San Javier, Santa Fe, Rosario y San Cristóbal, entre otras localidades del territorio santafesino, recibieron grandes precipitaciones. Continúa un alerta por tormentas.
Calores extremos, alta humedad y un clima tormentoso derivaron en un escenario de mucha lluvia en buena parte de la provincia de Santa Fe. Localidades como San Javier, Santa Fe, Rosario y, más al noroeste, San Cristóbal, lidiaron en las últimas horas con el agua caída.
Si bien representa un alivio para la ruralidad, también deben atenderse los desafíos que se generan en las zonas urbanas, con anegamientos, desbordes y filtraciones que provocan inconvenientes ante la persistente caída de agua.
Según reporta el periodista Luis Verón, después de un extenso período de altas temperaturas y sequía, este fin de semana la esperada lluvia llegó a San Javier y la región, con un acumulado de 134 milímetros en las últimas 48 horas.
Si bien el agua fue una bendición para el sector agropecuario, ayudando a sofocar incendios y revitalizar los campos tras semanas sin precipitaciones, en la ciudad generó algunos inconvenientes en las zonas más bajas. No obstante, no hubo necesidad de evacuar familias.
Tras un extenso período de altas temperaturas y sequía, este fin de semana llegó la esperada lluvia a San Javier y la región.Foto: Mirador Provincial
La intendente de San Javier, Ana Maribel González, recorrió los sectores afectados junto al secretario de Obras y Servicios Públicos, Damián Lezcano, y personal municipal. Durante la inspección, constataron que los desagües principales respondieron bien, aunque algunos anegamientos fueron causados por basura acumulada en los drenajes.
Ante esta situación, el municipio habilitó líneas de contacto para emergencias y reforzó su trabajo en el territorio. “Estamos en terreno, trabajando para mejorar la situación de los vecinos afectados por las inclemencias del tiempo”, aseguró González.
El personal municipal estuvo disponible desde el primer chaparrón y mantiene contacto permanente con organismos como la Policía, EPE y Protección Civil. En la región, la lluvia trajo un necesario alivio para el campo y contribuyó a extinguir incendios que afectaban miles de hectáreas en zonas como Cacique Ariacaiquín y La Brava.
Este domingo la ciudad de Santa Fe se presentó con cielo cubierto y lluvia débil a primera hora de la mañana. Se espera que continúe con mayor nubosidad durante el resto de la jornada, según el Servicio Meteorológico Nacional (SMN).
En base al pronóstico de lluvias, hay probabilidad de tormentas fuertes con porcentajes entre 70% y 100%. Continuarán las lluvias durante el resto del día, con porcentajes más bajos.
Según el SMN, rige un alerta naranja por tormentas fuertes correspondiente al departamento La Capital. El área será afectada por tormentas fuertes, algunas localmente severas. Las mismas estarán principalmente acompañadas por abundante caída de agua en cortos períodos de tiempo. Se prevén valores de precipitación acumulada entre 70 y 100 mm, pudiendo ser superados en forma puntual.
En base al pronóstico extendido, este lunes se espera una mínima de 24° y una máxima de 36°. Se esperan tormentas aisladas durante la mañana y nublado en la tarde/noche.
El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) emitió un alerta meteorológica de nivel naranja por tormentas en el departamento Rosario y otros del sur provincial durante la tarde de este domingo, en tanto que para la noche de la jornada renovó el nivel amarillo.
El SMN emitió un alerta meteorológica de nivel naranja por tormentas en el departamento Rosario y otros del sur provincial.Foto: Mun. de Rosario
“El área será afectada por lluvias y tormentas de variada intensidad, algunas fuertes. Las mismas estarán acompañadas principalmente por abundante caída de agua en cortos períodos”, informó el organismo en la advertencia generada a las 6.34 de este domingo, que abarca además a los departamentos Constitución, Iriondo y San Lorenzo.
En cuanto a los valores de precipitación acumulada previstos, se señala que oscilarán entre 70 y 100 mm durante el alerta naranja, y entre 30 y 60 mm en el alerta amarillo, pudiendo en ambos casos ser superados en forma puntual.