín pidió jugar en este horario, así que nosotros no podemos decir nada. Es más, nuestro próximo partido de local ya está programado para las 17. Lo cierto es que hace mucho calor para jugar en estos horarios”, completó “Nacho”.
Malcorra afirmó que “uno no puede poner excusas y tiene que jugar, pero la realidad es que el sábado en San Juan terminamos muertos porque estas temperaturas generan más cansancio”. Luego reconoció que “el calor lo sufrimos los dos, pero a nosotros creo que nos perjudicó más que la cancha estaba muy mala, y con ellos bien replegados para no darnos espacios, se nos hizo todo más difícil”.
Después de un empate que tuvo sabor a poco, Malcorra evaluó: “Creo que tuvimos las chances como para ganarlo. Por eso nos fuimos de San Juan con un poco de bronca, porque queríamos llevarnos los tres puntos pero no se pudo”.
Ariel Holan, entrenador del conjunto rosarino, coincidió con el análisis de su conductor: “Hicimos el mejor partido posible, nos vamos con sabor agridulce”, señaló. Sobre el desarrollo del juego, el entrenador comentó que “el campo de juego estaba muy complicado; ellos armaron una línea de cinco defensores y cuatro volantes para cerrarnos los caminos a nosotros”.
Para Holan, en la ineficacia estuvo la explicación de que no hayan podido llevarse los tres puntos de San Juan: “La diferencia estuvo en la definición. La estrategia de ellos fue buena, no nos permitió darle agilidad y velocidad a los pases. Ante la imprecisión, ellos llegaban a cubrir en todos lados. Así y todo tuvimos cuatro chances muy claras”, explicó.
